Touch Me (TERMINADA) (sin Correcciones)

Desesperación

Hola mis Cachorrit@s

les traigo un nuevo capitulo

espero les guste

los quiero!

*Engel Rosse*

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Capítulo 26

Lunes 20:50 hrs

Hace diez minutos había terminado la conversación con Nathaniel. Mis manos aun temblaban y mis ojos estaban totalmente rojos.

Tenia que hacer lo que me pedía o dañaría a Isabel, un él quería hacer un cambio, la libertad de mi hermana por tenerme a mí. Aunque estaba aterrada de lo que pudiera sucederme, estaba aun mas asustada de lo que pueda hacerle a Isabel si no voy, esta es mi pelea no la de ella.

No deseo que ella sufra por mi culpa.

Lo más difícil será deshacerme de Thomas, tenia una puerta trasera, pero necesitaba el auto de mi guardaespaldas para llegar al lugar acordado y debía ocurrírseme pronto... fui a mi habitación y me puse un jean, con una polera y un polerón, tome unas cuantas pastillas que me dio mi médico y las guarde en el bolsillo de mi polerón.

De camino hacia la puerta pase por la cocina y puse el hervidor por si todo resultaba como esperaba.

Sali decidida de la casa hacia la camioneta estacionada de mi guardaespaldas.

- Thomas -le dije intentando actuar normal.

- Dígame señorita- dice el serio saliendo de la camioneta.

- ¿quería decirte si quieres tomarte una taza de té conmigo? está haciendo algo de frio

- No creo que sea correcto señorita- me dice mirándome.

- Es que... la verdad me siento un poco inquieta estando sola en casa y Erick aun no llega... por favor.

- Bueno... está bien si solo es un té.

Thomas puso seguro a la camioneta y guardo las llaves en su chaqueta, camine hacia mi casa con el detrás de mí.

- Ponte cómodo, iré a preparar el té

Thomas se sentó en uno de los sillones, que gracias a dios daban la espalda a la cocina, se veía cansado... bueno al menos lo ayudaría a descansar por unas horas.

En la cocina busque dos tazas, saque 3 pequeñas pero muy efectivas pastillas para dormir, que el médico me receto después del ataque en el antro, ya que estaba tan asustada que no podía dormir, yo solo tomaba la mitad y caía en un sueño profundo hasta el otro día. Así que con el gran tamaño de Thomas 3 espero que este bien, las molí sobre una servilleta lo mas que pude, las eché en la taza azul y luego agregue el agua y un poco de endulzante. Me preparé una taza para mí también y que no se viera sospechoso y me dirigí al living.

- Siento la tardanza, no encontré azúcar, así que le coloque un poco de endulzante, espero que no te moleste. - dije entregándole la taza con el sedante.

- No, no hay problema- dice llevando la taza a sus labios y darle un pequeño sorbo. - sabe un poco diferente.

- Debe ser el endulzante- le digo tomando de mi taza para que no se de cuenta de mi nerviosismo.

- Si, no estoy acostumbrado a ello.

En silencio bebimos el té, Thomas termino rápidamente y dejo la taza sobre mi mesa de centro.

- Bueno, muchas gracias, pero debo volver a mi lugar- dice parándose y logro notar que se tambalea levemente.

- Ohh!! claro

Lo veo caminar hacia la entrada, pero antes de abrir la puerta, un gran mareo hace que se afirme de ella, me levanto fingiendo preocupación.

-¿Estás bien? Debes estar muy cansado - le digo tomándolo del brazo y ayudándolo a sentarse en el sillón en el que estaba antes. - iré por algo de agua.

- ¿Qué me hiciste? - me dice tomando mi brazo

- Yo... yo lo siento tanto...- digo no pudiendo aguantar más las lágrimas. - tengo... que hacerlo.

- ¿por qué? - dice intentando con todas sus fuerzas no dormirse.

- Lo siento...- digo una vez que se a dormido profundamente y saco las llaves de su bolsillo.

Tomo mi chaqueta y mi celular mientas salgo de la casa hacia la camioneta.

++++++

Llevaba poco mas de 2 horas en carretera, estaba empezando a desesperarme cuando comenzó a sonar mi teléfono con el remitente de Isabel, pero era obvio que no era ella la que llamaba.

Tome mi celular y conteste.

- Detén la camioneta. - detuve la camioneta de golpe. - bien. ahora baja de ella.

En silencio bajé de la camioneta y rápidamente di con ellos en el bosque, estaba apoyado en un árbol y tenia a Isabel inconsciente en un árbol cercano.

Mi teléfono cayo al suelo y corrí hacia ella.

- Quieta- me dice sacando un arma y apuntándome con ella, para luego dirigirla hacia Isabel. 

- ¿Qué le hiciste? - le digo con ira en mi voz.

- Nada... solo esta inconsciente. - me dice volviendo el arma a mi- ella no es lo que quiero, solo un medio para conseguirlo y ya te tengo... así que no la necesito-dice regresando el arma y disparando al inconsciente cuerpo de Isabel.

- ¡¡NOO!!!- corro hacia ella, pero no alcanzo a tocarla ya que siento la mano de Nathaniel sobre mi rostro y persibo un xtraño olor, entonces mi vista se vuelve borrosa y todo se vuelve obscuridad... la voz de ese demonio es lo último que escucho.

        

-  Bienvenida a mi infierno Preciosa.