Agente Espinoza y el agente Morris
Luego de que Sam me tranquilizara, ambos fuimos a la resección donde le explique (con un par de omisiones) a Moni que esta tarde no podía presentarme a trabajar, esta con una sonrisa me dice que no me preocupe que ella se puede encargar de todo y posterior a un par de minutos más de charla me despido de la rubia y así ambos salimos del campus.
Como yo andaba con el auto de Gus y Sam con su moto acordamos que ambos iríamos en su respectivos vehículos, pero que estaría lo más cerca que le sea posible.
Posterior a que él me diera un casto beso en los labios Sam se retira a donde estaciono la moto y yo voy hacia el vehículo, ingresando a este una vez haber llegado a donde lo había dejado estacionado para así ponerme en marcha.
El trayecto a mi departamento se me hizo largo y tedioso.
No podía dejar de pensar en lo cerca que estuvo una vez más Fox en tenerme en sus manos y así poder hacer lo que quiera conmigo. De tan solo pensar en que podría llegarme a pasar si ese lunático me tuviese nuevamente en sus manos, mi cuerpo empieza a temblar.
Y pensar que hace tan solo un mes atrás yo veía a Daniel como el hombre de mi vida, con el que podía armar una familia, como el amor de mi vida, y resulta que solo jugaba conmigo, que yo era un pasatiempo más en su vida y que cuando se obstinara realmente de mi me mandaría a eliminar.
¿En qué momento mi vida cambio tanto?
Mis planes eran convertirme en una diseñadora renombrada y no eran enterarme que mi novio es un mafioso de los más peligrosos de New York y que conviví con ese lunático por dos años y pico, permitiéndole que me hiciera la vida un tormento y que jugara con mis sentimientos.
Por el amor a dios, ¿Qué demonios estaba pensando cada vez que le perdonaba unos de sus arranques?
"Ese era el detalle mi querida Juli, no pensabas, tu corazón era el que mandaba y no tu cerebro."
Para mi mala suerte en esta oportunidad tú tienes la razón. Nunca preste atención a las señales y era más fácil ignorar, acostúmbrame y pensar que alguna vez el cambiaria, que si lo perdonaba con las condiciones de que no lo volviera a hacer el tomaría conciencia, cuando la realidad era que yo para él no valía absolutamente nada, y que un mafioso con sed de sangre jamás cambia.
Ahora, ¿Qué hubiese sucedido si yo no me hubiese topado con Sam?
Probablemente hubiese seguido en la ignorancia, creyendo que mi amor por Daniel seguía vivo y que el cambiaria. Como agradezco que Sam haya tomado la iniciativa de seguirme en ese supermercado.
Siento que en la vida para darse cuenta de las situaciones uno se debe topar con personas que le hagan abrir los ojos, personas con las que puedas empezar a comprar y decir, "oye esto no lo hace esta persona y el sí" y preguntarse el por qué no lo hace, allí está la clave para abrir los ojos, para entender lo que te rodea.
Eso fue lo que me sucedió con Sam.
Llego de improvisto, fue un torbellino que revoluciono mi forma de sentir y Daniel a partir de allí empezó a quedar en segundo plano, por más que lo quería mantener vivo dentro de mí, por más que me quería convencer que su ira y celos irracionales irían cambiando con el pasar del tiempo a mi lado.
Sam desde el instante que lo conocí la atracción fue innegable, el cambio tantas cosas y me enseño otras más, como por ejemplo que el amor no es llorar por las noches y preguntarse cómo hacer para cambiar a esa persona para que tus desilusiones sesén. Si no cambia aléjate, porque el daño te los estás haciendo tú.
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Amor En La Gran Manzana
Romance- Hay oraciones o palabras que debemos pensar antes de decirlas, ya que se los podrías estar diciendo a la persona menos indicada. Julieth Franco