Mi Pequeño Secreto

•Ataque Al Castillo Dragneel•

Horas Antes...
Gray

Cuando Igneel, Lucy y Natsu se fueron, me fui a completar mi entrenamiento. Habíamos empezado a entrenar para no ser tan inútiles en las peleas, un tipo llamado Laxus nos entrenaba y era más duro con los hombres que con las mujeres.

Cuando llegué al campo, vi a Erza, Jellal y Juvia hablando con una expresión preocupada, pero me preocupó más cuando Juvia me vió y no se lanzó a abrazarme.

-Pasa algo?, pregunté cuando estuve a la par de ellos.

-Gray, tenemos problemas, dijo Erza.

-Qué?

-Gray-sama, hay monstruos tratando de pasar la barrera de protección, contestó Juvia.

-Laxus y los demás fueron a dar un chequeo para ver en qué estado está la barrera, dijo Erza seria.

Natsu había puesto una barrera para que ninguna criatura que no sea un dragón entre, lo hizo por la seguridad de Lucy. Todo ha estado en calma hasta ahora.

-Qué tipo de criaturas?, pregunté serio.

-No lo sé pero no se ven amigables, contestó Jellal.

De pronto una alarma se escuchó por todo el castillo, alarmandonos a nosotros. Salimos corriendo hacia la entrada principal y vimos como los monstruos estaban entrando, todos corrían hacia los refugios y nosotros agarramos las armas y fuimos a buscar a los demás.

-Maldita sea, Natsu, ven rápido, pensé mientras corría.

Eran monstruos deformes que escupían cualquier tipo de líquido que existiera. Destruían todo a su paso y no parecían buscar algo en concreto.

Nos encontramos con los demás de camino al centro.

-Qué pasó?, pregunté desesperado.

-Son demasiados. Tienen un arma desconocida que hizo que la barrera desapareciera, explicó Laxus agitado.

-Qué clase de arma?, preguntó Jellal.

-Tiene forma de flor pero se ve que es muy poderosa. Es amarilla y brilla con intensidad, el líder la lleva en la boca, contestó Gageel.

Los monstruos al vernos nos comenzaron a atacar, cubrimos a Levy para que ella fuera a avisar a Natsu, como era la más pequeña podía pasar desapercibida fácilmente. Los monstruos gruñían con odio.

Nos dividimos en parejas y atacabamos a cualquier monstruo que veíamos, derribabamos algunos y algunos nos lograban derribar.

-Juvia!!, grité al verla caer.

-Gray-sama, dijo con debilidad.

-Juvia, estás bien?, pregunté tomandola en brazos.

-Gray-sama, Juvia tiene miedo, dijo con los ojos cristalizados.

-Tranquila Juvia, yo te voy a proteger, dije para tranquilizarla.

Todo el lugar era un desastre, todas las casas estaban destruidas al igual que las calles. Los guardias se habían unido para ayudar a derrotar a los monstruos.

Estaba en el suelo junto a Juvia, quien estaba muy débil, cuando tres monstruos se acercaron a nosotros y cuando pensé que era el fin para nosotros dos, los tres monstruos fueron consumidos por el fuego. Al caer vimos a dos grandes dragones rojos.

-Natsu!!, grité con fuerza.

Los dos aterrizaron frente a mí y Lucy vino corriendo hacia Juvia.