Mi Pequeño Secreto

•Te Amo•

NT: Quiero decir que nunca he escrito un lemmon pero si he leído muchos así que espero que salga bien y disfruten del capítulo :)

Lucy
No, no es un problema de sirena, soy celosa y no me gusta que toquen lo que es mío y Natsu es algo que me pertenece. No sé ni me interesa con cuantas mujeres se haya acostado en mi ausencia pero juro que seré la última con la que se acueste porque mi nombre es Lucy Heartfilia.

En este momento, vamos camino a la casa de Natsu ya que el viejo de Igneel salió con sus amigos otra vez. Son las 8:30 p.m, perfecta hora para tener sexo. Casi lo llevo a rastras pero sé que le gustará. Vamos en silencio y aveces él me pregunta algo pero yo solo asiento o niego con la cabeza.

Llegamos a la casa de Natsu, nos adentramos a la casa y rápidamente llegamos a su habitación. En cuanto cierra la puerta, Natsu me acorrala en la puerta y junta nuestras frentes.

-Creías que ibas a tener el control esta noche?, dijo con voz ronca y seductora.
-Amm..., ¿qué me pasa? No puedo hablar. Su cercanía me pone nerviosa.
-Vamos Luce, eres mía y yo tuyo y si quieres hacer esto lo haré con gusto...mucho gusto, dijo mirandome fijamente a los ojos. ¡Dios este hombre me va a matar!
-N-No retes l-la fuerza de u-una sirena, tartamudeé sin quitar mi mirada en la suya.

En ese momento aprisionó mis labios contra los suyos, y al principio era dulce y lleno de amor pero luego subió el nivel y se volvió salvaje y apasionado. Mordió mi labio e hizo que abriera la boca para que así pudiese meter su lengua en mi boca. Se movían al compás, una con otra. Empezamos a movernos hasta la cama mientras nuestras ropas desaparecían a cada paso que dábamos.

-Estoy ardiendo, dijo Natsu separándose de mis labios unos centímetros, cuando terminó de hablar volvió a mi boca.

Luego bajó a mi cuello dando leves mordidas y lamidas. Me estoy...¡no! Estoy súper exitada, este hombre es ardiente y perfecto.

Me acostó con delicadeza en la cama y bajó aún más, hasta mis pechos. Succionaba y daba lamidas a mi pecho derecho mientras que masajeaba mi pecho izquierdo. Subí mis manos a cabello y me aferraba a él con dureza, rasguñé su espalda cuando bajó a mi abdomen.

-E-Espera, dije con dificultadad antes de que él tocara mi zona "v" -Yo debería tener el control de esto. Yo fui la de la idea, estaba muy agitada.
-Otro día será, pececito, contestó con voz ronca y aprisionando mi zona "v".

Daba grandes lamidas y entonces introdujo un dedo ahí adentro haciendo que pegara un fuerte gemido, pero me tapé la boca rápidamente y entonces introdujo otro dedo. Arqueé la espalda y comenzó a mover sus dedos dentro de mí.

-Na-Natsu!, jadeé -N-No, dije con dificultad.
-Quieres que pare?, preguntó él moviendo más sus dedos.
-N-No, contesté.

Entonces subió hasta mi boca y la beso con dulzura mientras movía sus dedos en mi interior.

-T-Te quiero a-a tí, dije en su oído. Y como su fuese un genio de la lámpara, sacó sus dedos e introdujo con suavidad su gran miembro -Ah~, gemí otra vez con fuerza solo que está vez no me tapé la boca.

Comenzó a moverse y con cada embestida que daba me sacaba un gemido. Escuché como él también gemía y decía mi nombre sin parar.

-Más rá-rápido por favor, dije y me aferré a su espalda. La aruñaba y mordía sus hombros.
-E-Estás muy estrecha, Luce, m-me encanta, dijo con dificultad mientras me embestía más rápido.
-Ah~Natsu~Ah!, gemía en su oído.

Después de un rato sentí como bajaba la velocidad, así que supe que estaba cansado y se tiró a mi lado pero no lo dejaría. Lo castigaré por no haberme dejado tener el mando. Con mi magia cree una serpiente de agua y enrrollé sus manos a la cabecera de la cama.