Cuando llego al hotel eran las 4:30 A.M , al ver la hora en la sala de estar, creyó que funcionaba mal, pero al ver su reloj de pulsera pudo verificar que el horario estaba bien. Por un segundo, pudo haber jurado que desde que se fue hasta que volvió, solo había transcurrido una hora, todo fue demasiado rápido. No quería quedarse mucho tiempo en la sala de estar, por miedo a que Lio la encontrara, al tener ese pensamiento se drigió de inmediato al ascensor, que por cierto no tardó mucho en llegar.
Su habitación se situaba en el piso 14 y el ascensor era algo lento, por lo tanto tardaría un rato llegar a su piso. Emma no sabía que hacer, justamente por eso no quería tomar riesgos, pudo haberse quedado tranquilamente en España y vivir su vida común sin ningún tipo de situaciones enredadas. Todo esto pasaba por su cabeza mientras ponía las manos por encima de sus ojos y empezaba a inhalar y exhalar brutalmente. Pudo sentir como su aire se agotaba, pudo sentir como su presión disminuía, pudo sentir que si seguía encerrada un segundo más allí adentro, se desmayaría. Cuando imagino que no aguantaría un segundo más, las puertas se abrieron y con ellas entró el aire fresco.
Emma salió inmediatamente de allí y se encaminó lo más rapido que pudo a su habitación. Al llegar a la puerta, giro el picaporte para ingresar a su habitación. El sonoro portazo que hizo al cerrar, logró despertar sobresaltada a Magui. Emma no pensó en eso, no pensó en que si Magui la veía sollozando probablemente se diera cuenta de que había pasado, no pensó que podría despertarla, ni siquiera recordó que compartía habitación. Miles de cosas que debió haber pensado o recordado en ese momento habían desaparecido de su cabeza, solo podía sentir el dolor, y lo sentía, acompañado de interminables lagrimas que estaban desesperadas por salir de sus ojos mientras ella estaba sentada contra la puerta y ponía sus manos en su cabeza, con los brazos apoyados contra las piernas. A la mierda ser fuerte o aparentar que lo era, solo servía para aguantarse y guardarse el dolor dentro y que el peso que sentía en sus hombros fuera aumentando.
Sintió como alguien se sentaba junto a ella y la tomaba en sus brazos, como alguien tomaba su mano para que no cayera en ese pozo en el que se sentía perdida, como su amiga estaba ahí para protegerla y consolarla. Apreció que Magui no le preguntara que le sucedía, porque lo último que quería era explicar que le estaba pasando y que a medida que contara el relato, sentir revivir el momento en la playa. Pero Magui decidió quedarse callada no solo por saber que eso pondría peor a Emma, sino porque también podía imaginarse que había sucedido. Unos minutos después de que Emma se fuera, escuchó que alguien llamaba a la puerta. Cuando fue a ver de quien se trataba, pudo ver a Lio frente al marco de la puerta con una cara algo preocupada.
Lio: Hola
Magui: Hola
Lio: ¿Sabés a donde fue Emma?
Magui: ¿Y a Anto no le importa que busques la localización de otras chicas?- preguntó cruzando los brazos
Lio: Magui, por favor...- pidió con expresión frustrada- necesito urgente hablar con ella- su cara de suplica y los años que lo conocía, la convencieron de hablaba enserio y del corazón
Magui: Fue a Insomnio, es un boliche...
Lio: Si ya se donde es, gracias- dijo apresurado para luego marcharse a toda prisa
Mientras tanto, Lio entraba a su habitación tratando de hacer el mínimo ruido posible. Pero ni bien cerró la puerta sigilosamente, la luz se encendió y con ella, apareció Antonela recostada en la cama.
Antonela: ¿Donde estabas?- pregunto con voz preocupada y rostro afligido
Lio: En la mañana te explico, ahora estoy muy cansado- dijo mientra tomaba su pijama y se encaminaba al baño.
Antonela: ¿Estuviste llorando?- preguntó con el expresión confundida, pero Lio solo cerró la puerta del baño a modo de respuesta- Lio contame que paso- pidió entre sollozos mientras golpeaba la puerta con las palmas de la mano- ¿En que nos equivocamos? ¿que hicimos mal?- dijo volviendo a la cama con el llanto en sus ojos.
Todavía tenia el pijama en la mano, pero su tacto no lo sentía, fisicamente no sentía nada enrealidad, sentía como si fuera un alma, no sentía su propio cuerpo. Antonela tenía razón, ¿en que momento las cosas salieron mal? ¿en qué momento la idea de salvar su matrimonio se volvió absurda? lo único que sabía fue que cuando se dió cuenta y despertó, toda su vida había cambiado, mucho antes de Emma. Su matrimonio con Antonela no era mismo desde hace 2 años. Simplemente cuando pudo reaccionar, se dio cuenta de que él y ella ya no hablaban, solo eran dos extraños conviviendo en una misma casa. Y ahora aparecía Emma en su vida, y luego de la nada Antonela llega a Brasil a querer reparar la relación. Pero como odiaba ver sufrir a Emma, también odiaba ver sufrir a Antonela. Había tomado una decición, salió del baño y encontró a Antonela acostada en la cama, abrazada a una almohada y con la cara observando al vació. Al escuchar la puerta cerrarse tras Lio, volteó la cabeza hacia él y se quedo mirándolo ¿con odio?¿con tristeza?¿con seriedad? no, solo lo miraba sin emitir ninguna expresión.
Lio: Anto...- dijo con voz suave mientras se sentaba junto a ella en la cama
Antonela: Yo también quiero el divorcio- dijo volviendo a acostarse
Lio asintió pero no quería que la conversación acabara ahí.
Lio: Anto, no quiero perderte - dijo mientras la tomaba de la mano
Antonela: Yo tampoco- dijo mientras se incorporaba, quedando cara a cara con él- Lio quiero divorciarme, pero seguis siendo muy importante en mi vida como para echarte de ella- mientras decía esto, le acariciaba con ternura la mejilla
Lio: Te entiendo, es como a mi me pasa con vos, sos muy especial y te quiero demasiado, es como que nos llevariamos mejor y disfrutariamos pasar tiempo juntos si cada uno hiciera su vida por separado.
-Nos querriamos más como amigos- dijeron ambos al unísono y luego sonrieron
Antonela: En realidad yo hace tiempo creí que esta idea de salvar nuestro matrimonio era algo absurda
Lio: Yo también pero no dije nada porque no quería herirte
Antonela: Yo también
Lio: Que idiotas
Antonela: la verdad- dijo sonriendo
Lio: Creo que en parte lo que nos lo impedía era que iba a resultar raro no estar juntos después de estar tanto tiempo en pareja
Antonela: También nuestra relación no era muy sana
Lio: Mucho estrés- al decir esto Antonela asintió- entonces... ¿amigos?
Antonela le dirigió una mirada dulce y luego lo abrazó, Lio le correspondió el abrazo. Sentía como si se hubiera desatado un yunque del cuello. Se sentía tan bien decir la verdad y el hecho de que Antonela pensara igual que él, hizo el proceso de separación mucho más fácil de lo que esperaba. Aunque todavía faltaba decir una parte de la historia.
Lio: En verdad...- le explico mientras se separaba suavemente de ella- creo que estoy enamorado de alguien
El "creo" solo lo utilizo para aliviar un poco la noticia. En ese momento se preparó para una posible mirada de odio por parte de Antonela. Pero ella solo parecía sorprendida, no enojada, sorprendida.
Antonela: Guau- dijo sonriendo y con una cara de no saber que decir- eso no me lo esperaba, Lio- dijo tomándole las manos- yo solo quiero que seas feliz
Lio: ¿No te molesta?- pregunto algo impresionado por la reacción tan madura de su esposa
Antonela: Lio seamos honestos, hace dos años que no vamos ni para adelante ni para atrás, no soy ingenua, es obvio que alguien mas iba a aparecer en tu vida- dijo encojiendose de hombros
Lio: Gracias
Antonela: Bueno ¿quién es la afortunada?
Lio: Emma
Antonela: Es una chica con suerte- dijo dandole suaves golpecitos en la mano
Lio: Antonela, sos un ángel, no se que decir- dijo con una sonrisa de gratitud- ojala pudiera verte así de feliz
Antonela: En realidad..., cuando vos te fuiste a Brasil, me encontré de sorpresa a un antiguo novio que dejamos de vernos porque te conocí a vos, y estuvimos saliendo solo como amigos, y no te enfades conmigo porfavor- dijo con cara de culpa- pero volví a sentir esa felicidad y esa vitalidad que uno siente cuando realmente está enamorado a y hace tanto tiempo no me sentía así.
Lio: ¿Enojarme?- preguntó con una sonrisa que dejaba ver sus dientes blancos- Antonela, no me puedo sentir más feliz por vos- dijo mientras la abrazaba y ella lo correpondía, ¿podía ser posible que su vida por fin se estuviera arreglando?- Solo una duda
Antonela: Decime
Lio: Si vos no querías seguir casada conmigo... ¿Por qué viniste a Brasil?
Antonela: Es que no vine para reconciliarnos, vine para decirte que había conocido a alguien más
Lio: Ah...
En ese momento, el clima se tornó incomodo, pero luego pasaron a otro tema más agradable y olvidaron el asunto.
A la mañana siguiente, Emma abrió los ojos y al instante recordó lo sucedido en la playa, quería pensar que solo fue una pesadilla, pero en el momento en el que despertó supo que todo aquello fue real. No quería levantarse pero debía hacerlo, desganada, salió de su cama, recogió la ropa que usaría para ir al aeropuerto y entro al baño a vestirse. Cuando salió, recordó que no había guardado su ropa en el equipaje para irse, pero al ver su cara de frustración, Magui le dijo:
-Quedate tranquila, guarde tus cosas cuando fuiste a Insomnio
-Gracias- dijo con voz aspera debido a los gritos y el llanto
-De nada- solo esbozó una pequeña sonrisa
Bajaron juntas con sus maletas en el ascensor, la sola idea de que tenía que entrar allí le producía mareos al recordar la falta de aire que sintió allí. Cuando las puertas se abrieron, pudieron ver que todo el grupo las estaba esperando en la sala de estar. Faltaba media hora para que llegaran los remises que habían reservado, pero por las dudas decidieron adelantarse. Al verlos a todos allí juntos, Emma sintió el impulso de abrazar a cada uno de ellos, verlos le producía una felicidad extraña, era como si no los hubiera visto en un largo tiempo.
Pocho: Ahí llegaron las dormilonas-Emma no se contuvo y fue directo a abrazarlo, no podía tener un mejor hermano, ahora más que nunca lo necesitaba- Okey... eso no me lo esperaba- dijo mientras la abrazaba- ¿estas bien?
Emma: Si no se, me dieron ganas de abrazarte- dijo encojiéndose de hombros
-AWWWWWW
Dijeron todos los presentes a modo de burla
Mascherano: No te confíes Pocho, seguramente siente culpa por algo y te quiere compensar con amor
Emma: Que raro vos desconfiando- dijo sarcástica sin poder evitar una sonrisa, lo que necesitaba en ese momento eran las típicas charlas idiotas.
Mataron el tiempo hablando de temas sin sentido, riéndose y hasta en un momento Di María sacó un mazo de naipes y él y ella jugaron a las cartas hasta que llegaron los remises.
DI María: Después te juego la revancha- dijo señalandola mientras se metía a su auto
Emma: Cuando quieras- dijo sonriente mientras le daba su valija al chofer del suyo
Esa vez le tocó compartir auto con el Kun, y se la paso todo el viaje hablando de que le encantaba Brasil y que nunca se cansaba de visitar los mismos lugares. Emma lo escuchaba atentamente, le gustaba su manera de expresarse y como movía sus manos cada vez que quería expresar algo que no podía expresar con palabras.
Al llegar al avión, Emma se tuvo que sentar junto a Pipita, como los otros miembros del equipo, él era agradable e interesante. Ella siempre había tenido el interes de conocer personas nuevas, conocer las historias que tenían para contar. Ya había hablado antes con él pero sus conversaciones eran muy cortas, nunca habían tenido la oportunidad de tener una conversación más larga.
Cuando todos bajaron del avión, Emma se despidió de todos, inclusive de Lio y de Antonela, aunque del primero solo fue un saludo rápido y cortante. Pocho y Emma subieron a su remis y se dirigieron a su casa.
Se sentía tan bien volver a casa. Cuando Pocho cerró la puerta, se volteó hacia Emma con la cara seria.
Pocho: ¿Qué paso en Brasil?
Emma: Fuimos a vacacionar- le respondió inocente, a pesar de que sabía a que se refería su hermano
Pocho: Emma si no me queres decir que te paso, esta bien, es tu decición y la respeto, pero no me tomes por idiota
Emma se quedo callada por unos segundos y luego habló:
-Vení- dijo tómandolo de la mano y guiándolo hacia el sillón
Cuando ambos se sentaron, ella tomo aire y comenzó a explicar lo básico, no era necesario que su hermano se enterara de absolutamente todo lo que había pasado
Emma: Decí algo, por favor
Pocho: Parece que Lio también es algo histerico- Emma solo sonrió, su hermano si que sabía como levantarle el animo con cualquier comentario idiota- Pero hablando enserio- dijo mirándola a los ojos y borrando su sonrisa- no es bueno que te guardes todo, te puede hacer mal y cuando menos lo esperes, vas a estallar y eso tampoco es sano- Emma asintió.
Emma: No te enojes con Lio, ni siquiera le digas lo que yo te conté
Pocho: Yo no cuento nada, pero él tampoco te trato muy bien
Emma: No fue su culpa, estaba frustrado y nuestra pelea fue por un malentendido... no quiero que él y vos dejen de ser amigos por esto- dijo con una mezcla de preocupación y tristeza
Pocho: Conozco a Lio hace años, no voy a terminar mi amistad con él, porque se que estaba mal por su relación con Antonela y que estaba acumulando toda la bronca y estalló. Voy a seguir siendo su amigo porque se que no te quiso lastimar conscientemente. Pero por otra parte seguís siendo mi hermanita y cualquiera que te haga sufrir- recalcando la palabra cualquiera- se las va a tener que ver conmigo- dijo señalándose en forma amenazante
Emma: ¿Qué vas a hacer? ¿lo vas a matar a golpes por que no dejo a su esposa de toda la vida por mi? ¿o por qué tenes miedo de dejar ir a tu hermana menor?- en esta última pregunta, bajo más el tono de voz y acarició su mano
Pocho: Me cuesta pensar que ya no te voy a tener solo para mí, es algo egoísta pero... yo solo quiero que seas feliz
Emma: Nunca me vas a perder- dijo tomando la cara de su hermano entre sus manos y luego lo abrazó.
Pocho: No soy bueno para los momentos sentimentales
Emma: Me di cuenta- dijo todavía abrazándolo- entonces...- mientras se separaba de a poco- ¿vas a seguir siendo amigo de Lio?
Pocho: Quedate tranquila, a un mejor amigo no lo dejas tan fácilmente- Emma sonrió
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La hermana de Lavezzi (Lio Messi y tu)
Fiksi Penggemar"Emma es una chica de 22 años de edad, hermosa,inteligente y madura, decide estudiar psicología. Aunque para eso debe instalarse por unos días en Argentina y ¿que mejor lugar para hacerlo que en la casa de su (nada mas ni nada menos) hermano Ezequie...