Llego a casa sintiendome agotado. Hoy ha sido uno de los días más extraños de toda mi vida. Todo lo sucedido con mi capitan me ha dejado tan sorprendido que todavía no soy capaz de digerirlo pero en cuanto entro por la puerta de mi apartamento y veo que mi Byakuya no acude como siempre a recibirme mis pensamientos se esfuman y entro corriendo hasta mi habitación.
Byakuya esta tumbado en la cama encogido y tapado hasta la cabeza con la manta y eso solo hace que mi corazón se encoja aun más en mi pecho.
-Byakuya ¿que te pasa?
Me apresuro a acercarme y en cuanto poso una rodilla en la cama él se destapa y se me abraza temblando.
-Pero ¿que...?
-Oh, Renji... hoy... hoy...
-¿Estas llorando?¿Por que lloras?¿Que te ha pasado?-Siento como el miedo me atenaza el corazon.
-Renji he tenido... he tenido que hacerlo... no quería pero yo... y tu no estabas aquí... y... y...
Mis ojos se abren al maximo cuando veo que bajo la manta está totalmente desnudo y hay varias manchas en las sabanas. ¿Esto es semen?¿De quien? Me levanto apartandolo horrorizado ante el cumulo de posibilidades que se agolpan en mi mente y veo como Byakuya se tapa la cara con las manos mientras rompe en llanto de nuevo. Ese sonido me quiebra por dentro y vuelvo a acercarme para tomarlo en brazos y sentarlo sobre mis piernas abrazandolo y tapandolo con la manta.
-Shhhh venga, cuentame que ha pasado. No llores. No...-trago saliva intentando sonar convincente- no me enfadaré.
-Yo... he tenido que masturbarme, Renji.
Mis ojos se abren como platos y de repente no puedo contener la risa, estallando a carcajada limpia mientras Byakuya me mira sorprendido con sus ojos azules aun llenos de lagrimas.
-¿Te has masturbado?-El asiente avergonzado.-Pero eso no es malo.
-Yo solo quería correrme con tus caricias. Sino es como serte infiel.-Yo le acaricio el cabello y le beso la cabeza intentando tranquilizarme.
-Yo tambien lo hago a veces... bueno, ultimamente no porque bueno, no paramos pero eso no es algo malo aunque, no entiendo como con la caña que te doy aun tienes ganas de masturbarte.
-No lo sé pero, igual que me ha pasado estos días, a media mañana comencé a tener mucha calor y sentía que me ahogaría si no me tocaba y luego, por la tarde...
-¿Te dio ese ataque de calentura a media mañana y a media tarde?-Digo recordando como encontré a media mañana a mi taicho y como luego, a media tarde volvio a ponerse caliente.
-Si y encima, creo que estoy enfermo porque a penas he podido provar bocado y lo poco que he comido, lo he vomitado.
Esto no puede ser una simple coincidencia. Que mi Byakuya se ponga caliente cuando mi capitan tambien lo esta y que ambos vomiten.
-Vistete.-Le digo dejandolo en la cama.
-¿A donde vamos?
-Vamos a visitar al capitan loco de los cojones.
Cuando entramos en el despacho de Kurotsuchi taicho él nos mira molesto.
-¿Que os pasa ahora? Estoy muy ocupado con una nueva investigación y no puedo andar perdiendo el tiempo con vosotros.
-¿Que ocurre entre los clones y los originales?-le exijo y en cuestión de segundos Kurotsuchi taicho levanta la mirada llena de complacida curiosidad. Mierda, sabía que ocurría algo y no ha dicho nada.
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Casa de Muñecas
FanfictionEn una noche de borrachera, Renji descubre un terrible secreto. Las consecuencias de este acto desencadenaran un sin fin de situaciones en las que el pelirrojo pondra a prueba su cordura, su corazon e incluso su integridad fisica. *Esta historia co...