Algún Día

CAPÍTULO 20

*DULCE*

Jamás había tenido pensamientos tan pervertidos como los de hoy. Anahí y yo tenemos más de un mes de no tener relaciones sexuales. No me sentía lista para estar con ella, no después de todo lo que pasó, he aprendido un poco a valorarme como persona, como también a aceptarme tal cual soy.

Debo admitir que no aguanto las ganas de hacerla mía y eso lo tengo que resolver cuanto antes. Obviamente tenía todo planeado, como Anahí vive sola, llegaré de sorpresa por ahí, de las siete de la noche, además se perfecto que ella me desea al igual que yo a ella. 

Una vez en su casa, tomé un respiro y la llamé. 

-Hola.

-Mi amor- dije emocionada- Adivina que Any.

-¿Que?- se ríe.

-Estoy aquí afuera de tú casa esperandote.

-¡¿Qué?!- grita completamente fuera de base.

-¿Tan malo es que tu novia venga a visitarte sin avisar?, o... ¿esperabas a alguien más?.

-Deja de decir tonterías- dice esto último abriendo la puerta. Se posa frente a mi y me derrito, es tan hermosa.

-No veía la hora de poder estar contigo, tuve que venir.

Y al darme cuenta de como salieron mis palabras, y de la forma en que lo dije, mis mejillas no tardan en arder. Y ante la vergüenza por ello, bajo la mirada, deseando que la tierra se abra y me devore. 

-Yo también no veía la hora de estar contigo- me armo de valor y la miró, al hacerlo me sonríe- Y eres más hermosa con tus mejillas coloradas.

-¡Any!.

Me tapo el rostro cuando siento que soy más tomate que persona, pero terminó sonriendo por sus palabras.

-¿Pedimos pizza?- me pregunta mientras veo que esconde algo detrás de una mesa.

-Claro.

Anahí llama para pedir la pizza, me pregunta sobre mi preferencia, y le respondo dándole la espalda, aún mirando en dirección en donde escondió quien sabe que.

-Dul... ¿qué sucede amor?- pregunta al terminar la llamada.

-Sabes lo que sucede, lo vi- digo señalando al escondite.

*ANAHÍ*

Ante las palabras de Dulce,  mis hombros comienzan a temblar. Ella no es tonta por supuesto que no, vio que algo escondí y ese algo es una botella de whisky. Dulce no tarda en llegar a mí para rodearme con sus brazos. Apoyo mi cabeza sobre su hombro y mojo su ropa con mis lágrimas. Dulce me acaricia la espalda, el cabello, y me dice que tranquila.

-Nadie dijo que iba a ser fácil. Any, pero no te castigues demasiado tampoco- hace que la mire y seca mis lágrimas- No eres esa botella de lo que sea que escondiste. 

Me río y la sacó de su escondite. Allí hay otras tres botellas de vodka vacías, junto a dos que están por la mitad.

Dulce hace una mueca, pero enseguida vuelve a abrazarme. 

-No eres eso, ya deja de castigarte, por favor.

- Si no soy eso, ¿qué o quién soy?.

Me mira a los ojos. Me acaricia las mejillas, aparta mi cabello del rostro, y pese a ser una llorona, me sonríe con amabilidad. 

*DULCE*  

-Eres Anahí Puente, quien ama los caramelos ácidos, al kit kat y la Nutella. Quien ama ponerle Nutella al Kit Kat- se ríe- Y no olvidemos tu fanatismo a los libros y todo lo que tenga que ver con matemáticas- me detengo a pensar en qué más puedo agregar a mi dialogo- Eres la persona que cuando estés triste, te va a dar una manta colorida, y leche con chocolate- sonríe y seco su último rastro de lágrimas- Eres más que eso que me has mostrado.  Sólo es cuestión de tiempo para que tú también lo notes, y lo vas a notar, estoy segura de ello.