Narra Aristóteles.
Iba camino a mi casa cuando vi que Temo y Carlos estaban en una heladería platicando y riendose, me sentí enojado pero no sabía porque, simplemente no me gustaba que Temo estuviera con ese Carlos, o por que Temo no me lo contó, no lo sé.
Seguí con mi enojo hasta llegar a mi casa, al entrar mi padre me detuvo.
-Hey tú, ¿qué traes? ¿por qué esa cara?
-No es nada pa, sólo fue un día dificil en la escuela - mentí.
-Bueno pues, vete a cambiar para que vayamos a comer con tu abuela Imelda.
-Esta bién.
Fui a mi habitación y traté de calmarme pero era imposible, el enojo seguí ahí.
Me cambié rápidamente y salí de mi cuarto y con mis papás y mi hermano fuimos al departamento de mi abuela Imelda.
Al entrar vi que estaban todos, mis primos Robert, Linda y Daniela, mis sobrinos Dave, Frida y Blanquita, mis tíos Tulio y Eugenio, mi tia Blanca, Julieta, Gabriel y mi abuelita Imelda.
-Pasen al comedor, ya está la comida - dijo mi tía Blanca.
Todos nos sentamos en el comedor a comer la comida que mi tía cocinó.
-Aristóteles, vi que ya estás a punto de llegar a los 100 000 susciptores - dijo Linda.
-Ah si, estoy muy emocionado, me van a dar la placa de metal.
-Vas a ver que si sigues así vas a llegar al millón.
-Eso espero.
-Ay, ustedes ni en la comida dejan de hablar de sus cosas tecnológicas - dijo mi abuela Imelda.
-Oigan, por que no invitamos a la familia de Pancho a comer - dijo mi tío Eugenio.
-Me parece una gran idea, voy a avisarles - respondió mi tía mientras se dirigía a la puerta.
Escuchar eso me recordó mi "enojo" que tenía por ver a Temo con Carlos, pero eso era ridiculo, Temo podía ser amigo de quien quisiera.
Mi tía volvió a entrar al departamento.
-Dice Pancho que en unos minutos vienen.
Después de unos minutos vi como Temo llegó con su padre y sus hermanos.
-Sientense a comer Pancho - dijo mi abuela.
-Muchas gracias Doña Imelda - contestó Pancho.
Temo se sentó junto a mi y le saludó.
-Hola Aristóteles.
¿Qué onda Temo? - dije al momento que extendía la mano para chocarla, el rápidamente me contestó la chocada de manos - no te encontré a la salida para venirnos juntos como los otros días.
Vi como Temo se puso algo nervioso.
-Ah si, es que....salí.
-¿Con quién?
-Aamm, con Carlos.
-¿Él de verdad te cae bien?
-Pues.....
-¡Niños! - gritó mi tía Blanca, hizo que ambos saltaramos del susto - menos plática y más comida.
Ambos nos dirigimos a nuestros platos para terminar de comer.
Al terminar de comer le hice una seña a Temo para que fueramos a platicar al pasillo.
-¿De qué quieres hablar? - me preguntó.
-Aamm, de nada, te iba a decir que si no quieres ir a dar la vuelta.
No quería seguir tocando el tema, no me debería importar con quien se junta Temo, aunque si me importa.
-Bueno, ¿a donde?
-Ya verás.
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Aristemo: El último "Te quiero".
Teen FictionAristóteles y Cuauhtémoc son dos chicos totalmente diferentes, que a pesar de todo, al final tienen algo en común; el amor.