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Manera 11: Bésala de una manera única.
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13 de marzo de 2015
Querida Rose:
Quisiera ser lo primero que piensas en la mañana. Quisiera ser aquella persona a la que te dan ganas de abrazar apenas la veas. Que busques consuelo solamente en mis brazos. Y tal vez suene egoísta, pero el simple hecho de que estés con alguien más me duele tanto que no podría soportarlo.
Te adoro de una manera descomunal que me llega a preocupar por el hecho de que no correspondas a mis sentimientos.
¿Qué se hace con los sentimientos que le tienes a alguien cuando esa persona no los quiere o necesita? ¿Los guardas, por si llega a cambiar de opinión? ¿O los desechas? No quiero eliminar lo que siento por ti, Rose. Aunque no me correspondas, no quiero dejar de sentir esto. No sé cómo explicarte el por qué, pero simplemente no quiero.
Entonces, regresando al tema, quiero ser los únicos brazos en los que encuentres consuelo. Sería magnífico ser la persona con la que buscas desahogarte, tener esa confianza contigo.
Pero moriría aún más por poder besarte. No sabes cuánto lo deseo. El hecho de tenerte cerca todos los días y no poder hacerlo me frustra tanto.
Nuestro primer beso sería especial. En la ocasión más privada que tengamos, primero te observaré por unos segundos lo hermosa que te veas ese día, luego acomodaría un mechón de tu precioso cabello y acariciaría tu mejilla con mi mano. Te vería a los ojos, aquellos maravillosos ojos azules, y me acercaría lentamente a tus labios. Los tomaría y disfrutaría cada segundo. Guardaría en mi mente la textura que tienen y el sabor de ellos.
¿Algo que quieras cambiar de ello?
Sé que no sería tu primer beso, pero aún así quiero que sea algo especial. Es lo que te mereces.
