La asistente |ShawnMendes|

Capitulo Seis

Shawn

Estacione mi auto y baje, aún seguía un poco fresco, me apresure a checar la dirección que me envió Dianna.

El sonido de la música me guía y pronto encuentro el salón dónde está ella, la miró a través de el cristal y me quedo impresionado por su talento, nunca pensé que ella bailara.

Es increíble la belleza de su cuerpo moviéndose al compás de la música, abro la puerta y entonces es aún más impresionante.

Me quedo al pie de la puerta hasta que la canción termina, aplaudo lentamente y capto su mirada, sus ojos me miran con curiosidad, me acerco a ella y beso su mejilla.

-Hey, ¿Que haces aquí?

Tardo un segundo en darme cuenta de lo que acaba de preguntar.

-Te envié un mensaje para invitarte a comer y aceptaste -retire un mechón que estaba sobre sus su frente.

-Asi es este el adorable chico que te invito a comer-una mujer alta llega por detrás-Dennise, soy la maestra de Dianna.
- ¿Contestaste mi teléfono de nuevo?
- Te invito un chico lindo a comer, bien pensé que sería buena idea, tienes agregado su número con un corazón. Esa de un descanso, soy las 4, a comer y a dormir, te veré mañana a las 8, los veo luego niños, un placer señor...
-Mendes-respondi.
-Un placer señor Mendes-aprete su mano en despido y sale del lugar.

Se quedo parada frente a mí en sus mallas negras y leotardo.

-Ire a cambiarme -la miré irse y entrar a una puerta, me quedé parada rodeado de espejos.

Minutos después sale en un vestido que le llega debajo de la rodilla color verde militar y usa medias negras con botones altos, soltó su cabello y se mueve en su espalda, no usa nada de maquillaje.

-¿Traes tu auto?-asenti-tengo mis cosas aquí-tome el bolso grande que me mostraba.

-Tendras frío-ella asintió y me mostró que traía un abrigo largo listo para ponerse, una vez que salimos del lugar.
-Asi que con un corazón-me burlo de ella y miró sus mejillas teñirse de rosa.
-Me lo envío Camila.

Decido ir a un restaurant-bar, Dianna escoge una hamburguesa porque dice que necesita comer algo rápido.

Pido que nos tengan papas fritas y esas las traen rápido.

-Eres muy buena -su rostro se ilumina y estira su mano para apretar la mía, acepto su pequeña mano sobre la mía-¿Cómo te sientes?

Ella se lleva una papa frita a la boca, mastica y luego me responde.

-Habia olvidado lo bien que me sentía bailando.
-Me alegro que estés feliz, estás trabajando mucho en ello.
-Oh ya sabes, es algo que tenía que hacer, tarde bastante en ello y ahora que lo estoy haciendo tengo que hacerlo perfecto.

Me alegra estar aquí con ella y ver cómo ella está trabajando en sus sueños pero podía ver que existe arrepentimiento en lo oculto de sus bellos ojos.

-¿Que cambiarias si tuvieras la oportunidad?

Ella trato un rato en responder y estoy segura de que es la pena que le da confesarme sus secretos.