II: Trabajo en equipo

599 130 12
                                    

Llegar la siguiente mañana con el cuerpo molido a base de golpes era una pesadilla, mi progenitor no dudó en descargar su rabia en mí por completo; Haeri lo decía muy a menudo, que no podía quedarme callada ante esos maltratos.

Pero, ¿qué otra opción tenía?

Él era el único con el que podía tener un lugar donde vivir, no tenía a más nadie en Corea y me negaba a pedirle ayuda a Haeri, ella ya estaba muy ocupada con la iglesia y sus asuntos de la boda junto a Seokjung.

No iba a causarle más molestias en lo absoluto, podía enfrentar sola mi situación.

Observé el campus, aparentemente tranquilo mientras cruzaba hacia la entrada del edificio; lo único que me mantenía viva a pesar de estar pasando un momento del asco, era la música. Siempre había amado todo lo referente a ella, menos el baile en el cual soy un completo desastre.

Pero regresando a lo principal, nada me reconfortaba como lo hacía la música.

Entré finalmente al interior del plantel, los estudiantes iban de aquí a allá por el amplio pasillo universitario, a unos metros pude ver a Haeri despidiéndose de su prometido con un beso ya que de seguro se iba a su clase de Artes Teatrales.

—¡Kaya-sshi! –Me saludó apenas me vio acercarme hasta ella.

Sonreí levemente alzando mi mano en gesto de saludo, fue entonces que su sonrisa desapareció para dar espacio a una mueca de preocupación.

—Kaya... ¿lo hizo de nuevo? –Susurró señalando mi labio, notoriamente adornado por una herida con sangre seca como cubierta.

Desvié la mirada y suspiré asintiendo.— Sí, no deberías estar sorprendida de algo que es habitual.

—Pero sabes que está mal.

—Lo sé, pero no puedo hacer nada, estoy dependiendo de él aunque no quiera y el trabajo en el restaurante no me paga lo suficiente. –Me encogí de hombros, remarcando la obviedad del asunto.

Haeri estaba por protestar, pero la campana nos avisó de que debíamos entrar a Vocalización por lo que la charla quedó allí.

Cosa que agradecí internamente.

Al ingresar al aula, no fue difícil distinguir a Yoonsuk sentado en el último asiento del lugar, cerca de la ventana. Mirando a través de ella inmerso en sus pensamientos.

Era sorprendente cómo los rayos del sol hacían resaltar su blanquecina piel, era bastante pálido como una hoja blanca.

Me senté en mi puesto habitual junto a Haeri, y no tardó el profesor en entrar.

Por lo que todo el barullo dentro del salón cesó.

Lee Yoonsuk, capitán del equipo de basketball de K' Arts University y un estudiante prodigio en vocalización e instrumentalización, por su facilidad en el rap y su habilidad en tocar el piano

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Lee Yoonsuk, capitán del equipo de basketball de K' Arts University y un estudiante prodigio en vocalización e instrumentalización, por su facilidad en el rap y su habilidad en tocar el piano.

Podría decirse que tenía una vida perfecta, pero la realidad es otra para variar.

Mas él no hablaba con nadie, solamente con su mejor amigo de la especialidad de danza, Go Hyesuk.

Del resto... era un introvertido con un carácter de perros.

Pero el amor por la música era lo que lo mantenía a flote en la vida, le daba cierto color a su negro mundo.

Porque sí, todo lo veía negro, nada era colorido para él. Salvo la música.

Y a veces se preguntaba si existía alguien que tuviera el mismo amor que él tenía por la música, porque ni Hyesuk era así salvo con la danza.

Él quería compartir ése mismo amor con alguien que amara plasmar todo en unas letras o rimas compuestas.

—Señor Lee Yoonsuk, ¿ha prestado atención a lo que dije? –Inquirió el profesor Jung con una canosa ceja alzada hacia el mencionado.

El pelinegro parpadeó con cierto recelo, mas estaba avergonzado.

—Disculpe, profesor... ¿podría repetir? –Pidió con su voz algo ronca y cansada.

Su voz era grave, y por alguna razón ocasionaba atracción en la población femenina universitaria.

El educador suspiró.— Debe ser más atento, señor Lee, acabo de decirle que habrá un proyecto en parejas para que compongan una canción sobre un tema social de gran importancia. Y usted quedó emparejado con la señorita Kaya Benson.

Fue entonces que su letárgico estado desapareció al instante, mirando con fijeza a su supuesta compañera.

Kaya Benson, se atrevía a decir que ella era su contraparte femenina; era muy callada y con una neutralidad que la rodeaba, solamente la veía hablar con Park Haeri. Del resto era como él, sin socializar con más nadie.

La chica igualmente lo miraba fijamente, ambos quizá queriendo atravesar hasta ver el alma del otro.

—Como sea. –Soltó antes de devolver su vista a la ventana nuevamente.

Con que Kaya Benson... ¿eh?

Skkdkskxkkd interesante 👀 comenten y voten 🙏

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Skkdkskxkkd interesante 👀 comenten y voten 🙏









¡Dios les bendiga!

𝖘𝖙𝖔𝖓𝖊 𝖍𝖊𝖆𝖗𝖙 💙 novela cristianaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora