Tras la muerte de su hermana mayor y la aparición de una nueva familia en el pueblo de Ashbourn, Blas Stanford se ve envuelta en un gran misterio: ¿acaso su hermana cometió suicido o...la asesinaron?
Todas las respuestas que busca solo se las puede...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—Epílogo—
Bueno, debo decirles una cosa, caballeros, los juegos del demonio no están restringidos a los que habitan en el infierno. Se admiten otros jugadores.
(Robert Ludlum)
—El plan salió a la perfección, Señor.
—No cantes victoria, Jules. El juego aún no termina.
El demonio hace una reverencia a su señor y en seguida se retira de la habitación. Deja que la capa de su largo y negro abrigo se deslice por el suelo de baldosas rojas y brillantes.
Xander juega con el talismán entre sus manos. El ángel frente a él, amarrado de pies a cabeza con sogas, suplica por su vida. Tiene la apariencia de un humano, pero sus ojos brillan como la luna de noche y su cuerpo es resistente como un chaleco antibalas.
—Por favor...haré lo que quieras. Por favor...solo déjame ir.
Los cuernos en su frente se han reducido, producto de haber perdido la mayoría de sus poderes en la lucha contra su hermano. Si hubiera podido matar a Scott sin la intervención de Luhan, ahora mismo estaría en el trono de su padre, rodeado de placeres y joyas.
Sabe que su hermano, al igual que él, va a venir a buscarlo y que no parará hasta verlo morir. Pero Xander tiene un as bajo la manga. Su padre le enseñó a tener un plan b por si acaso. Un plan de resguardo. Y ahora que dos Demonios del Pecado fueron asesinados, tarde o temprano vendrán los restantes para pedirle ayuda. Porque sabe que es el único con las fuerzas necesarias para mantener el equilibrio en el Infierno.
Solo así, Xander podrá declarar la guerra al Paraíso y destruirlo por completo. Entonces el Infierno subirá y esclavizará a los mortales y él se convertirá en el próximo Lucifer. Pero para eso, mandará a todos sus demonios en busca de las llaves. Y una vez en su poder, matará a todo aquel que interfiera en su camino.
Con un chasquido de dedos, la cabeza del ángel gira sobre su eje varias veces hasta que cae al suelo y rueda a los pies de Xander.
—Cuida tu espalda, hermano. Esta vez, iré por tu cabeza.
