No era mi intención sentir
Las mariposas que bailan
Para una canción sin fin.✩
En tan solo media hora mi casa se había llenado de gente. Había desconocidos por todas partes, aunque de vez en cuando me cruzaba con alguna cara conocida.
Definitivamente, el ambiente que se había creado no tenía nada que ver con el que había hace unas horas en esta misma casa.
Ethan no me había dejado sola, tal y como me lo había prometido. Aun así, decidí darle un poco de espacio y bajé a la habitación de alquiler.
Una vez abajo reconocí a Olivia, una chica que iba al colegio al que Jake y yo asistíamos de pequeños. No tardó en saludarme cuándo me reconoció.
—¡Joder, cómo has crecido! —fue lo primero que dijo al verme—. Qué envidia, mira que ya eras mona de pequeña, pero joder, ahora estás buenísima.
No pude evitar sonrojarme. Aceptar cumplidos nunca había sido mi punto fuerte.
—Lo mismo digo. —Sonreí intentando ocultar mi vergüenza.
—¿Está Ethan aquí? No lo he visto en toda la fiesta —comentó.
Claro, no lo has visto porque ha estado ocupado haciendo de niñera, pensé.
—Está arriba.
—Hace mil años que no le veo. ¿Qué tal está?
—Bien, sigue dibujando. Va al mismo instituto que Jake y yo.
—Seguís siendo inseparables, eh. Supongo que Zoe también va con vosotros.
Asentí con la cabeza y ella sonrío.
—He visto a tu hermano antes. Ha cambiado bastante, pero os seguís pareciendo mucho. Sois los dos igual de guapos —rio—. ¿Ethan sigue siendo tan mono como lo era a los diez años?
No, ahora es aún más guapo, suspiré mentalmente. Claro, que no pensaba decir eso en voz alta.
—Tendrás que verlo tú para juzgar. —Me encogí de hombros. Ella sonrió aún más.
—Voy a por algo de beber. ¿Tú quieres algo? —preguntó.
—Voy contigo.
Santo cielo, pensé al ver que muchas de las botellas de alcohol ya estaban vacías. Por lo menos aún quedaba vodka de caramelo.
—¿Un chupito por los viejos tiempos? —propuso.
—Venga, vale —dije. Podía beber mientras no me emborrachara demasiado. Esas eran las reglas de mis padres, así que estaba bien mientras las siguiera.
Olivia me entregó uno de los vasos y yo lo cogí. Lo alzamos a la vez y después nos lo tomamos. Sentí el escozor del alcohol al bajar por mi garganta e hice lo posible por no hacer ninguna mueca. Segundos más tarde, tan solo quedaba el sabor a caramelo en mis labios, lo cual era bastante agradable.
—Ah, mierda, si tú eres menor. Ahora me siento una mala influencia —exclamó Olivia cuando se percató de ese detalle. No pude evitar reírme.
—Para mala influencia ya está Jake —bromeé. Entonces sus ojos se abrieron como platos al ver algo detrás de mí.
—Dios mío, está buenísimo —balbuceó. Me giré instantáneamente para ver a qué se refería. No tardé mucho en descubrirlo.
—Kate —me llamó Ethan al verme—. ¿Por qué no me has dicho que ibas a bajar?
—Pensé que quizás necesitabas un poco de espacio...
—Ya tenía espacio —señaló—. Te lo he dicho, Kate, a mí no me importa estar contigo toda la fiesta.
ESTÁS LEYENDO
Kate & Ethan ✔️ | YA EN FÍSICO
RomanceKate, quien ha estado enamorada de Ethan desde que era pequeña, por azares del destino se ve obligada a escoger entre superar su enamoramiento y continuar como amigos o arriesgarlo todo y confesarle su amor. ✩ Kate siempre ha estado enamorada de Et...