“Antes de irse,el sol matiza.
Y así la tarde,
Se hace rojiza...”
—¿Porque son tres?–
“Que alguien me diga, que rumbo siga.
Monotonía hay cada día.
Una ilusión, pues no quisiera caer...”
—Te lo diré cuando sea el momento.–
≥{☽♡☾}≤
La mañana está fría siendo que estoy en pleno mayo.
Ya van tres días desde que mí nuevo vecino se mudó y no eh sabido nada de él desde entonces. Tampoco es como si me importase que haga, pero me preocupa el que no haya abierto las cortinas de su ventana, lo sé porque como había dicho: tranquilamente puede entrar a mí casa por mí cuarto; cuarto que tiene una ventana para dejarme salir al balcón observando lo hermoso de las tardes y está a tan solo 10 centímetros de la otra que saltando ya entras.
Dejando desordenada mí cama me levanto y me dirijo al baño para darme una ducha de agua caliente.
No importa que clima haya, siempre sería agua caliente con lo que me bañase.
Mí baño no fue tan largo ni tan corto, todavía me quedaba una hora y media para lo que tenía que hacer. Al salir me coloco una toalla alrededor de mí cadera y agarro una crema base del mismo tono de piel que tengo para después salir y detenerme como siempre en frente de un espejo de cuerpo entero.
Mí piel es morena, tengo para mí gusto unas curvas de mujer notables y vientre plano, un culo alzado, piernas y brazos suaves, pelo teñido algunos mechones de verde y varios aritos. Sin olvidar los tatuajes.
Tengo una pequeña libélula negra en la muñeca izquierda de mí brazo y en la otra se diría el signo infinito con hondiduras en los costados creando un corazón y en medio de este Punto y coma. Que también se diría parece una mariposa.
Mientras en la espalda tengo tres mariposas naranjas desde abajo de mí nuca al centro de mí espalda; que al no ser grandes no ocupan mucho espacio. Por último, un colibrí de tinta negra se hallaba en mí cintura izquierda.
Tengo que admitir que me encantaron, pero no le encuentro sus significado.
Deduzco que han sido echos por culpa de unos tragos mal tomados que me hicieron cometer tales actos. Pero de ser así, cualquier porquería tendría tatuada.
Saliendo de lo que yo llamo discusión interna, me coloco la crema en cada parte que se encuentra un tatuaje, exceptuando el de la espalda que no alcanzo con mis brazos, a parte de que nadie la vería porque no me sacaría la prenda superior. Una vez termino de "ocultar" mis 'errores' me pongo un pantalón de mezclilla azul ajustados y arriba una camisa blanca con botones de metal a presión, agarrando mi mochila y campera por si no soporto el frío matutino.
Apenas alcanzo a poder agarrar un pan con dulce de leche y manteca cuando suena mí alarma avisando que ya me quedaban menos de diez minutos para llegar a la universidad.
Salgo de mí casa sin antes cerrar la puerta y agarrar el estuche que adentro resguarda mí sagrada cámara, para por fin irme caminando. No tengo un auto, y tampoco lo necesito. A mis veinte años empecé a vivir por propia cuenta y un año después organizarme para poder empezar la universidad al siguiente; ahora teniendo veinticinco y tres años de estudio para fotografía.
Eligiendo para mí beneficio una universidad bastante cerca, a tan solo unas cinco cuadras de mí hogar.
Llendo directo al salón de mí clase me detienen apenas piso la residencia.—Disculpa...
Esa voz parecía que te acariciaba con tan solo una palabra dada.
Endurezco mí voz.—¿Que necesitas?
Bueno, eso salió muy tosco de mí parte. Ahora seguro se va a pedir ayuda a otro.
—¿Me podrías hacer un recorrido del lugar?
No, al parecer se queda. Recordando que hoy en las primeras horas tengo biología, algo que no tiene que ver nada con fotografía, me hago una idea de si puedo ayudarlo. Es mí vecino, hay que dar una buena impresión.
—Claro.
Así me la pasé dos horas, indicándole, hablándole y diciéndole cada cosa que esos tres años me enseñaron.
Descubrí que mí vecino tiene veintitrés años y que estudia arte, es soltero, su nombre es Jeon JungKook, se mudó hace poco (cosa que ya se) y es una experiencia nueva todo aquello para el, cosa que obviamente creí.
Todo bien hasta que mí estómago llama porque tiene hambre.—¿Quieres ir a una cafetería?.
Preguntó Jeon luego de segundos, miro la hora que es por medio de mí teléfono y confirmo que todavía el profesor de biología se queda una hora acepto tal propuesta dirigiéndonos a una cafetería fuera de la escuela. Me sentía como en la juventud cuando salía de la clase pero no por querer ser malo.—Nunca te olvides que me sirves y perteneces a mí. TaeHyungie.–
Oh...
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Drabbles≈ └KookV┘
FanfictionHistorias que están en borradores, ideas que surgen e historias que tienen nueva posibilidad de poder ser leídas. Todo eso puesto aquí.