Drabbles≈ └KookV┘

└Un "Ex- de verdad"┘

Me ah pasado más de una vez la pregunta ¿Porque sigo en pie?  por la cabeza, y varias de todas las veces en que me las hice, ni yo mismo había encontrado la respuesta exacta a ella.

El 30 de diciembre había empezado una relación con mi mejor amigo de la infancia, aquel del cual estaba confundido en sí nuestra relación era solo amistad o más que eso, de sentimientos. Ambos teníamos esa misma duda por lo que, en mi cumpleaños de 19 años, empezamos a ser novios.

Antes de que comenzase todo, prometimos que si llegábamos a terminar el experimento no hiba a entrometerse aquel error en nuestra amistad, que se rearmaria si terminabamos. Ciegamente creí que eso no pasaría, porque pensaba y alegaba que sería duradero hasta casarnos si era posible, lo considere así y, una vez todo termino, salí decepcionado.

Nuestra ruptura fue en términos buenos y cumplimos nuestra promesa de volver a lo que fuimos, solo amigos. No sabía si sentirme friendzoneado o ponerme a llorar. Creo que la segunda fue la que más hago hoy en día.

¿Razón de nuestro separamiento? Ninguna en específico, él me lo pidió, finji pensarlo y acepte. Poniendo como siempre primero sus sentimientos antes que los mios.

Cada vez que lo veo la frase "El que se entrega por completo, jamás regresa entero" me invade. Y no puedo evitar soltar una risa que se escuche muy falsa, agria y sobretodo, de dolor.

Lo odio, con todo el cuerpo lo odio. Por su figura, su gran carácter, su cariño, sentimientos y su muy, muy maldita, sonrisa que despertó sentimientos que guardo con candado en un cajón. Aquel cajón el cual está en lo más negro de mi alma en un rincón que todavía eh podido guardar, abajo de tantas cosas. Junto a mi egoísmo.

¿Qué es en sí una relación?, No lo sé. Muchos tenemos distintos tipos de espectativas ante ello.

Aveces, y solo aveces, -(A quien engaño, siempre)- me pongo a imaginar lo que sería si no hubiera sido solo algo pasajero. Mi primer beso, porque tengo la imaginación de virgen hasta el matrimonio, fue un roce de labios. Nada más. Para mi cuenta como un beso ya que soy inexperto y virgen por cualquier lugar que veas. Hasta parece como si tirase un olor en el que todo los cuales me conozcan sepan que sigo teniendo aquello de santito. Aquello que JungKook no quiso tener.

¿Ven lo que digo?  Todo termina en el.

–Hola ¡TeTe!– ese apodo, ese maldito apodo que lamentablemente amo. Me lo puso porque estuve usando chupetes hasta cumplir los 10 años. ¿Saben que es lo jodido? Que ahora los reemplazo con chupetines.

Pone su brazo sobre mis hombros y me da un beso en la mejilla, malparido. Suerte que tengo un poco de control en mis mejillas y que uso rubor para que no se note que es mi sonrojo, sino ya me hubiese auto-exponido frente suyo.

Pero lo más importante, ¿Acaso el muy hijo de pu-pu-eblo cristiano me a dado un beso en la mejilla?. Cierto que desde antes lo hacíamos.

"El que se entrega por completo, jamás regresa entero." Nuevamente, me fue difícil callar aquella risa.
Jeon me mira confundido, le digo un “buenos días” -(Pero de buenos no tiene nada)- y me lo llevo a rastras al salón.

Teníamos un minuto de retraso.