Triple Márquez (TM 1)

Prólogo: Australia.

La vida de una estrella, o más bien, de una recién descubierta celebridad. La vida de una persona famosa y más en el comienzo de su estrellato, no es para nada algo que envidiar. Y os lo digo yo, que justo estoy pasando por ello. ¿En que momento se me ocurrió subir aquel estúpido vídeo a YouTube, aconsejada por mis amigas? Esas mismas que ahora no hacen más que buscar provecho de mi recién éxito musical.

No sé cuantas veces en la ultima semana habré pensado en que debería mandar todo a la mierda y cambiar de aires. Pero no puedo hacerlo, y quererlo por momentos tampoco. Aunque pienso dejar todo esto a la mínima posibilidad que encuentre libre. Esta vida es imposible de llevarla durante mucho tiempo más. Pero ahora solo me toca aguantar y aguantar, porque esta no era la vida que yo quería, y en verdad ya no sé ni como he llegado aquí. No sé que me pasó por la cabeza para aceptar ese contrato discográfico y convertirme de la nada en la comidilla de medio mundo. Daría lo que fuera por volver a mi vida antes de ese video. Antes de salir en todas las revistas. Antes de perder la cabeza y mi privacidad. Dar marcha atrás al tiempo y cambiar mi vida por completo.

Estoy en mi habitación, sola. Echo de menos cuando vivía en un pisito diminuto con mis mejores amigas. Cuando subí ese vídeo y luego firme el contrato con la discográfica casi sin darme cuenta de lo que hacía me vi obligada a irme de allí. Daba una imagen horrible de mí y aunque no quiero seguir con esto mucho más tiempo tampoco quiero que la carrera se me vaya a pique solo por mi lugar de residencia. Así que me mudé a un piso mayor en el que vivo yo sola. Bueno, yo sola la mayoría de noches, porque en la habitación de invitados tengo a mi hermano pequeño, en edad, otra cosa es cuando comparamos la altura. Vivir vive aquí, otra cosa es que aparezca a dormir. Está estudiando la carrera de derecho y muchas noches no aparece por quedarse hasta tarde estudiando en casa de alguno de sus compañeros. O a saber por qué.

Otra cosa que echo de menos es salir sin problemas. He salido esta mañana a las 7 para comprar algo para desayunar y la mitad de la gente me ha reconocido por la calle. Es una experiencia muy extraña. Siempre creo que será la última vez, pero claro que no lo es, y cada vez me reconoce más gente. Ya estoy pensando en ponerme una peluca para que no me reconozcan a lo Hannah Montana cuando era Miley o cuando era Hannah. Pero es una estupidez. Cómo venga una racha de viento la peluca se va volando por medio Almería y hasta llegar a Madrid si te descuidas. Además de que por cambiarme el color de pelo no van a no reconocerme. Tendré que acostumbrarme a que me molesten por la calle. No soy la única persona famosa a la que le pasa. Y seguro que con el tiempo dejaré de llamarles la atención. Total no tengo porqué conseguir el éxito que la discográfica creía conseguir. Podría irme a la mierda en cualquier momento. Y lo estoy esperando con ansias. No sabéis las ganas que tengo de que esto acabe ya.

Estoy cansada de que me reconozca media España a dónde quiera que voy. Y estoy cansada de no tener vida, de tener amigas más que aprovechadas, de que mi familia me mire raro cada vez que voy a comer a casa de mis padres o de mis abuelos. Sí yo estaba muy bien con mi carrera recién acabada. Que iba a ponerme a sacar el máster para poder especializarme. Pues no. El título de Fisioterapia lo tengo para adornar el salón de mi nuevo piso. Y en vez de estar acabando el Máster, pues estoy cantando. Todo igualito a como me lo imaginaba hace 5 años. Tengo 23 años y mi vida es un aburrimiento. Al menos para mí. ¿Y si me voy del país sin avisar? En Europa seguro que no me reconocen. O en América.

No, no puedo irme. No puedo dejar solo a Pablo. No es un niño, claro que no. Pero es mi hermanito. Y con lo mal que se lleva con mis padres como me pire a otro país sin avisar le veo en la calle y odiandome cuando regrese. Porque no me voy a ir eternamente. Esperaré a que salga el disco, a que Pablo acabe la carrera el año que viene y luego me largo una buena temporada. A saber a dónde. Quizás me voy a Australia, quién sabe.

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Aquí el Prólogo de esta nueva novela. Espero que la leáis muchos y que le deis mucho cariño. El primer capítulo será...