Triple Márquez (TM 1)

Epílogo: Sin más.

Un mes. Ha pasado un mes. Un mes sin mi hijo creciendo dentro de mí. 1 mes desde que lo perdí. 1 mes desde que Marc me echó la culpa de haberlo perdido. 1 mes desde que no sé nada de él.

Àlex me llama cada 3 días. No quiere agobiarme. Sabe que necesito espacio y tiempo para hablar de lo que ha pasado. Solo yo puedo saber cómo me siento ahora mismo.

Y es un dolor tan grande. Nunca tuve una ilusión ferviente por ser madre. Nunca soñé con quedarme embarazada. Nunca hablé con Marc ni con ningún otro novio anterior de tener hijos. Me daba casi igual tener o no. Pero en cuanto supe que este bebé estaba dentro de mí mi mundo cambio desde ese mismo instante. Y ahora, ha vuelto a cambiar drásticamente de nuevo.

No habíamos comprado la cuna. No tenía nombre. Apenas pudimos saber que era un niño antes justo de perderlo. No le había comprado nada todavía. Y menos mal. Pero no me siento mejor por ello. Me siento todavía peor. No tengo nada suyo a lo que aferrarme por la noche cuando tengo una pesadilla recordándome que ya no está. Que ya no le voy a conocer jamás.

Àlex no me dice mucho de Marc. Y lo prefiero. No quiero saber si está mal por dejarme sola un mes, y ahora otro. No quiero saber si le da igual mi existencia. Y me da igual si le da igual haber perdido a Marc Jr.

Es así como le llamo ahora. No le pude poner un nombre antes de perderlo. Así que es Marc Jr. Necesito referirme a él con un nombre. Y ese me parece ahora mismo perfecto.

Sinceramente he estado pasando de la discográfica el último mes. No es que me hayan dado mucho la lata. Pero las pocas llamadas que me han hecho no las he cogido.

Habrán pensando que es mejor dejarme descansar. Deben saber, cómo sabe todo el mundo ya, que he perdido al bebé. Y quizás se echan parte de la culpa, igual que se la echó Marc al trabajo.

Digo que lo sabe todo el mundo, porque no había pasado ni una semana cuando María me llamó diciéndome que salía en todas las revistas. Bueno, yo no. Mi embarazo y mi aborto. No había dado la noticia del bebé todavía a nadie más que a la gente de confianza. Que básicamente eran María, Marc y Àlex. Y la discográfica, claro. Pero eso no fue por confianza, sino porque no me quedó de otra. Y al final se enteró todo el mundo una vez que ya no estaba.

Recibí llamadas de todo el mundo. De Pablo. De mis padres. De mis "amigas". No he querido hablar con ninguno. Solo hablo con Àlex y con María. Bueno, y alguna llamada he tenido con Leti. Otra que me llamó enseguida, pero a ella no la ignoré. Será periodista, pero sé que no me usa para sacarme información. Solo se preocupa por cómo estoy.

Del que no he recibido ni una sola llamada es de Marc. Al que le está cayendo la otra mitad de la prensa encima. Nadie puede confirmar que el bebé fuera suyo, pero sabían que estábamos saliendo. O que lo estuvimos en algún momento. Así que estoy segura de que lo tendrán mareado a preguntas también.

He estado revisando los contratos. Y viendo que el de alquiler se acaba este mes, y que no llegue a firmar el de la discográfica. He decidido volver a casa.

Ya le he dado muchas vueltas. No creo que me recupere pronto de todo esto. No soporto estar tan cerca de Marc sin saber nada de él. Así que me vuelvo a Almería. María me acogerá en casa hasta que pueda buscar un piso donde vivir yo sola. Nada me une ya a Barcelona y a Catalunya. Ni Marc. Ni nada. Mejor poner tierra de por medio y cuidarme de que se reabran heridas más o menos recientes.

Días más tarde.

-¿Cómo estás?
-Lo mejor que puedo estar tras 8 horas de carretera.
-Tú siempre igual...
-Anda cállate y ven aquí. Necesito un abrazo de mi mejor amiga.

María me arrastra hasta el sofá, y allí nos abrazamos hasta que me dejo ir. Dejo que salga todo. Las lágrimas que todavía no había soltado. Y todo lo que necesitaba decir en palabras. Horas de desahogo junto a mi mejor amiga.

No sabía cuánto la necesitaba hasta que la he tenido aquí conmigo. Necesitaba a mí mejor amiga para soltarlo todo. Y para ser capaz de dejarlo todo atrás y empezar a ver una nueva vida.

A partir de hoy, dejo de ser la Xenia que he sido los últimos años. Y vuelvo a ser la recién graduada en Fisioterapia. Vuelvo a ser una Xenia Márquez corriente. Ese será mi plan. Empezar de cero.

FIN