Prófugos

Capítulo XVI: Borrón y espalda nueva

-No puede ser Linc, debió ser alguien muy parecido, el no desapareció hace mucho, y no creo que haya venido solo para verte morir.
-Era el Michael, nunca olvidaría el rostro de papá...
-El no merece ser llamado papá Lincoln, nos abandonó -interrumpió Michael gritando-
-Está todo bien? -preguntó Pope-
-Si, solo teníamos una pequeña discusión.
-Bueno, será mejor que lo arreglen lo más pronto posible pues les dieron a la señorita Verónica y a su compañero un par de días más para probar su inocencia.
-Desenterrarán el cadáver? -preguntó Michael tratando de relajarse-
-Al parecer señor Scofield, pero ese asunto será comunicado luego así que tendré que llevarme a usted y a la señorita Varay de nuevo a su celda.
Asentimos, le dí un último abrazo a Lincoln y me despedí de Verónica con un beso.
Michael no habló durante el trayecto, se veía un poco distraído, espere hasta que nos quedáramos en las celdas para poder hablar con el, por suerte salimos al descanso y me pase a su celda, estaba hablando con Sucre, alcancé a escuchar que debía conseguir un uniforme de policía para la noche, el se quedó un momento pensando y luego le dijo que estaría listo para antes de M, Sucre salió y nos dejó a Mike y a mi solos, al ver que no hablaba decidí iniciar la conversación yo:
-Así que... Usarás un traje de policía, no son mis personas favoritas en el mundo pero tal vez tu cambies esa idea.
Rió un poco y agregó:
-Si quieres puedes venir conmigo pero temo que no habrá pausas para disfrutar del momento solos, al menos no por estos días tenemos que enfocarnos en salir antes de que se programe la ejecución.
-Lo sé, solo no sabía cómo iniciar la conversación y me encanta verte sonreír.
Se sonrojo un poco y se acerco más a mi.
-Quieres hablar de lo que pasó?
-Dicen que tu vida pasa frente a tus ojos cuando estás a punto de morir, pudo haber sido un fantasma del pasado que sigue atormentando a Linc.
-No creo que haya sido un "fantasma", Michael es lógico, Linc estaba a punto de morir y su padre los busca para despedirse de una extraña ma...
Empujó la litera hacia la pared y se volteó a mi gritando:
-EL NO ES MI PADRE!
Me levanté de un salto y me fui a la esquina, nunca me había gritado.
-Lo-lo siento Alex, se que no debí gritarte, pero no quiero pensar en ese sujeto por ahora, quiero enfocarme en salir contigo y mi hermano a salvo, si?
-De acuerdo.
Se acercó a mi y me abrazó contra su pecho, podía escuchar el latido de su corazón, estaba acelerado; unos segundos después levantó mi rostro y me beso suavemente, me separé de él y le dije en tono serio :
-Si me vuelves a gritar así terminarás con un ojo morado.
-No pasará hermosa, lo prometo.
Salimos al patio y conversamos con Sucre acerca de el nuevo plan, no fue mucho tiempo, solo sabía que Michael se vestiría de policía e iría a psiquiatría a buscar una nueva salida.
Cuando llegamos a nuestra celda estaba el primo de Sucre esperándonos, confundida le pregunté:
-Oye, que no tu primo se iba a casar con Maricruz?
Rodó los ojos y me respondió:
-Tengo otro primo, fuera de aqui y a propósito gracias por recordármelo.
-Andan de un humor hoy.
Michael rió y me abrazó por la espalda, cuando se fue el primo de Sucre, nos enseñó el uniforme y lo guardo debajo del colchón.
.
Al finalizar el descanso nos llevaron a M, algo que me pareció extraño de camino fue que Tweener estaba hablando con Bellick mientras nos veía, cuando el noto que también lo estaba observando le hizo un gesto y lo llevó a su celda, en fin, lo olvidé por unos momentos y después llegamos a trabajar.
Estaba pintando de blanco una pared cuando C-note se tropezó y movió la escalera, ambos caímos, por suerte habia puesto la pintura abajo, quedé acostada sobre el y después de unos momentos empezamos a reír, Sucre haciéndose el gracioso dijo:
-Cuidado hermano, que mucho le costó a Fish conseguirla.
Le enseñe el dedo medio y el también se echo a reír, Michael fue a ayudarnos, estaba sonrojado, antes de levantarse Benjamin miro la pared y preguntó?
-Hum... Qué es esto? -dijo tocando una abertura pequeña-
-No, no lo hag...
Fue muy tarde, ahí era donde guardamos todo el concreto que habíamos echo pedazos para hacer el túnel, empezó a salir polvo, cada vez salía más, cuando lo íbamos a arreglar T-Bag, tocó la puerta, alguien venía, C-note puso su pie recargandolo en el agujero, yo de nuevo agarre la brocha y acomode la escalera, escuche la puerta abrirse y me giré para ver quien era, y adivinen, era Bellick, según dijo había venido a supervisar nuestro lento avance, se acerco a cada uno de nosotros, cuando llegó a mi lugar se quedó unos minutos examinandome y luego comentó:
-Demasiado buena para estar en la cárcel, que desperdicio de carne. Tú deberías estar en un burdel.
-Y usted también. Le urge algo de acción para no estar jodiendo siempre.
Tiro de mi mano e hizo que quedáramos frente a frente.
-Escuchame zorrita si no quieres que... Tu que carajo estás haciendo? A trabajar! -decía mientras veía a Franklin-
-Se me durmió la pierna jefe, serán solo unos segundos.
Al ver Bellick que no se quitaba, camino amenazante hacia el y antes de que llegara, Charles aventó a C-note y cubrió el agujero con su pierna, para disimular, le habló con tono fuerte:
-Qué no oíste? El jefe dijo a trabajar.
-Qué te pasa viejo?
-Lo que me pasa es que los jóvenes reos no entienden como funciona el ésto, no entienden el valor de la construcción, si quieres ir a lavar baños, anda ve que nadie te extrañará.
-Aún tienes un poco de valor y vinagre en las venas, no Charles?
Me gusta.
Se dirigió hacia la puerta no si antes voltearse hacia mi y decir:
-No he acabado contigo preciosa.
-Ni yo con usted jefe, dije mientras lo empujaba con el hombro e iba hacia Michael.
Tardo unos segundos en salir y nos quedamos en silencio después Charles lo interrumpió:
-Vaya, estuvo cerca.
Reímos pero cuando quito su pierna y cayó todo el escombro nuestras sonrisas se borraron, nos apresuramos a meter todo en el hoyo del túnel, ya casi era hora de que nos fuéramos a las celdas, era demasiado y sólo eramos 5, nos movimos lo más rápido que pudimos, mis brazos temblaban del esfuerzo, Michael me dijo que los estirara un momento, accedí sin problema y cuando me acerque a la esquina T-Bag tocó de nuevo, mis ojos se abrieron cual plato y regrese a ayudar, después se unos momentos vi como se abrió la puerta, pensé que nos iban a descubrir pero después de unos segundos se volvió a cerrar, solté la pala y me tire al suelo con las manos en la cara, Sucre hizo lo mismo y con un suspiro dijo:
-Eso estuvo demasiado cerca!
-Lo sé, no siento mis brazos... Sabes que me vendría bien?
-Un baño con puerta?
-Hum... Si pero también un masaje -extendí mis brazos hacia el mientras decía ésto último-
El lo hizo a regañadientes y luego dijo en tono burlón:
-Si que tienes buen brazo, levantaba pesas?
-No, hacía barras.
-Eres ruda chica, si no tuviera a Maricruz ya te la habría robado Fish.
-Si eso hubiera pasado tu tendrías una dentadura postiza. -respondió Michael-
-Touche -dije mientras me levantaba y le guiñaba un ojo-
.
Una vez en la noche, antes de que hicieran el conteo, Michael me dijo que iría a psiquiatría a buscar otra manera de llegar a la enfermería, el ya traía puesto el uniforme de policía y no podía evitar ver las líneas que se le marcaban en su pantalón, notó que no dejaba de ver a su amiguito y dijo juguetonamente:
-Ya probaste el fruto prohibido Eva, espera a que se vaya la serpiente para comerlo de nuevo.
Solté una risa nerviosa, después me acerque a el y lo besé, mordí un poco su labio y soltó un leve gruñido, pero continuó con el beso, después de un tiempo nos separamos y le dije:
-Por qué no puedo ir?
-Porque necesitas descansar, además no tardar tanto.
-De acuerdo.
.
En la noche, escuché que Michael tocaba la pared desesperadamente así que baje de la cama y aún dormida moví el inodoro y quite el pedazo de pared, se arrastró haci mi celda, puse una sabana mientas el se incorporaba de pie, se quito el uniforme y volteó, tenia una parte de éste pegada a su espalda, se había quemado con algo y eso se había fundido en su piel, alzó un poco la voz al ver que no reaccionaba:
-Alex, necesito que lo arranques.
-Michael, se fundió, saldrá tu piel también!
-N-no importa solo hazlo.
-Mierda, esta bien. 1,2...3.
Solto un fuerte grito antes de desmayarse, con cuidado lo metí a su celda y guarde el uniforme debajo de mi colchón, Sucre dijo que se encargaría de la coartada, yo con los ojos llorosos bese la cabeza de Michael y regrese a mi habitación, escuche como llegaron por el, escuche sus quejidos y una vez más me arrepentí de no haber ído con el.