-Tienen treinta segundos desde... Ahora.
Empezaron a salir Lechero, Bagwell y Bellick.
-Muévete mujer, se nos acabará el tiempo! -protestó James-.
-Whistler, aún no te das cuenta?
-De qué?
-No me movere, hasta que Michael lo indique.
-Scofield hazla a un lado echará a perder el plan!
-Ella sabe lo que hace, confíen en mi.
Varios segundos después la energía volvió y los oficiales con ella.
Se oyeron un par de disparos, era obvio que ya los tenían atrapados.
Alce la tapa un poco para ver que sucedía ahí fuera.
-Le dispararon a Lechero. -dije casi en un murmullo-. Y se los están llevando de vuelta a prisión.
-Michael dime de una vez que esta pasando con el plan?! -se exaltó Whistler-.
-Este es el plan.
-Dijiste que tenían treinta segundos para correr, pero la electricidad llegó antes. -reclamaba Mahone-.
-Debí haber hecho un mal cálculo. -me guiño el ojo-.
Mordi mi labio para evitar una sonrisa.
-Y ahora está repleto de soldados.
-Y patrullas.
-Y armas.
James y Mahone seguían completando sus quejas, mientras yo trataba de concentrarme en otra cosa para olvidar el dolor y las ganas de vómitar.
-Harán u-un conteo, t-tenemos que estar ahí. -tartamudeaba el niño-.
-No, no, ya casi es hora. -Michael se asomó por el agujero-. Sólo un par de segundos. VÁMONOS.
El salió primero, tenía que verificar que todo estuviera en orden, después, me ayudo a salir, y así sucesivamente hasta McGrady, que le estaban pisando los talones.
Nos arrastramos como orugas por debajo de las patrullas, la tierra y el polvo fueron mis enemigos, pues me provocaban tos y tenia que hacer un gran esfuerzo en el jodido abdomen para callarlo.
-Cómo va todo Alex? -preguntó Michael notando mi problema con la arena-.
-Aun puedo resistir.
-Esa es mi chica.
Cruzamos el último obstáculo y llegamos hacia la reja que ya estaba corroida por el Kesslivol.
La pateamos un poco e instantáneamente se rompió.
Salimos uno por uno y empezó (de nuevo) la carrera de nuestras vidas.
Correr durante toda la madrugada, sin comer ni beber, no haber descansado por 24 horas, vomitando sangre cada que parábamos para tomar un respiro. Vaya Odisea.
Michael tomó mi brazo y rodeó su cuello con él, así corrimos durante un par de kilómetros pero no era justo, lo estaba agotando, lo retire y seguí corriendo por mi cuenta.
Antes amaba las selvas, era como un lugar tranquilo, lleno de color verde y vegetación única. Ahora las odiaba.
Whistler se tropezó con un árbol caído y voló por lo cielos hasta aterrizar en el lodoso suelo.
Al principio reí, ojalá hubiera tenido una cámara para grabarlo; después, vi que torció el tobillo y lo ayude a seguir corriendo.
-En verdad somos un dolor en el trasero. -dijo con quejidos-.
-Tu si, ella a veces. -Mahone apareció y me quito a Whistler de encima-.
-Gracias?
No tardamos mucho en llegar a la playa.
Ahí, nos encontramos con Link.
-Lo tienes?
-Esta enterrado, vamos.
Mientras ellos se dirigían a la arena, yo me tumbe para recuperar el aliento. Una laguna de sangre se deslizó por mi boca hasta topar con la grava. El sabor del metal se impregnó en mi garganta y boca. El sol me provocaba ganas de dormir ahí, sin importar que los soldados estuvieran a unos minutos de nosotros.
-Preciosa, no, no, no lo hagas. Quedate conmigo, si? Toma ésto, estamos a unos metros de que esto termine. No me dejes.
La voz de Michael de cortaba, los rayos del Sol me cegaban, y una pizca de migraña se hacía presente.
Me incorporé lo más rápido que pude y me tome... Un dispensador de oxígeno?
-Sabes nadar Alex? -preguntó Lincoln-.
-Ahora hasta podría volar con tal de llegar al hospital. -me quite los zapatos y los arroje a la arena como los demás-.
-Cuabtro tanques, cinco hombres? -preguntó Mahone-.
-Qué mal que no tengas un Alexander.
-Toma éste, Lincoln y yo compartiremos.
-Oye podrías guardar mi... Mierda, donde esta mi libro?
-Creí que tenias las coordenadas?
-En el libro Scofield, no tengo memoria fotográfica.
-Vamos, entren al océano. El libro ya no está.
-Pero, y-yo no se nadar muy bien. -McGrady temblaba como un pepinillo-.
-No hay opción niño, vámonos. -rugió Lincoln-.
Michael se acercó a él, le dijo algo que lo tranquilizó y en seguida nos siguió.
Corrimos por la costa como si fuéramos de Baywatch, no pude evitar decir:
-Puedo borrar esto de mi lista de cosas de hacer antes de morir.
-Nunca pierdes tu sentido del humor. -se rio Link-.
Nos sumergimos y comenzamos a bucear, cada veinte segundos tomaba oxígeno.
La salinidad del agua empezó a castrarme los ojos y la nariz, nunca me sentí tan agradecida como cuando salí a la superficie.
-Hacia la viga. -grito Lincoln-.
Llegamos en tres patadas, no sujetamos de las orillas y tomamos un pequeño respiro.
McGrady estaba pegado como sanguijuela a Michael, así que le dije con tono divertido:
-En este momento te envidio más que a nadie.
Salió una risa nerviosa de su boca y las mejillas de Michael empezaron a colorearse.
-Dónde está? DÓNDE ESTÁ? -se exaspero Lincoln-.
-El que? -preguntó Whistler-.
-Sucre, tenía que llegar con un bote.
El oleaje fue en mi contra y me hizo tragar agua cuando iba a tranquilizarlos, de nuevo el líquido rojo se apoderó de mi espacio personal, empecé a ver destellos negros y blancos, después sentía como flotaba en algo húmedo hasta que tiraron de mi.
-Mahone la tienes?
-Si, si. Sigue respirando pero está muy grave, si no llega a tiempo al hospital, solo le quedarán un par de días.
-Toma al chico quiero tenerla conmigo.
Mientras yo divagaba por el espacio-tiempo, ellos hacían un trueque de personas.
Michael me sujeto rígidamente de la cintura y subió su pierna para que pudiera sentarme en ella.
-Se me acalambran las piernas. -logré decir-.
-Tranquila, Sucre llegará. No nos dejaría aquí.
-Michael, te amo.
-Yo más pero no digas eso ahora, dímelo cuando lleguemos a la costa.
-El tiempo que pase contigo fue lo mejor que he tenido en mis 29 años, aunque solo estuvimos en prisión. -hice un ademán con la cabeza mientras decía ésto-.
-Aún tenemos muchas cosas por pasar juntos, si? Tenemos una familia que crear. Una Mike con quien jugar.
Besó mi frente, yo me aferré a él como si mi vida dependiera de ello (y literalmente lo hacía).
-Miren ahí está! SUCRE!
Link gritó varias veces su nombre pero el no respondía.
-Es la guardia costera. Nos encontraron.
Las palabras del chico no tenían impacto en mi, solo quería llegar a un malnacido hospital.
Resultó que era el papá de McGrady, hurra!
Me subieron entre todos, dejándome lentamente en el piso del bote, Mike estaba sentado junto a mi; en ese momento de acerco James.
-Si no tengo otra oportunidad, lo haré ahora. Quiero agradecerles todo lo que hicieron por mi, en verdad.
-De nada, como sea. Disfrute golpearte algunas veces. -dije sosteniendo mi abdomen-.
-Tomare eso como si fuera el dolor quien habla.
Llegamos en santiamén a la costa, nos despedimos de McGrady y Lincoln nos entregó rola para cambiarnos.
-Alex, toma, tengo lo que me pediste.
Me dio una caja, era una peluca rubia, la identificación, zapatos y... Un vestido?
-Enserio Lincoln? Voy a escapar con un vestido?
-Oye entre en pánico no sabia que preferias. Solo cambiate y luego te compraré los pantalones que quieras.
Entre al auto y me cambie, mi estómago parecía una explosión de colores.
La rubia peluca la guarde para después, al igual que la identificación.
James, Mahone y Whistler subieron al auto. Todos se sorprendieron por mi atuendo.
-Hacia años que no te veía con vestido Varay. -dijo Mahone con un tono pícaro-.
-Lincoln puede ser buen hermano, pero es un pésimo organizador de ropa.
-Quiero su vista hacia el frente, en especial la tuya Whistler. -gruñó Michael-.
Apenas me di cuenta que James estaba viendo mis largas y semi-bronceadas piernas.
-Qué? -preguntó descaradamente-.
Rodee los ojos y me mantuve callada.
Tuvimos una inesperada compañía: Gretchen y sus monos voladores .
La perra le puso un rastreador a James en su cronómetro, nos estuvo siguiendo por varios metros provocando que Lincoln zigzagueara y yo contuviera mi vómito.
Llegamos finalmente a una cabaña, Lincoln les empezó a disparar como lunático, ellos respondieron.
Me hice bolita en una de las esquinas hasta que terminó y corrimos por la puerta trasera hacia un auto.
Lincoln dejó una grabadora con disparos para entretenerlos un rato. Muy ingenioso.
-Podemos discutir sobre porque saliendo de la hoguera volvemos a jugar con fuego? -cuestionó James-.
-Porque esa es la instrucción. -respondí Link fríamente-.
-No se te ocurre que podríamos poner en riesgo a Sofía y a tu hijo?
-Ya hablamos de esto y fuiste derrotado, cállate. -intercedió Mike esta vez.
Volteó su mirada hacia mi, instantáneamente respondí:
-No me mires, es terco.
Llegamos a una construcción abandonada, tenía buenas rutas de escape por si algún percance nos sucedía.
Bajaron todos los hombres del carro, yo me quedé recostada en el asiento de atrás, solo quería ver que entregaran a Lj vivo para despedirme de todos y sesar el dolor.
Mientras estaba en el carro me puse la rubia melena que Lincoln me había comprado, y guarde la identificación en una cartera que robe mientras corríamos.
Minutos después de haber llegado, Gretchen contactó a Lincoln, éste le dio órdenes y colgó bruscamente.
Michael me tomó en brazos y me cargó hasta la construcción y me sentó en una barra, el se posicionó frente a mi.
-Me encanta como se te ve ese vestido.
-Me encanta como se te ve ese saco.
Nos sonrojamoa un poco y después, él se encaminó hacia Lincoln.
Le agradeció por lo que había hecho y luego Lincoln Burrows hizo algo que no vi venir: Amenazó a Mahone.
-Te iba a asesinar en la playa pero no quería que nos descubrieran, así que date vuelta y mírame a los ojos.
Alexander obedeció, roto lentamente y antes de que Lincoln le disparará se oyó un vidrio romperse.
Me sobresalte al ver que James era quien se había fugado, trate de seguirlo, pero en mi condición solo pude alcanzar a ver que de iba en una camioneta.
Los tres nos quedamos afuera del edificio, sin dinero y con una deuda que pagar.
.
Corrí por el auto y les grite para que subieran; conduje como loca persiguiendo a Whistler, hasta que el estúpido casi hace que lo atropellen y tuvimos que bajar del auto.
Nos separamos para recorrer diferentes caminos y emboscarlo.
Lo encontré mientras hablaba por teléfono frente a una tienda, lo golpe en la cara y lo derribe, lo mantuve en el suelo y le quite el teléfono.
-Dejame adivinar. -dije-.
-Alexandra Varay, pensé que ya estabas muerta.
-Bueno, no creo que tarde mucho.
-Estoy en el lugar, traiganme a Whistler.
-Te llamaremos luego.
Colgué y espere a que los hermanos llegaran.
Lincoln le rompió un par de costillas y luego lo arrastró hasta la Plaza de Francia. Ahí Michael volvió a contactar a Gretchen mientras yo preguntaba por el centro medico más cercano.
Michael me explicó el plan, retendriamos a James mientras confirmabamos que Lj y Sofía estaban vivos.
El plan resultó como se esperaba, Michael nos indicó que nos fuéramos y así lo hicimos.
Nos dirigimos hacia un museo, entramos y Michael no tardo mucho en encontrarnos.
Me quede viendo algunas obras, era algo que no se veía muy seguido, eran piezas arqueológicas, eran muy hermosas.
-Sabías que en la cultura panameña, cuando alguien se quería casar con alguien lo hacía mientras una boa los enredaba para ver si pertenecían el uno al otro? Si estaban destinados a estar juntos soportarían toda la ceremonia con ese animal, si no, la desesperación los invadiria y morirían juntos por no elegir bien.
-Eres... Tan nerd. -dije con una expresión de admiración-.
Más tarde llegó Gretchen con Lj y Sofía a su lado.
Primero dejo ir al pequeño y luego soltamos a James.
Sofía fue a abrazarlo aunque un poco temerosa le preguntó:
-Donde están las coordenadas James?
El se quedó sin habla.
-Saliendo de aquí se las daré, vamos.
-El trato era que se las dieras ahora. Quiero verlas.
Así pelearon unos momentos hasta que Gretchen explotó.
-Despierta Sofía! Éste es el mundo real. No hay coordenadas, te engañó.
Con pequeñas lágrimas en las mejillas se paso de nuestro lado, junto a Lincoln.
-Bueno, ya tenemos lo que queríamos ahora por que no nos vamos? -dijo Gretchen con una satírica sonrisa-.
-Una cosa más -rezongo Michael-, debido a que torturaste a Alex, quiero que la lleves al hospital sin levantar sospechas.
-Claro lo haré, ahora salgamos.
-Al ser una institución que no permite la entrada de armas yo no estaría muy seguro que debamos salir uno por uno.
-Bueno tienes muchas puertas para elegir, juega conmigo por última vez.
-No, jugaremos todos juntos.
Rompió la caja de cristal de una de las reliquias y una irritante alarma comenzó a sonar.
Salimos todos todos juntos del museo, yo iba a lado izquierdo de Gretchen.
Al llegar a la salida nos revisaron.
-Cuida tus manos. -dijo Michael con tono amenazante mientras el novato me revisaba-.
-Espera ahí, donde está tu identificación?
-Interrogaron a Whistler-.
-Yo, eh...
Gretchen le hizo una seña a uno de sus monos, éste saco una pistola y disparo.
Pero erro el tiro, no le dio al policía, me disparó a mi.
La bala se incrustó en mi omóplato derecho, caí en seco al pavimento.
-ALEX!
Michael corrió hacia mi, hizo presión en la herida con su saco y después gritó.
-Alguien llame a emergencias, esta perdiendo mucha sangre!
-Bueno, ahí esta tu boleto al hospital.
-Eres una maldita perra.
Su voz sonaba entrecortada, ya no distinguía las figuras de las personas que pasaban, todo se volvía negro, las gritos desaparecían, se volvían cada vez más silenciosos, lo último que escuché fue un murmullo que decía Volveré por ti.
.
Desperté en una habitación color verde, la luz solar entraba por la ventana y provocaba que aperetara mis ojos.
Había un par de ramos florales en la mesa de un lindo color melón.
En la silla a lado de mi cama estaba Lincoln, dormido junto con Sofía.
Lj entró después de unos momentos, los despertó y ellos voltearon hacia mi.
-Sorpresa! -dije mientras tallaba mis ojos-. Cuanto llevo aquí?
-Tres años. -suspiró-.
-Q-qué?
-Bromea, pero si estuviste un largo tiempo en coma.
-Por cuanto?
-Ocho meses..~.~.~.~.~.~.~.~.~.
Acabamos con la terceraaaa!
Vayamos por el cuarto round, va?
Gracias por continuar leyendo esta descabellada historia que surge en mi cabeza mientras estoy aburrida.
Ésto aún no se acaba.
~💎
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P. D: El siguiente capítulo tendrá algo de contenido "inapropiado" para menores, así que disfrútenlo diablillos 😈.
Mazikeen fuera.
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Prófugos
FanfictionAdaptación serie Prison Break. . Alex, huérfana de nacimiento, criada en la calle, vista como criminal para unos, agente para otros. Un día, un robo la condeno a 7 años de cárcel en más ni menos que Fox River donde conocerá a alguien que le provoque...