¡Especial 1K!: De las calles al Buro

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-NO ESCAPARÁS PERRA!
Parecía que que era la única frase que se sabían. Ya había pasado por eso cientos de veces, robo algo, ellos lo descubren, y mientras duermo pacíficamente en un departamento abandonado ellos irrumpen y tengo que salir corriendo por la ventana. Una mañana común.
O eso creía.
El camino se había acabado, eran más de siete hombres esta vez, todos armados, una cerca con puas bloqueaba mi salida; busco grandes objetos para formar una "escalera" y brincar pero éste día la suerte no era mi amiga, solo había un enorme bote de basura, decidí tomar impulso para saltar sobre el y atravesar la cerca, cuando iba a empezar a correr alguien jalo mi brazo, GENIAL! Me habían alcanzado, logré derribar al que me había sujetado pero aun había ocho más apuntando a mi cuerpo.
-Saca el arma, con cuidado.
-Bien, bien. -obedecí-.
-No somos idiotas, sacalas todas.
-Me atacaron en el apartamento, aún no se si sigo despierta o no, es la única arma que pude agarrar.
-Revisenla!
Levante mi manos y les di la espalda, tres sujetos fueron a revisarme, dos recorrieron mis piernas, el tercero hizo que doblará mi espalda, reviso mis brazos, después se detuvo en mis pechos, los dos hombres aún seguían agachados, era el momento perfecto para actuar.
-Ventajas de ser mujer, cuatro posibles razones para distraer.
Patee a los dos hombres, pise sus bolas y saque las dos armas que traía en la cadera, solté un fuerte cabezazo al último y pise su empeine, lo utilize de escudo cuando empecé a dispararle a los demás, logré derribar a tres, iba a seguir disparando pero las putas recargas se habían quedado sobre la cama.
-Mierda! -avente al sujeto al piso-.
-Vamos gatita, danos el dinero y la joya.
Me acerque a ellos, enserio les entregaría lo más presiado que tenia hasta ahora?
No.
Arroge las pistolas hacia sus feos rostros y corrí hacia el bote. Justo cuando iba a impulsarme sobre la cerca, uno disparo hacia mi hombro, provocando que el increíble salto atlético resultará una estúpida caída y dolorosa además de que me desgarrara un pedazo de pierna.
Los gatos siempre caen de pie, pero estas vez un solo pie no iba a soportar 60 kilos.
Salí del callejón casi arrastrandome, dejaba un pequeño rastro de sangre por donde pasaba.
Logré llegar a una avenida, estaba exhausta, ya no podía más, la pierna me punsaba y mi brazo se sentía como miles de cristales rotos.
Lo último que escuché fue una señora gritando: ~auxilio, hay una chica herida, llamen al 911~.
.
Parecía que todo había sido una pesadilla, abrí los ojos y estaba en la cama con el sol brillando por la ventana que resplandecía sobre la blanca pintu... Un momento, en el departamento ni siquiera se notaba el color de las paredes . Me senté de golpe y mi pierna me recordó con fuertes gritos de dolor que no había soñado, estaba en un hospital, muy cómodo y blanco.
Trate de revisar mi bolsillo pero no lo sentía, no traía ropa, (solo interior), además de que tenia la muñeca derecha esposada a la cama.
Cuando iba a sentarme de nuevo un hombre apareció, no era doctor, vestía de traje, muy arreglado, (no era tan guapo pero había algo dentro de él que me intrigaba), cerro la puerta detrás de él y se sentó en la silla que estaba al lado de mi cama.
-Hola, soy el agente Mahone.
-Nadia. -dije sonando confundida-.
-Bien Nadia, sabes por qué estas aquí?
-N-no, todo es muy confuso, creo que iba caminando y un auto me arrolló o algo así.
-Bien Nadia, reconoces este bello diamante? -mostró la joya en una bolsa de evidencias-
Mis ojos brillaron cuando lo vi, era realmente hermoso... Y caro
-Si, era de mi abuela, me lo dio y cuando iba regreso a casa ocurrió el accidente.
-Y como explicas la bala en el hombro?
-Bala pérdida? Sucede a diario.
-Y el millón de dólares? Es peligroso que una chica salga con tan grande cantidad a las calles.
-Se cuidarme sola -soñé engreída esta vez-. Y porque el FBI se interesa en un caso tan leve como éste?
-Porque sabe que hay una gran mente criminal detrás de esto y puede ser útil para un trabajo especial.
-Y porque esa mente criminal quisiera ser parte de una organización gubernamental en vez de seguir su vida de delincuente?
-Porque podrían limpiar su expediente y dejar que ella tenga una vida normal.
-De qué clase de trabajo hablamos?
-Agente especial, tendría que trabajar en pareja o sola según la situación.
Me dejo pensando unos segundos, la oferta era tentadora, empezar de nuevo, terminar el trabajo y mudarme, por qué no?
-Alexandra Varay -dije mientras extendía mi mano-
-Alex Mahone.
-Me regresará el diamante?
-Si cumple con su parte.
-Cuando inicio?
-Cuando se recupere.
.
Un maldito mes tarde en rehabilitación, por "suerte" la bala no perforó la arteria tibial, si no bye bye caminar; me dieron de alta y regrese a mi hogar dulce hogar, cuando entré todo estaba muy remodelado, MUY.
Había una cama, cosina, baño y ventanas nuevas, el departamento estaba pintado de color negro con beige y toques de dorado.
También había un maldito sillón!
Me deje caer en este y una voz conocida apareció de una habitación a la que no había entrado.
-Espero que te guste. Supuse que estos colores serían perfectos para tu sarcástica personalidad. -dije Alex mientras se acercaba al sillón-
-Nada mal. -dije volteando me hacía el-.
-Tienes hambre? Podría prepararte un asado.
-También eres chef?
-Es un pasatiempo, apenas entre al Buro y puede ser muy estresante el trabajo, así que decidí que la cosina sería mi lugar de relajación.
-Bueno, prepararme lo mejor que tienes.
Sonrió y se puso manos a la obra, mientras el cosinaba, me metí a tomar una baño, el agua era transparente y estaba templada, las toallas estaban limpias y suaves.
Entre a mi habitación y me puse un pantalón negro y una sudadera ligera que encontré.
-La cena esta servida! -grito Alex-
Seguí el olor hasta el comedor, me senté y el me sirvió un corte de carne y una guarnición de puré de papa y espárragos.
El se sentó frente a mi, no comió nada, cuando termine de marcar preguntó.
-Qué tal?
-Tu esposa debe ser muy afortunada. En verdad está rico.
-Me alegra que te guste.
Terminamos los platillos en silencio, recogí la mesa y antes de irse Alex agregó:
-Te veo mañana a las ocho.
-Si es que puedo levantarme.
Cerré la puerta y me acosté, era tan suave la cama, en cuanto toque la almohada me morí.
.
~Bip-Bip-Bip-Bip~
Desde hace cuanto que tengo despertador?
Ocho y cinco.
Aún era muy temprano.
CARAJO.
Me levante de sobresalto y me dirigí al baño, tomé una ducha de 3 minutos y me vestí con pantalón de cuero y chaqueta igual, cepille mis dientes y salí corriendo del departamento. Tome mi moto y salí a 230 km/h.
Llegue más o menos a las ocho y 15.
Aun no sabía que mierda iba a decir o hacer en cuanto llegara, respire hondo y abrí la puerta. Todos estaban trabajando, ni siquiera me notaron, me paseé por las oficinas en busca de Mahone, estaba al teléfono así que solo hizo una seña de que lo esperara. Accedí.
Mientras esperaba una mujer apareció, parecía de la edad de Mahone, un poco más baja de estatura que yo.
-Hola, soy Felecia. Debes ser Alexandra, no?
-Si.
-No se si es un honor tenerte aquí o deberia preocuparme, eres una de las mejores criminales y de las más buscadas.
-La anterior persona que trabajó conmigo terminó empaquetada. -dije asustandola-
-Por suerte el será tu compañero no yo.
-Alex, pasa. -dijo Mahone mientras habría la puerta-. Llegas tarde.
-Oye, el colchón era nuevo, no pude evitarlo.
-Solo esta vez.
-De acuerdo.
-Tu oficina será la que está al lado de la mía, si necesitas algo solo ven.
-Bien, en que trabajaremos primero?
-Bueno, te gustaría ir a Rusia? podemos usar tu increíble habilidad para inventar historias para infiltrate en el grupo íntimo del mafioso más buscado de los Estados Unidos.
-Ya sabías quién era cuando nos conocimos verdad? -dije ladeando mi cabeza-.
-Solo sabía que eras una criminal pero no pensé que tan buena.
-Me agrada superar expectativas de mis fans.
-Entonces, visitamos la plaza Roja gatita?
-Yesli ~sí en ruso~.
-Salimos en una semana.
-Bueno cuéntame, que sabemos de estos mafiosos.
Me mostró los archivos, le ayude a organizar lo que sabíamos hasta ahora, me dio unos datos para que "adornara" mi oficina, era cómoda, tenía buena vista y mucho espacio. Acomode las pistas que me había dado y con un poco de estambre trace líneas que conectaban a los sucesos, era toda una rata, había evadido a la policía por más de 2 años y medio y ahora había escapado hacia Rusia, con razón estaban tan desesperados que recurrieron a una criminal. Cuando acabé me di cuenta que era suficientemente tarde para que una licorería estuviera cerrada. Guarde mis cosas y salí de la oficina, me fije si Mahone seguía ahí, estaba en su oficina pero dormido.
-Es tarde Alex.
-H-hum...
-Vámonos, mañana seguimos.
-De acuerdo -bostezo-.
Nos dirigimos hacia la salida, cuando llegamos al estacionamiento antes de subirse a su coche me preguntó:
-No quieres que te lleve? No recuerdo que tu casa esté cerca y es tarde.
-Hay algo que no viste cuando remodelaste el departamento.
Subí a mi moto y posee en ella.
-Te sabes cuidar sola linda.
-Uno hace lo que se puede.
-Te veo mañana.
-Ciao.
Arranque y conduje en la oscura noche, ese era mi paisaje favorito, viajar en moto, disfrutar del viento, la pacifidad de la noche, eso era lo que realmente amaba.
.
La semana paso más rápido que un parpadeo, apenas ayer en la noche había empacado mis cosas, y eso me había tomado casi toda la noche, estábamos a punto de abordar el avión, repasaríamos el "itinerario" en el avión y luego dormirá el tiempo restante.
-Has viajado en avión antes?
-Si, pero no por vacaciones.
-Y entonces cual fue el motivo?
-Mantenerme en prisión.
Mi respuesta lo desconcertó un poco, se quedó callado hasta que nos asignaron los asientos. Tome el de la ventana.
-De donde eres Alex? -preguntó él-.
-Rusia.
-Fascinante, tu inglés es muy bueno, donde lo aprendiste?
-Bueno, llegué a América a los 15, tuve tiempo de hacer amistades y aprender.
-Y tus padres?
-Huérfana. Nunca me interesó saber que les había sucedido.
Iba a agregar algo más pero el altavoz lo interrumpió con las medidas de seguridad y cosas estúpidas que se te olvidarán en el momento que el avión se caiga.
-Entonces, primero nos instalaremos, estableceremos todo el equipo, contactaremos al jefe y después podremos cenar un plato de Borsh. Despiertame cuando empiecen a repartir los snacks.
-Claro jefa.
Me coloque un antifaz que kos habían dado y me acurruque en mi asiento, poco después sentí algo ligero sobre mi cuerpo, era una manta. Le agradecí a Mahone y de nuevo me introduje en un profundo sueño.
.
Llegamos a mi bella y fria Rusia, rasista, pero bella.
Nos instalamos en un hotel, empezamos a armar el equipo, nos concretamos con el satélite, revisamos los expedientes e informamos a los superiores que habíamos llegado y que no había tratado de asesinar a Alex.
-Ahora vengo. -dije mientras me ponía mi abrigo-
-Pensé que cenariamos, iba a pedir la comida.
-Oye, no encargaremos nada, yo cosinare. No eres el único con talentos ocultos. -guiñe un ojo y salí-.
Compre lo necesario para la sopa además de pollo para el plato fuerte.
Llegue y puse a trabajar mi cerebro para recordar como era la receta. Conforme iba cosinando el color y aroma me indicaban si aun tenía el toque o era mejor que hubiera robado la cena.
-Y bien? Puedo casarme?
-Estas seguro de que tu la hiciste? Es lo más rico que he probado. Eres joven, no lo hagas aun.
-Jajaja, de acuerdo.
Comimos y disfrutamos del paisaje un rato, después nos fuimos a dormir, serian unos meses muy difíciles.
.
Seis meses, tres días y aún no extrañaba Estados Unidos.
Prefería el frío de aquí.
-Cómo vamos Alex? -preguntó Mahone-
-Ya casi llego, media cuadra y me encontraré con el. Puedes verlo?
-No, pero te tengo cubierta, estamos a un paso de atraparlo, pronto acabará.
-Enserio me gustaba seguirlo, rayos.
Llegue al lugar, no había nadie, me quedé unos minutos ahí parada hasta que una camioneta llegó.
-Nadia Knyazev? -preguntó un hombre más grande que yo, y muy fuerte-
-La misma.
-Muéstrame.
-Alcé mi manda y le mostré el tatuaje de la "hermandad".
-Sube.
Obedecí y me senté en el primer asiento que encontré, después el mismo sujeto se acerco a mi y me dijo:
-El jefe quiere verte pero tenemos que ser cuidadosos -levantó un saco de tela-.
-Oigan, ya he ido antes, porque tengo que usarlo?
-Enserio? No recuerdo que alguien te haya recogido? -me miro con una ceja alzada-.
Supe que la había cagado.
-Tal vez me equivoque, muchas personas me recogen y ustedes los rusos son muy idénticos.
-Claro... Ahora, pontelo.
Obedecí y me quede callada el resto del camino. Sabía donde era, era lejos del lugar donde me habían citado, pero al parecer, la cita iba a ser en otra ubicación.
No tardamos mucho en llegar, baje de la camioneta y me quite el saco.
-Por que estamos aquí? -pregunte-
-El jefe quería hablar contigo a solas.
-Y donde esta?
-Llegará pronto, por qué no te sientas?
-Estoy bien, caminar un poco.
Me aleje lo suficiente y empecé a mandar un mensaje a Mahone, estaba a punto de enviarlo cuando sentí un fuerte golpe en la cabeza. Me desmaye.
Cuando desperté (además de jaqueca), no tenía blusa y colgaba de unas cadenas. Conforme abría los ojos la figura de un hombre se hacía más visible, era mi presa, Slavik Morozov.
-Vaya, vaya, quien tenemos aquí.
-Privet Slavik! ~hola~. Al parecer tus hombres se confundieron,  soy tu futura socia, y así no se trata a la familia, o si? Por que no les dices que me descuelguen y hablamos en el restaurante que amas tanto.
-Sería una gran idea pero primero dime, quién es Mahone?
-No tengo la más remota idea de lo que hablas. -dije con un poco de temor en la voz-
-Vamos Nadia, o prefieres Alexandra?
Genial, todo se va al carajo.
-Sorpresa! Ya que sabes mi nombre, pongámonos cómodos.
Bajame o te meteré toda tu droga por el trasero.
-Eres más fuerte de lo que aparentaba, me gusta.
-Si así quieres.
Me impulse hacia abajo para tirar de las cadenas, tome aun sujeto y lo ahorque hasta que soltó su arma, la tome y me libere de éstas, los dos gorilas de Morozov me persiguieron, frustraroni escape y me sujetaron a una mesa, Slavik se acerco a mi con sus juguetes.
-Bien Alex, no quería tener que hacer esto pero me obligaste. Donde esta Mahone?
-No lo sé.
-Donde esta Mahone?!
-Tal vez con tu madre.
Enterró el cuchillo en mi abdomen, no tan profundo pero si doloroso.
-NO seas estúpida niña, el no haría lo mismo que tu, preferiría salvar su pellejo antes que el tuyo, así son todos. Puedes hablar y te dejaremos libre, sana y salva.
-Vete muy a la mierda.
-Despidete de los bikinis entonces.
No se cuantas veces más me torturó, solo recuerdo la voz de Mahone y el escuadrón llegando.
-No Alex, no, eres muy fuerte, vamos tu puedes, resiste, pronto llegará la ayuda.
Y de nuevo desperté en un hospital, con un gran corte en mi estómago.
-Qué haces aquí? Es tarde ve a dormir. -dije aún dormida-
-No te voy a dejar, si hubiera llegado antes, no habría pasa...
-Shhh -lo interrumpí-. Estoy bien, o viva al menos, ve a casa, duerme y te veré en un rato, si?
-Bien, Alex... Te... A-admiro mucho.
-Te quiero Mahone.
Me gustaba esa sensación de tener a alguien que se preocupara por mi, a un amigo, un compañero.
Pero nada era para siempre...




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