The Best Revenge - Arsinoe De Blassenville

Capítulo 20

Los chicos estaban jadeando como cachorros después de subir corriendo las escaleras hasta llegar a la habitación de Draco. Harry la admiro pese a la satisfacción de Draco, asegurándole que sí, era más grande que la suya; si, le gustaba el color verde; si, la vista del terreno de la Mansión Malfoy era maravillosa; y si, él también tenía su propio baño pero a diferencia de Draco, el suyo era más pequeño.

Era una habitación grandiosa, aunque Harry prefería su pequeño espacio acogedor. La tallada, dorada y amplia cama de Draco lucia demasiado grande para ser confortable, y la ropa de cama de satín no se veía adecuada para solo estirarse y descansar. Había juguetes que Harry no reconoció, y algunos que si, como una gran colección de animales de peluche en un adornado baúl. Algunos de ellos, como un caballo alado y un dragón, estaban gastados con amor y tiempo. Draco le informo a Harry altaneramente, que los peluches eran para bebés—Solo los tengo porque a veces, niños pequeños vienen a visitarnos—Harry asintió seriamente. Él a menudo había envidiado los peluches de Dudley, pero ahora estaba demasiado grande para ellos. Un lobo gris atrapo su mirada y causo en su corazón un dolor inexplicable. Cerro el baúl y los chicos miraron por las ventanas enmarcadas por preciosas cortinas de seda.

>> Ese es el campo de quidditch—Dijo Draco, apuntando al este del jardín de rosas—Padre lo agrando el año pasado cuando se hizo cargo de todo en vez del abuelo—.

—¿Tu abuelo murió el año pasado? —Pregunto Harry—Lo siento—.

Draco negó con la cabeza—No, no está muerto. Solo está viejo y un poco mal de la cabeza. Tiene una suite en la otra ala de la casa. Su habitación está protegida y todo eso, así que no debes preocuparte porque salga—.

—¿Necesitamos estar en silencio? —Pregunto Harry, bajando la voz. Él era familiar con el concepto de estar en silencio y no molestar a las personas.

—No, te dije que está al otro lado de la casa, y tiene protecciones de silencio a su alrededor. Él no puede oírnos y nosotros no podemos oírlo. Los elfos le avisaran a Padre si hay algún problema

Harry había escuchado a veces a sus compañeros hablar sobre cosas que sus abuelos hacían por ellos, y a menudo había deseado tener un abuelo o abuela. Parecía injusto que además de ser huérfano, tampoco tuviera abuelos—Entonces siento que tu abuelo este enfermo—.

—No hay problema. Él siempre me dio un poco de miedo. Las cosas son mejores ahora que Padre está a cargo, de todas formas—Dijo, queriendo hablar de otras cosas—Apenas terminen con los chismes, iremos al campo de juego a probar las escobas. Volar es lo mejor en el mundo. ¿Que tienes allí? —Pregunto, viendo que Harry sacaba la caja la tocaba con su varita y crecía, usando el hechizo que había dejado listo Snape. Los cubos grises se sacudían y cambiaban.

—Bloques para un castillo—Le dijo Harry, vaciando el contenido de la caja en la elegante mesa de estudio de Draco. Le mostró una pieza azul del techo de una torreta—¿Ves? Quería mostrarte esto. Puedes diseñar todo tipo de castillos. Encontré una fotografía de Hogwarts, he hice un castillo similar, pero prefiero los que imagino yo, aún más—Le mostró como dos bloques calzaban juntos, junto varios y dejo un espacio entre ellos—En el mundo muggle, estas son llamadas saeteras, y los arqueros se escondían tras ella para atacar a los enemigos, pero en "Camino A La Oscuridad", leí sobre el Sitio de Tiro, y como los hechiceros de Tiro se habían escondido tras las saeteras para lanzar hechizos al ejército de Alejandro Magno. Aunque no les sirvió de mucho—.

—¡Conozco esa historia! —Agregó Draco, comenzando a sentir interés en estas extrañas formas—Los hechiceros de Tiro eran muy poderosos, y creían que ningún muggle podría tomar su fortaleza—.