Capítulo 20

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Capítulo 20

El departamento de Christopher es la definición de elegancia, todo luce demasiado bien al punto de que no vi ninguna cosa que estuviera fuera de lugar, el ambiente es notablemente frío no hay el típico "calor de hogar", ni siquiera parece que alguien viviera realmente aquí. Los tonos tierra dominaban, el diseño es moderno y fresco, incluso hay alguna que otra pintura que son el toque de color.

-¿Qué te parece?-cuestionó pasando sus brazos por mi cintura.

-Es muy bonito, pero se ve bastante solo- comenté buscando su mirada.

-Sabes, eres la primera que viene a este departamento-soltó de golpe- lo tengo hace cinco años pero es la primera vez que invito a alguien a venir.

Le miré fijamente a los ojos, buscando algo que me dijera que aquello no era verdad, pero fallé, estaba siendo sincero conmigo. Me acerqué lo suficiente y simplemente lo besé, tomándome todo el tiempo del mundo para manejar un ritmo lento y dulce, hacía bastante que deseaba besarle así sin horarios ni interrupciones.

No recuerdo cuanto tiempo paso ni como pasamos del vestíbulo a la sala, aun así no me quejo teníamos este momento para nosotros, lamentablemente no duró demasiado ya que tocaron el timbre y no hablo de quién toca una sola vez y ya, sino de aquella persona que toca mil veces y hasta golpea la puerta con cierta ¿Violencia?

Me separé de él al segundo timbrazo, lo hubiera ignorado por completo si solo fuera eso pero no fue así, Chistopher me miró como un niño que no quiere ir a la escuela.

-Ve quién es antes de que te quedes sin puerta-intenté bromear, aunque estaba bastante preocupada.

-De acuerdo, pero antes...-se acercó y me beso lentamente otra vez- ahora sí.

Sonreí como una idiota mientras lo veía acomodarse la ropa para ir a ver quién estaba tan desesperado como para llamar de esa forma a la puerta de alguien. Termine poniéndome de pie también, me dirigía a la cocina para preparar algo de beber cuando escuche que alguien empezaba a hablar demasiado alto.

-Eres un estúpido amorcito-la voz de una mujer muy molesta, podía oírla claramente- ¿Cómo te atreves? Teníamos un trato.

-Verónica no hagas un escándalo por nada-comenzó a decir calmadamente Christopher- eso fue hace muchos años, nunca te prometí nada y lo sabes.

-Claro que lo sé-repuso ella, por su voz podía notar lo enojada que estaba- eres demasiado listo como para hacer algo así. Aun así no estoy segura de querer dejarte a alguien más.

Quede cuadrada ante esa última frase ¿Quién es Verónica? ¿Alguna ex de Christopher? ¿Cómo supo donde estaba?
-Mejor deja de decir tonterías y vuelve a tu país, seguro que tu padre esta loco por saber dónde te has metido-repuso él con cierto tono molesto.

-Ni lo sueñes amorcito-rió ella- él me envió aquí para constatar el estado de sus negocios, tenía pensado hacerte una visita sorpresa ¿Y qué me encuentro? Que vas a casarte con una modelucha de quinta.

-No quiero que hables así de mi prometida, si has venido con otras intenciones lo siento limitate a hacer lo que te han dicho y vete por las buenas-respondió Christopher notablemente molesto- ¿Cómo demonios conseguiste mi dirección?

-¿Te suena la palabra "investigar"?-definitivamente ella estaba jugando con él.

No sabía como sentirme al respecto, pero por lo que pude oír no es justo enojarme con Christopher, necesito que esa mujer se vaya de aquí ahora antes de que me arrepienta de todo.

En un instante se me ocurrió la idea más inmadura y genial del mundo.

-Cariño-llamé en el tono más meloso que había usado jamás- ya despediste al inoportuno-esto último le añadí una pequeña risilla.

Modelo de NoviaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora