Modelo de Novia

Capítulo 7

Capítulo 7

El camino de regreso al departamento se me hizo largo y tenía la sensación de que estaba muy mal con el horario pero no era así, todavía tenía dos horas por delante para arreglarme e ir a la empresa de Christopher. Esto último me sonaba un poco extraño, todo lo que rondaba a este sujeto me sonaba así, el mero de recordar que nos besamos en aquel lugar quedo opacado por completo por esta situación. No pensaba darle muchas vueltas a ese asunto realmente.

Como era un evento formal, escogí un vestido color vino corto, la silueta me favorecia bastante y ese color es uno de mis favoritos, era adecuado y me quedaba bien eso era lo que estaba buscando, complete aquel look con mi rizando un poco mi cabello y aplicando poco maquillaje. Revisé la hora y me apresure a salir, tenía que llegar con buen tiempo para poder conversar a gusto y todo eso.

Estaba demasiado nerviosa, ver a Rafael removió recuerdos y sentimientos que creí haberlos enterrado por completo, sentimientos que siempre estuvieron en esa fina línea entre la tristeza y la dulzura.

La empresa era un edificio enorme y aburrido por fuera, irradiaba elegancia por donde mirase, era abrumador en cierto punto. Entre un poco nerviosa, no sabía en qué piso quedaba su oficina ni nada parecido, por lo que pregunte a la recepcionista que me examinó de mala manera y casi como si se sintiera obligada me dijo en que piso estaba la oficina. Sin dudas aquella fue una escena un poco rara, que preferí ignorar.

Una vez llegue al piso en cuestión me vi nuevamente perdida, el pasillo era largo y estaba completamente vacío, había varias puertas pero no podía simplemente interrumpir en cualquiera, eso sería sumamente vergonzoso. Tomé el móvil dispuesta a marcarle para que saliera pero no lo hice, podía estar en alguna reunión o algo parecido...

-¿Disculpe, está buscando a alguien?-dijo de pronto una voz amable a mis espaldas.

Volteé y me tope con un hombre de mediana edad con mirada amable.

-Sí, me gustaría saber cuál es la oficina de Christopher Marxs, él me está esperando.

El hombre asintió y me guió hasta ella, tal como me lo imaginaba quedaba al final del pasillo, el sujeto tocó la puerta dos veces y una joven con el cansancio impregnado en el rostro salió a recibirnos.

-Dile a Christopher que su prometida esta aquí-dijo el hombre y me hizo una seña para que entrase a la oficina.

Le agradecí y espere en uno de los sillones que estaban frente al escritorio de quién debía ser su secretaria, todo se veía tan extraño, los colores que predominaban eran el gris y el marrón, si bien era moderno y sofisticado, lo sentía frío en cierta forma también vacío parecía simplemente una imagen sacada de una revista.

Al cabo de unos minutos, la misma mujer volvió a salir y me indicó que podía entrar, le agradecí en silencio, dejándola trabajar, me daba la impresión de que solo quería que le dejaran tranquila.

Christopher estaba tras un enorme escritorio cubierto de papeles, no es alguien que pudiera verse pequeño fácilmente pero ante tanto papeleo lo parecía.

-Felicita que bueno que pudiste venir-dijo sin despegar la vista de sus papeles, claramente aquello me molesto demasiado.

-Qué bien que lo hayas notado-respondí con cierto sarcasmo- estás tan metido en ello que ni siquiera recordaste que me pediste venir-adiviné ganándome una mirada sorprendida de su parte.

En ese momento dejo aquello a un lado y me examinó lentamente con la mirada, deteniéndose en mis ojos con la misma intensidad de antes, a la cual debería de aprender a acostumbrarme.

-Lo siento mucho-dijo al cabo de un rato- estos días estoy muy saturado y...

-Te entiendo, pero sobre exigirte de esta manera solo va a hacerte daño-respondí con cierta tranquilidad y una sonrisa pequeña, no tenía que molestarme realmente.