Capítulo 23

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Pov. Jimin

Estoy frente a la casa de Jungkook, me siento extremadamente nervioso, hemos estado alejados por tanto tiempo...

Pero ahora estoy aquí. A pocos metros de Jungkook que está sufriendo su celo sin que nadie este a su lado, y por lo que Eunha me dijo, su celo no es como los anteriores, me pregunto ¿qué tan malo será?.

Decidí dejar mis miedos e inseguridades a un lado, voy a enfrentarlo, ya no huiré más, y si aún después de saber todo lo que ocurrió antes y después de que nos separamos, aún no me perdona, no lo dejaré de nuevo, no voy a cometer el mismo error dos veces, no ahora que se que tengo dos hermosos hijos con el.

Cuando me acerque a la puerta ví una nota, era de Eunha. Decía que cuando entrara cerrará la puerta y le pusiera el seguro, nadie más que yo debía entrar.

Hice lo que pidió, pero en cuantro entre, pude percibir el aroma de Jungkook, era débil debido a que imagino que estaba en su habitación y el aroma no llegaba hasta el lugar donde estaba.

Comenzé a sentirme nervioso, de nuevo estaré con Jungkook después de años, aunque nunca pensé que tendría que ayudarlo durante su celo antes de que nos arreglamos, pero cuando todo termine planeo decile la razón por la que me fui. Espero que pueda comprenderlo y no se moleste tanto conmigo.

Subí hasta su habitación, se que esa es su habitación porque es de donde proviene su olor, sentía un poco de mareo, el aroma de Jungkook era muy dulce y siempre me aturdió, podría decir que estaba comenzando a perder mi cordura. Pero no podía ceder ante mis instintos, no quiero ser agresivo con el.

Habría la puerta y me encontré con una escena un poco extraña pero a la vez me éxito.

Jungkook se estaba masturbando. Sus gemidos y jadeos me estaban excitando y sentí como una parte de mi quería abalanzarse sobre el y tomarlo de manera fuerte y brusca, reclamarlo mío de nuevo.

– Ju-Jungkook– pronuncie con dificultad, me era difícil respirar su aroma y mantener mi postura, Jungkook volteó a verme y su mirada parecía perdida, como si su cordura hubiera desaparecido y solo estaba el omega que buscaba aliviar su celo de alguna manera.

– Alfa– dijo Jungkook en un gemido, que me hizo sentir escalofríos, quería tenerlo entre mis brazos.

Sin duda Eunha tenía razón, su celo parecía complicado, supongo que su cuerpo no acepta los supresores y no aceptará a nadie más que a mí, por eso fue a buscarme.

– Yo…– estaba comenzando a aturdirme, su aroma era muy fuerte– yo solo…

– Mi alfa– susurró Jungkook, apenas y pude escucharlo– mi alfa, solo mío– se levantó de la cama y comenzó a caminar hacia mi, a este paso no voy a poder aguantar por mucho tiempo–. Por favor alfa– estaba frente a mi mirándome fijamente, sus ojos mostraban un brillo especial, aquel que no veía desde hace años y que vi desaparecer frente a mi cuando terminé con él– … por favor tómame.

Perdí ante esa petición, sin dudar comencé a besarlo, había extrañado tanto sus labios, tenían un sabor muy dulce y eran suaves. Lo había extrañado tanto.

Jungkook dejo de hablarme y solo jadeaba para tomar un poco de aire cada que parábamos de besarnos.

– Jungkook yo– me costaba trabajo hablar, pero no puedo dejar pasar esto– …¿estás seguro de esto?

– Mi alfa…, solo… solo tómame– sin dudar comencé a besarlo de nuevo mientras lo cargaba para llevarlo hasta la cama, por más desesperado que este, quiero que sea algo especial ya que ha pasado mucho tiempo.

Sentía como mi vista y mi conciencia se nublaban, su aroma se volvía más fuerte con cada toque que hacía mientras acariciaba su cuerpo.

Sus labios se sentían tan bien y su respiración se volvía cada vez más caliente, podía darme una idea de cuan excitado estaba Jungkook ya que podía sentir su miembro cada que movía sus caderas para crear fricción con el mío.

Sin demorarme un minuto más, me deshice da la ropa de Jungkook y comencé a acariciarlo, era justo como lo recordaba, su piel era suave y el olor era más fuerte. Al poco tiempo también me deshice de mi ropa.

– A-alfa… to-tomamé– dijo Jungkook en medio de un gemido.

– Yo… n-no tengo condón… si lo hago seguramente voy a embarazarte– otra vez.

– Hazlo…, hazme tuyo… re-reclamame como tú omega– no me dejes– me preocupe porque Jungkook comenzó a llorar–. No me dejes otra vez, quédate conmigo…

– Nunca volveré a alejarme de ti– volví a besarlo y comencé a dilatarlo usando mis dedos.

Jungkook se quejó al principio, pero gracias al lubricante por parte del celo fue más fácil dilatarlo, me era difícil controlarme porque la habitación estaba llena de sus feromonas, pero no voy a lastimarlo. Cuando sentí que está lo suficientemente dilatado comencé a entrar en el.

– ¡Ah! Duele– lágrimas comenzaron a salir de sus ojos, así que decidí besarlo para que no se concentrará en el dolor.

– Tranquilo… re-respira… hasta que estés listo–. Joder, es tan difícil tener que controlarme ya que como ha pasado mucho tiempo está muy apretado, se siente como si fuera la primera vez.

Después de unos minutos Jungkook se acostumbró y comenzó moverse, dándome a entender que ya podía moverme, comencé con embestidas lentas pero certeras, pero al poco tiempo inconscientemente empecé a embestirlo más rápido, como si fuera mi lado alfa el que me controlaba.

– Ji-Jimin… ma-márcame…– la mirada de Jungkook era tan especial, recordaba a la perfección esa mirada, sus ojos habían recuperado ese brillo especial.

– Jun-Jungkook pero…

– Por favor… quiero estar contigo siempre… no-no dejes que alguien más me muerda– me enoje un poco de tal solo pensar que alguien más podría marcarlo.

Volví a embestirlo más fuerza y más rápido, cuando sentí que están por llegar, cargué a Jungkook e hice que se aferrara a mi.

– Jimin… ah… voy a… ¡Ah!

– Hagámoslo juntos, aguanta un poco más– un par de embestidas más y ambos llegamos al clímax, sentía como el nudo comenzó a formarse y Jungkook por instinto giró su cabeza dejándome ver su cuello en señal de total entrega.

No sé cuánto tiempo anhelé esto, me relamí los labios al ver lo dispuesto que estába a entregarse a mi, y no dude en enterar mis dientes en su cuello.

Sentía como mi corazón se sincronizaba con el de Jungkook. Por fin había logrado hacer que nos volvieramos compañeros.

Ojalá hubiera tenido el valor de haberlo marcado antes, pero eso ya no importa, ahora podemos estar juntos, sin importar lo que diga mi padre no dejaré a Jungkook, no de nuevo.

Después de que el nudo se desinflamara pasaron pocos minutos para que el celo de Jungkook empezará de nuevo. No pude resistirme a su olor.

Por una semana más tuve  que calmar  el celo de Jungkook. Así comenzó nuestra nueva relación














































































Continuará…

Tus palabras son mentira (JIKOOK) PAUSADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora