Kiane ~ Te Quiero

conociéndonos

Punto de vista de narrador omnisciente

Esta última carta que fue leída no pasó desapercibida por Elaine, la cual de inmediato decidió salir y llamar a Diane.
Diane estaba a dos cuadras de llegar a casa de King y Elaine cuando recibió una llamada de la última mencionada.

-Hola Elaine- dijo contenta la chica de coletas.

-Diane, esto es un problema- dijo algo preocupada la rubia.

-¿Qué sucede? ¿Le pasó algo a King?- dijo Diane de una forma muy preocupada.

-Algo así, resulta que alguien tuvo la misma idea que tú, si, alguien le hizo una carta- dijo aún preocupada.

-Pensaba que sería algo peor- dijo con una risita Diane.

-¿A qué te refieres?- dijo Elaine muy curiosa.

-Pues King no es de los que cambie de opinión muy rápido, me dijo que me amaba hace unos días- dijo con una risita.

-Tal vez tengas razón de eso, pero King es muy fácil de manipular con base a sus sentimientos, es fácil ganarse un sentimiento con base a tus acciones, ¿Porqué crees que aún no quiere a Ban? Porque él se ganó un pequeño espacio en su odio, y salir de un sentimiento en el que ya te definió es difícil- explicó Elaine volviendo a la preocupación.

-Tu lo acabas de decir, es difícil que te saque de un sentimiento, a mí me tiene en su amor- dijo sonriendo la de ojos Violetas.

-Pero en sentimientos como el amor si te puede reemplazar- dijo la de ojos miel cortando la llamada.

En ese momento Diane se quedó confundida, alguien lo podía quitar el amor que King siente por ella, sabía que debía hacer algo, no perder a King.
Diane apresuró el paso a casa de King por lo cual llegó en menos de lo planeado, una vez que estuvo frente a la entrada llamo a la puerta, para que la recibiera Elaine.

-¿Dónde está King?- dijo Diane bastante acelerada.

-Salio con Helbram, al parecer a una especie de fiesta- dijo Elaine bastante sería.

-Ayúdame por favor, no quiero perder ese lugar que me gane en su corazón- dijo con una pequeña lágrima en su ojo.

-Esta bien, pasa, llamaré a las chicas, esto es importante- dijo Elaine dejando pasar a Diane.

Mientras Elaine contactaba con las chicas e intentaba ayudar a Diane, Helbram llevaba a King a una pequeña fiesta donde solo asistirían amigos de el, una vez que llegaron a la fiesta King se sentó en una esquina, ya que no conocía a nadie, todo iba tranquilo en aquella esquina, King no dejaba de pensar en aquellas cartas, hasta que una voz lo saco de sus pensamientos.

-Ho... Hola...- dijo aquella voz sacando de sus pensamientos a King.

-¿Eh?- el giro a verla y era nada más y nada menos que Violeta -Hola- dijo con una pequeña sonrisa.

-Permíteme presentarme, ya que la última vez no pudimos, soy Violeta- dijo ella con un sonrojo leve en sus mejillas mientras estiraba su mano.

-Un gusto Violeta, soy Harlequin- dijo también con un leve sonrojo estrechando la mano de la chica -¿Quieres tomar asiento?- dijo con una sonrisa mientras mostraba una silla a lado de el.

Violeta solo se sentó en esa silla para empezar a hablar con King, así duraron un par de horas conociéndose, entre sus temas de conversación tocaron por un breve momento el tema de Diane, después de este tema regresaron a lo normal, llegaron al punto de intercambiar números, en el momento que hicieron eso estaban bastante sonrojados y ninguno sabía porque.
Después de unos minutos de haber intercambiar números King decidió irse a su casa, se despidió de Violeta y de Helbram y se fue.
Mientras King iba a casa, las chicas estaban buscando maneras de ayudar a Diane, Merlín solo decía que ya no podría recuperarlo, ya que de cierta manera lo humilló y rechazo, ninguna estaba de acuerdo con ella, Nadja por su parte decía que debía convivir más con el e intentar de poco en poco expresar sus sentimientos hacia el, con esta idea todas estuvieron de acuerdo menos Merlín que seguía con su idea de que ella no podría hacer nada.
Pasaron los minutos dando ideas a Diane hasta que se abrió aquella puerta de la casa.

-Elaine, ya llegué...- Dijo King algo alegre para luego mirar que estaba ocupada -Buenas noches- dijo saludando a todas las presentes.

-Hola- dijeron todas al unisono a excepción de una de ellas.

-Hola... King...- dijo Diane con un pequeño sonrojo.

-Bueno, no las molestaré más, me retiró, linda noche- dijo mientras se dirigía a su habitación -Elaine, si necesitas algo solo dímelo- dijo para encerrarse en su habitación.

Diane quería hablar con King, pero él se había ido muy rápido.

A ella solo le quedaba buscar una manera de no perderlo.

Continuara...