Quince

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-¿Summer?- expresó como si no creyera lo que veía.

-Señor Kim- dije mientras sin importar nada me lance sobre él pues me daba igual si alguien nos veía, bese esos perfectos labios y como una adicta en abstinencia seguí saboreando cada parte de los mismos, pues a pesar de que no había pasado mucho tiempo desde que los tuve, sentía que cada vez se me hacía aún más difícil permanecer lejos de él.

Y Kim no dudo ni un segundo en corresponderme y mientras nos adentrábamos a su casa siguió besándome.

-Es tarde y mañana tienes escuela- acotó en un intento de hacer que me detuviera a pesar de que sus manos no dejaban de jugar con mi trasero.

-No me importa- objete sin parar mientras mis manos se escurría bajo su camisa de pijama y así me permitía sentir su perfecto abdomen -Hagámoslo, hagámoslos ahora mismo- y era más que obvio a lo que me refería.

Pero mientras más movía mis caderas sobre las suyas, casi implorándole que siguiéramos que esta vez no nos limitáramos, este me paró.

-Summer- replicó apartándose y tocando mi rostro con sus manos -No quiero lastimarte- sus palabras me confundieron y él se dio cuenta por la expresión que se había hecho presente en mi rostro.

-¿A qué se refiere con eso?- cuestione ahora más impaciente y más que nada molesta por su actitud.

Una pregunta que al parecer le resultó graciosa pues levantó las comisuras de sus labios mostrándome una sonrisa.

-Si fuera por mi te cogiera aquí mismo, de hecho si fuera por mi te hubiera cogido desde el primer día en que te vi pero puedo ver que aún eres virgen- y aunque en un principio las palabras que salían de su boca me gustaban al terminar la frase tales palabras solo me hicieron bajar la cabeza y hacer que me sintiera como una tonta niña precoz -No es algo por lo que deberías avergonzarte, sólo que no creo que deberíamos precipitarnos- continuo haciendo que uno de sus dedos levantaran mi mentón obligándome a mirarlo -primero quiero que estés totalmente segura y no lo hagas porque creas que yo lo quiero, sino porque estés segura de que tú lo quieres- acotó, pero sus palabras seguían confundiendo más.

-No entiendo a lo que te refieres- comunique y estuve agradecida que este no se molestara por mí estupidez.

-Lo que quiero decir es que por más de que esté desesperado por probarte en total plenitud me contengo pues quiero que sea especial para ti, quiero que lo disfrutes y que no solo lo recuerdes por que fue algo que dolió mucho- y justo en ese momento fue cuando finalmente llegue a entender a que se referían sus anteriores palabras -Quiero que al momento en el qué pase estés lista- acotó atrayéndome hacia él y besando mis labios y levemente mordiendo el inferior
-Pero entiendo lo que sientes- continuo acariciado mi cabello y colocándolo tras mi oreja -Sé que quema y duele que sientes que lo único que puede saciarte es hacerlo pero tenemos que ser pacientes y cuidadosos por eso deberíamos empezar a hacer algo que también es divertido- dijo mientras sus dedos se escurría por mi pantalón, quiero que cada vez que sientas que ya no puedes más lo hagas imaginado que yo soy quien lo hace- repitió y al tener su mano bajo mi ropa entendí a lo que se refería.

Yo nunca había sido del tipo de chicas que se masturbaba pues incluso pensar en eso hacía que me sintiera incómoda y tampoco lo había necesitado, no hasta ese momento.

-Quiero que mientras lo hago guardes silencio pues no queremos levantar a los vecinos- al decir esto dejó salir una risita, pues uno de esos vecinos implicaban a mis padres.

Y mientras hacía más presión yo trataba de callar mis gemidos escondiendo mi cara en su pecho pero luego estos fueron reducidos a nada cuando este finalmente optó por hacer lo que realmente estaba en su mente, a pesar de sentír que estaba tan húmeda que incluso había mojado su mano, fue un tanto doloroso cuando ingresó su primer dígito en mí, algo que me hizo pensar en que quizá la lengua de Kim era mucho más suave y corta pues sus dedos tenían una gran longitud.

-Sé qué tal vez duela un poco pero luego te va a gustar- fue cuando hizo que su dedo empezara a dar vueltas estimulado algo que yo antes ni siquiera había pensado que podría existir y a pesar de sentir dolor, quería más, necesitaba más pero Kim me conocía muy bien pues tan solo segundos después otro dedo más está dentro de mí.

Y ahora tras haberme acostumbrado a tener algo dentro de mí, el sentimiento que me poseía era delirante.

Y sin darme cuenta mi lengua se había desatado, diciendo cosas sin mí consentimiento.

-¡Por favor! ¡sigue así!- rogué apretando su camisa con mis manos, sintiendo que estaba al borde de un precipicio pero daba igual pues sentía que al caer acabaría por encontrar lo que buscaba.

-Me encanta escucharte gemir- susurró sin dejar de mover sus dedos -Te vez tan sexy así- recalco inclinado su cabeza y besado mi cuello.

Y con tales estímulos para alguien tan poco conocedora como yo, fue suficiente llegar al orgasmo, pues tras esa magnífica sensación me sentía agotada y el sueño parecía vencerme pues está segura que si cerraba mis ojos solo por unos segundos acabaría dormida en el regazo de Taehyung.

-Me encantaría que te quedaras pero no quiero que tus padres sospechen- repitió besado mi frente y jugado con mi cabello -Vamos te acompañare a casa- completo levantado mi cuerpo aún casado.

Como siempre fue muy precavido y miro que no hubiera nadie viéndonos, a pesar de que salió por su puerta trasera y tras notar que yo estaba ya con más fuerzas me dejó en el suelo justo frente a mi entrada y ahí nos despedimos, sellando nuestro adiós con un beso que nos ayudará a conservar la calma mientras no estuviéramos con el otro.









Bueno aquí les traigo otro capítulo de nuestro Amado Señor Kim.

Espero que disfruten este capítulo.

Para finalizar mis palabras de siempre.

Las quiero, como no tienen idea 💜💜
Besitos, llenos de amor 💕 💕💋💋
BYE 👋

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