Capítulo 43 (Final)

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Muchas gracias por tomarse el tiempo de seguir esta historia, por siempre estar al pendiente, gracias por sus votos y comentarios, por haberse metido en la historia y vivir cada emoción junto conmigo, esta y cada una de mis historias es por y para ustedes ❤️

Después de algunos días en el hospital el doctor decidió que Eduardo ya se encontraba bien para volver a su casa, le dio muchas indicaciones para tener una buena recuperación y me dio los medicamentos que debía tomarse.
-Doctor: Por favor recuerde que debe estar tranquilo para poder recuperarse bien (Lo miró).
-Eduardo: Si doctor (Dijo un poco harto).
-Erika: Yo me voy a encargar que todo esté en orden (Sonrió).
-Doctor: Nada de movimientos bruscos y nada de cansancio extremo (Los miró).
-Eduardo: Es todo? (Ansioso por irse).
-Doctor: Si, ya puede irse a su casa (Dijo despidiéndose).
Eduardo casi saltó de la cama y tomando la mano de Erika salió rumbo al estacionamiento para librarse del lugar.
-Eduardo: Aire fresco al fin (Sonrió).
-Erika: Eres un exagerado mi amorcito (Dijo mientras lo veía).
-Eduardo: Te amo (Se acercó lentamente a ella) gracias por estar a mi lado mi amor (Le dio un pequeño beso).
-Erika: Yo también te amo (Acarició su mejilla) gracias a ti por protegerme (Le dio un beso más largo) vámonos a casa (Le abrió la puerta del auto).
-Eduardo: Ya quiero mi cama (Le sonrió).
Erika subió al auto y condujo de vuelta a la casa donde lo esperaban sus hijas y su madre con ansias.
-Erika: Hola (Dijo entrando a la casa) ya estamos aquí.
-Las 3 juntas: Bienvenido (Gritaron).
-Eduardo: Gracias mis amores (Les sonrió feliz).
-Valeria: Preparamos tú comida y pastel favorito (Le aventó un beso).
-Valentina: Bueno yo sólo puse los globos (Sonrió).
-Zoraida: Me hace muy feliz tenerte de vuelta hijo (Feliz).
-Erika: Bienvenido a casa (Lo abrazó con cuidado).
Eduardo respondió dándole un pequeño beso y después todos caminaron hasta la mesa para disfrutar la comida.
-Eduardo: Necesito ir a la empresa (Dijo serio) llevo varios días fuera y quiero ver como está todo.
-Erika: No puedo creer que estés hablando enserio (Lo miró) tú no vas a ir a ningún lado.
-Zoraida: Erika tiene razón hijo estás loco si piensas que te vamos a dejar salir de aquí (Lo reto).
-Valeria: Nosotras fuimos ayer y todo estaba en orden (Le informó).
-Valentina: Ya tranqui pa (Le sonrió) mejor concentrate en ponerte mejor y así volverás pronto.
-Zoraida: Mis niñas a que hora es su cita? (La miró).
Ambas se quedaron mudas pues aún no le habían dicho nada ni a su padre, ni a Erika.
-Erika: Mis pequeñas tienen una cita y no me habían dicho nada? (Dijo emocionada).
-Eduardo: Como que una cita? En dónde y Con quién? (Dijo muy serio).
-Valentina: Sorry mamá (Dijo nerviosa) pero es que apenas se hizo hoy el plan.
-Valeria: Bueno papi (Dijo nerviosa) cuando estuvimos en las cabañas Val y yo conocimos a unos chicos muy lindos (Sonrió) y casualmente son hermanos.
-Valentina: Nos invitaron a una feria (Sonrió) pasan por nosotras a las 6:00 (Lo miró).
-Erika: Que lindos (Sonrió) espero que sean buenos muchachos.
-Valeria: Mario es tan divertido (Sonrió mientras lo recordaba).
-Valentina: Gustavo es tan tierno (Les contó).
-Eduardo: Mis bebés están creciendo (Suspiró).
-Zoraida: Ya no son unas pequeñas Eduardo (Sonrió).
-Eduardo: Cuídese mucho y por favor las quiero aquí temprano (Dijo sonriendoles).
-Valentina: Si señor (Asintió).
Entre platicas y algunos recuerdos terminaron de comer, Eduardo y Erika subieron a descansar, Zoraida se quedó en el jardín arreglando sus plantas mientras Valeria y Valentina se fueron de compras para su cita.
-Erika: No sabía que eras un padre celoso (Sonrió recostada a su lado).
-Eduardo: No quiero que nadie lastime a mis niñas (Admitió).
-Erika: Eres muy tierno (Acarició su mentón) esa es una de las muchas razones por las que me enamoré de ti (Le confesó mientras sonreía).
-Eduardo: Y esa (Señaló su sonrisa) es una de las miles de razones por las que yo caí rendido a tus pies.
Erika se sonrojo y volvió a sonreír, Eduardo se quedó un poco serio pues después de haber estado entre la vida y la muerte se prometió nunca callar lo sentía.
-Erika: En que piensas? (Lo miró).
-Eduardo: En lo afortunada que soy por tenerte (Suspiró) eres la mujer que mi corazón necesitaba para sentirse completo (La acarició su mejilla) cada día a tu lado a partir de hoy para mi va a ser el mejor (Sonrió) después de lo que me pasó decidí vivir mis días al máximo.
-Erika: Te amo Eduardo (Sonrió feliz) gracias a ti por poner mi vida de cabeza (Acarició sus labios) por llenarme el corazón de alegría y mi mundo de amor (Susurró sobre sus labios).
Eduardo rompió el espacio que quedaba entre ellos y la beso como estuvo queriendo hacerlo desde hace algunos días cuando estaba en el hospital, puso su mano en su muslo y bajó sus besos hasta su cuello, Erika soltó un pequeño suspiró al sentir sus caricias por su vientre, Eduardo se puso sobre ella y Erika se apartó de inmediato pues aún estaba débil y no podía hacer fuerzas.
-Erika: Amor recuerda lo que dijo el doctor (Se separó de él) no hagas esfuerzo.
-Eduardo: Me muero por hacerte mia (Se quejó) ha sido mucho tiempo sin ti (Se sento en la cama).
-Erika: Amor te puedes hacer daño (Lo miró seria).
-Eduardo: Conozco una forma (Dijo sonriendo) y te prometo que no me voy a hacer daño (Dijo acercándose a sus labios).
Eduardo volvió a besarla y Erika le sonrió cómplice, Eduardo se acomodó bien recargado en la cabecera y cuidadosamente atrajo a Erika hacia él y ella se acomoda con sus piernas a sus costados, él llevó sus manos hasta su cintura y la acaricio por debajo de la blusa, Erika acaricio su rostro mientras besaba sus labios, bajaba por su mejilla, seguía por su mandíbula y terminaba en su cuello, lentamente le quito la camisa a Eduardo y acaricio su pecho cuidando no tocar la herida, después se deshizo de su blusa y Eduardo atacó su cuello a besos rápidamente, Erika lo tomó del pelo y volvió a unir sus labios en un beso intenso y salvaje, sus lenguas se enredaron bruscamente, los jadeos por parte de ambos ya eran audibles en esa cálida habitación, Erika bajó sus pantalones deportivos dejándolo solo en ropa interior, Eduardo la ayudó a quitarse los jeans y acaricio sus piernas tiernamente, sus grandes manos viajaron hasta el broche de su brassier y la despojó de él, la miró con deseo y bajó dando pequeños besos desde su cuello, hasta sus hombros y deteniéndose en sus senos, Eduardo los besos y lamio suavemente, bajo sus manos hasta su trasero y lo apretó posesivo, fuertes gemidos de placer salían de los labios de Erika disfrutando las caricias de Eduardo, solo la delgada tela de su ropa interior los separaba del paraíso, Erika metió su mano en su bóxer y pudo sentir la urgencia de Eduardo reclamandola, lo acaricio y un fuerte gruñido se escapó de los labios de Eduardo, echó la cabeza hacia atrás disfrutando las caricias de Erika, beso y lamio su cuello, siguió acariciandolo mientras disfrutaba sus gestos de placer, Eduardo la miró fascinado.
-Eduardo: Eres la única dueña de mis fantasías (Acarició su espalda).
-Erika: Y tú de las mías mi amor (Sonrió sobre sus labios).
Volvió a besarla apasionadamente, Eika bajó su bóxer liberando su ereccion y Eduardo sin poder enviarlo le arranco su ropa interior, se besaron sintiendo sus intimidades rozar, Eduardo no resistió más y tomó su muslos, Erika lo siguió y mientras lo miraba a los ojos alzó un poco sus caderas para que pudiera entrar en ella.
-Erika: Eduardo (Gimió sobre sus labios).
-Eduardo: Erika (Gruñó al sentir su unión hasta lo más profundo).
Se quedaron inmóviles mientras sus labios se disfrutaban salvajemente, con ayuda de Eduardo comenzó a moverse lentamente, gemidos y jadeos inundaban la habitación mientras sus cuerpos se entregaban y sus almas se volvían una sola, mientras Eduardo la penetraba Erika rasguñaba su espalda y le mordía los labios intentando que sus gemidos no fueran tan audibles, cosa que era inútil por cierto, movió sus caderas contra él más rápido buscando llegar al extasis juntos, Eduardo tomó su trasero 1, 5, 8, 14 embestias más y ambos se dejaron llevar por un orgasmo arrasador, Erika se recargo en su hombro sintiendo como sus cuerpos se tensaban, Eduardo se aferró a su cuerpo abrazandola.
-Eduardo: Te amo (Dijo viéndola a los ojos) eres tan hermosa (Acarició su cabello).
-Erika: Y yo a ti (Sonrió con las mejillas sonrojadas) no creo verme hermosa sudada y despeinada (Dijo mientras se levantaba de encima de él).
Erika se acomodo de su lado de la cama y Eduardo le hizo compañía acostandose también, se abrazaron, él la observó por unos segundos y la beso con ternura nuevamente, sus labios se movían lentamente y sus lenguas bailaban en una suave sintonia, después de casi perderlo Erika no quiso apartar sus labios de los suyos por un largo rato, pasaron varias semanas en las que Valeria y Valentina habían estado saliendo con los chicos de las cabañas, Eduardo se estuvo recuperando en cama, aunque no perdió el tiempo para conocer a los chicos que pretendían a sus hijas, toda su recuperación fue un gran reto pues tenía que seguir al pie de la letra todos los cuidados y el era un poco rebelde en eso pues él quería volver ya a la empresa, después de varios regaños por parte de todas se resigno a estar en casa y su recuperación fue muy buena, ya le habían quitado los puntos y sólo tenía que hacer una última visita al hospital para que le revisaran la herida.
-Erika: Todo en orden doctor? (Preguntó mientras veía lo que hacía).
-Doctor: Si, la herida cicatrizo muy bien (Dijo limpiando la zona) quedó una pequeña marca pero nada más (Le sonrió).
-Eduardo: Ya puedo continuar mi vida normalmente? (Dijo ansioso).
-Doctor: Si señor (Dijo terminando) ya puede volver a su rutina.
El doctor los despidió y cuando estaban por salir Erika se sintió un poco mal haciendo que Eduardo se preocupara.
-Erika: Amor (Dijo deteniéndose) espera (Tomando su brazo con fuerza).
-Eduardo: Estás bien? (Viéndola pálida).
-Erika: No (Dijo sintiendo que todo le daba vueltas).
-Eduardo: Que tienes amor? (Tomándola de la cintura).
-Erika: Eduardo siento que... (Intentó decir antes de que cayera desmayada en tus brazos).
-Eduardo: Un médico por favor (Dijo cargandola) mi amor despierta (Le dijo asustado).
Trajeron una camilla y llevaron a Erika a una habitación, el doctor que atendía a Eduardo corrió a ayudarlos.
-Doctor: Que pasa? (Dijo entrando a la habitación).
-Eduardo: No sé doctor (Dijo serio) salimos de la consulta y segundos después se desmayo.
-Doctor: Debe ser el estrés y el cansancio de las últimas semanas (Dijo serio).
El doctor le tomó la presión a Erika y todo estaba bien, la revisó cuidadosamente y no encontró nada fuera de lo normal, tomó un poco de alcohol y se lo puso en la nariz unos segundos hasta que despertó.
-Erika: Que me pasó? (Dijo abriendo poco a poco los ojos).
-Eduardo: Te desmayaste amor (Tomó su mano).
-Doctor: Voy a mandarle a hacer unos estudios para descartar anemia (Dijo mientras llamaba a una enfermera).
La enfermera llegó enseguida y el doctor le dio algunas indicaciones.
-Eduardo: Vas a estar bien mi vida (Le dio un pequeño beso).
-Erika: Me siento débil Eduardo (Dijo mientras suspiraba).
-Enfermera: Señora necesito que esté tranquila (La miró) voy a sacarle sangre para las pruebas (Tomó su brazo) le prometo que será rápido.
Erika suspiró pues las agujas no le gustaban para nada, Eduardo la distrajo diciéndole cosas tontas para hacerla reír.
-Enfermera: Listo (Puso un algodón en su brazo) tiene un esposo muy lindo (Les sonrió).
-Erika: Soy muy afortunada (Sonrió).
La enfermera se fue y ambos se quedaron esperando los resultados, Eduardo le consiguió a Erika un jugo de naranja para que recuperara fuerzas.
-Doctor: Ya tengo los resultados (Dijo entrando con un sobre después de 20 minutos de espera).
-Eduardo: Todo está bien? (Preocupado).
-Erika: Es algo malo (Lo miró).
-Doctor: Bueno depende como lo tomen (Dijo serio).
-Eduardo: Como? (Confundido).
-Doctor: Señores van a ser papás (Los miró con una sonrisa) tiene sólo semanas de gestación (Dijo mirando a Erika).
Eduardo se quedó en shock y Erika comenzó a llorar sintiendo muchas emociones a la vez.
-Erika: Un bebé (Acarició su vientre muy emocionada) doctor pero pensé que quedar embarazada era imposible a estas alturas (La miró)
-Doctor: No lo es (Sonrió) es muy poco probable que suceda a tu edad pero si existen casos.
-Eduardo: Un hijo (Dijo con una gran sonrisa) vamos a tener un bebé (La miró con los ojos llorosos).
Eduardo puso su mano encima de la de Erika y acarició su vientre, le dio un pequeño beso pues los dos estaban completamente felices al saber que tendrían otro hijo.
-Doctor: No soy ginecólogo pero puedo hacer un ultrasonido simple para ver como va todo (Los miró).
-Eduardo: Si doctor (Dijo emocionado) muero por ver a nuestro bebé (Sonrió).
-Erika: Estoy muy nerviosa (Dijo con lágrimas en los ojos).
El doctor le pidió a la enfermera que trajera el equipo y minutos después estaba pasando el aparto por el vientre de Erika.
-Doctor: Todo va bien (Dijo viendo el monitor) tiene exactamente 7 semanas de embarazo (Le sonrió).
-Eduardo: Es hermoso (Dijo soltando algunas lágrimas).
-Erika: Es muy pequeñito (Dijo sonriendo entre lágrimas).
El doctor movió más el aparto y se encontró con el primero corazón de uno de los bebés, porque para su sorpresa eran dos.
-Doctor: Ese es el corazón de uno de sus bebés (Dijo subiendo el volumen del aparato).
-Eduardo: Como que de uno de los bebés? (Dijo confundido).
-Doctor: Por lo que veo son dos (Dijo viendo el monitor).
-Erika: Por dios (Dijo llorando muy feliz) dos angelitos (Sonrió)
-Eduardo: Voy a ser papá (Gritó emocionado) y por partida doble (Dijo haciendo un bailecito raro).
-Erika: Te amo loco (Dijo riendo al verlo feliz).
-Eduardo: Te amo Eri (Besó su cabeza).
-Erika: Gracias dios (Pensó muy feliz).
-Doctor: Va a tener que cuidarse mucho (Dijo limpiando el gel de su vientre) por ahora todo está bien.
Después Eduardo la ayudó a levantarse con cuidado, se sentaron para escuchar atentamente al doctor que le dio algunas indicaciones sobre su alimentación y vitaminas.
-Doctor: Voy a agendarles una cita con una muy buena ginecóloga (Le sonrió) muchas felicidades y por favor cuídense (Dijo dejándolos solos).
-Erika: Mi amor la gitana tenía razón (Dijo con una gran sonrisa mientras acariciaba su mejilla).
-Eduardo: En estos momentos soy el hombre más feliz del mundo (Dijo emocionado) estos pequeñito son la sorpresa que nos tenía la vida (Besó su pequeño vientre).
-Erika: Como sabes que serán niños? (Se rió).
-Eduardo: Recuerda que siempre adivino (Le sonrió) te amo amor de mi vida (Se acercó a sus labios).
-Erika: Yo también te amo mi príncipe (Dijo antes de rodearle el cuello con los brazos) con toda mi alma (Dándole un beso con mucho amor).
El doctor regresó con la información de la ginecóloga y después de agradecerle se fueron rumbo a una plaza para comprar una sorpresa para su madre e hijas, al llegar se encontraron con la sorpresa de que todos estaban ahí.
-Eduardo: Hola familia (Dijo caminando hasta el jardín).
-Valeria: Hola (Dijo sentada al lado de Mario).
-Mario: Buenas tardes señor (Dijo nervioso).
-Valentina: Como te fue? (Dijo tomada de la mano de Gustavo).
-Gustavo: Que tal señor (Saludó amable).
-Eduardo: El doctor dijo que la recuperación fue buena (Dijo con una gran sonrisa).
-Erika: Sólo le quedó una pequeña cicatriz (Viéndolo mientras sonreía).
-Zoraida: Por que están tan sonrientes? (Los miró) y que es eso? (Señaló la caja que Eduardo había dejado segundos antes en el suelo).
-Eduardo: Les tenemos una sorpresa (Dijo nervioso).
-Erika: Acabamos de descubrir algo que aunque no lo teníamos planeado nos llena de mucha felicidad (Dijo con lágrimas en los ojos).
-Valentina: Que es? (Caminó hasta ellos).
-Valeria: Me pusieron nerviosa (Sonrió mientras se ponía al lado de su hermana y su abuela).
-Eduardo: Abran la caja y sabrán (La puso frente ellas).
Las 3 se miraron y después de contar hasta 3 abrieron la caja que tenía varios globos de helio y uno en especial decía bebé en camino.
-Valeria: No (Dijo emocionada) de verdad? (Sonrió feliz).
-Erika: Si (Sonrió).
-Valentina: Un hermanito (Gritó feliz) que alegría (Dijo con una gran sonrisa).
-Zoraida: Es una maravilla (Dijo con lágrimas en los ojos) un bebé llenando de luz esta casa (Sonrió).
-Mario: Un cuñadito (Sonrió).
-Gustavo: Felicidades (Los miró).
-Eduardo: Bueno en realidad son dos (Dijo sonriendo ampliamente)
-Valentina: Que? (Dijo con la boca abierta).
-Erika: Si (Asintió) estamos esperando bebé por partida doble (Sonrió).
-Zoraida: Ahora veo que han trabajado mucho (Los molestó).
-Eduardo: Mamáaa (La regaño incómodo).
-Valeria: Estoy tan feliz de verlos tan contentos (Los abrazó).
Se sentaron a platicar con ellos sobre el embarazo y a debatir nombres, Eduardo quería que uno de sus hijos porque el estaba seguro que serían niñon llevara su nombre, sus hijas lo molestaron pero les pareció lindo, un rato después lili les llevó agua fresca y algunas botanas, pasaron la tarde en el jardín mientras sus hijas y sus ahora novios disfrutaban del calor en la piscina.
-Zoraida: La alegría ha vuelto a esta casa (Dijo feliz).
-Eduardo: A partir de hoy todo será felicidad madre (Sonrió).
-Lili: Señora (Dijo mientras se acercaba mirando a Erika).
Lili los interrumpió haciéndoles saber que Bruno estaba ahí.
-Bruno: Buenas tardes (Saludo).
-Erika: Hola (Se levantó para darle un beso en la mejilla).
-Eduardo: Que tal?.
-Zoraida: Buenas tardes (Sonrió amable).
-Bruno: Como sigues? (Le preguntó a Eduardo).
-Eduardo: Ya estoy bien (Le respondió) gracias por el apoyo que le diste a mi familia en los momentos difíciles (Dijo sincero).
-Bruno: Lo hice con mucho gusto (Dijo de corazón).
-Zoraida: Siéntate (Lo invitó) estás en tú casa.
-Bruno: Gracias (Sonrió).
-Erika: Que te trae por aquí? (Lo miró).
-Bruno: Vengo a despedirme (Serio) mañana a primera hora salgo para los Ángeles (Le contó).
-Erika: Tan pronto? (Un poco triste).
-Bruno: Si, pero no te preocupes que voy a venir a visitarlos cuando tengo tiempo libre (Le sonrió).
-Eduardo: También nosotros podemos ir a visitarlo amor (Tomó su mano).
-Erika: Te deseo lo mejor Bruno (Lo miró) gracias por ser un gran amigo y por haberme brindado tu apoyo todos estos años (Dijo con los ojos llorosos).
-Bruno: Sabes que eres muy especial para mi Eri (Le sonrió) fue un placer ayudarte a recuperar a tu familia, gracias por tú compañía todo este tiempo.
Erika le sonrió y se lanzó a abrazarlo, sabía que algún día lo volvería a ver pero se le hacía difícil estar lejos de él después de todo el tiempo que habían pasado juntos por años.
-Bruno: Que sentimental andas (Bromeó).
-Eduardo: Hay una razón (Miró a Erika) cuéntale amor.
-Erika: Claro (Dijo emocionada).
-Bruno: Que pasa? (Curioso).
-Erika: Voy a ser mamá de nuevo (Sonrió), vamos a tener dos hijo (Dijo tomando la mano de Eduardo).
-Bruno: Dos? (Sorprendido)
-Eduardo: Si (Sonrió) dos.
-Eduardo: Que gran sorpresa (Les sonrió) es una gran bendición y más porque vienen de un amor tan puro (Los miró).
-Eduardo: Desde ya te queremos como el padrino (Le sonrió).
-Bruno: Con gusto (Dijo feliz).
-Zoraida: Te quedas a comer con nosotros? (Lo miró).
-Erika: No te puedes negar (Lo amenazó).
-Bruno: Pues si (Aceptó).
Después de la comida familiar las chicas como casi siempre se fueron al cine con sus novios, Bruno se despidió y se fue prometiendo visitarlos pronto, Zoraida decidió irse a un spa pues necesitaba un buen masaje y un facial, Erika y Eduardo se estaban arreglando para ir a una cena romántica que había planeado Eduardo para festejar.
-Erika: Ya estoy lista (Dijo luciendo un bonito vestido color nude con brillos dorados).
-Eduardo: Estás preciosa mi amor (Dijo con una gram sonrisa luciendo un elegante traje negro).
-Erika: Tú te ves muy guapo (Le cerró un ojo).
-Eduardo: Te prometo arrancarte ese lindo vestido cuando regresemos (La tomó de la cintura).
-Erika: Suena muy interesante (Le dio un pequeño beso).
-Eduardo: Vamonos mi reina (Tomó su mano).
Eduardo condujo hasta un bonito restaurante que había reservado sólo para ellos, el lugar estaba lleno de velas, rosas rojas y blancas por todos lados, al llegar los atendió un mesero muy amable que los guió a su mesa.
-Erika: Está hermoso todo mi amor (Dijo emocionada) cada día me sorprendes más (Dijo con lágrimas en los ojos).
-Eduardo: Te mereces lo mejor mi amor (Beso su mejilla).
-Erika: Eres el hombre perfecto (Sonrió muy feliz).
-Eduardo: Tú eres la mujer perfecta (Acarició su cabello).
El mesero les sirvió la cena y en compañía de música instrumental disfrutaron de una velada romántica.
-Eduardo: Eri lo estuve pensando y creo que quiero dejar un poco el trabajo (La miró).
-Erika: Por? (Seria).
-Eduardo: Quiero disfrutar tú embarazo al máximo (La miró) no quiero perderme ni un momento del crecimiento de nuestros hijos (Sonrió).
-Erika: Me hace muy feliz escuchar eso (Sonrió) estos pequeños van a crecer rodeados de amor (Acarició su vientre).
-Eduardo: Ya los quiero conocer (Dijo emocionado mientras acariciaba su vientre) no puedo creer que sean dos (Dijo babeando mientras la veía) espero que saquen tus ojos.
-Erika: Y yo quiero que saquen esos chinos que te hacen ser tan guapo (Sonrió mientras acariciaba sus chinos).
-Eduardo: Soy inmensamente feliz (Dijo tomando su mano).
-Erika: Después de todo lo que sufrimos y las lágrimas que derramamos nos lo merecemos (Lo miró).
-Eduardo: Te voy a recompensar cada lágrimas que derramaste por mi culpa (Le dio un beso).
-Erika: Créeme que ya lo hiciste (Le dio muchos piquitos).
Terminaron de cenar y Eduardo pidió al mesero que pusieron *Así como si nada - Samo* pues era una canción que les traía bonitos recuerdos de su historia.
-Eduardo: Así como si nada me arrancaste la razón (Le cantó mientras la miraba a los ojos y se movía al ritmo de la música).
-Erika: Así como si nada me curaste las heridas (Siguió ella).
-Eduardo: Así como si nada me robaste el corazón (Dijo uniendo sus frentes).
Siguieron bailando entre besos miradas y palabras de amor hasta que su canción terminó, permanecieron abrazos mientras veían por el gran ventanal la luna y las estrellas.
-Eduardo: Contigo lo tengo todo (Sonrió) me vuelves completamente loco Erika (La miró) jamás he sentido ni podría sentir nada igual por nadie, si existen otras vidas quiero encontrarte (La beso).
-Erika: Tú mi amor (Acarició sus labios) eres el único hombre que me ha hecho sentir mariposas en el estómago, eres el único que acelera los latidos de mi corazón, mi amor por ti crece cada día más (Sonrió) desde que te conocí supe que quería estar hasta el fin de mi vida a tu lado.
-Eduardo: Te prometo que así será (Rozó su nariz con la suya) nuestros caminos irán en una sola dirección por siempre (Le sonrió).
-Erika: Te amo esposo (Acarició su espalda) de tu mano a dónde sea.
-Eduardo: Te amo esposa (La besó tiernamente) hasta el infinito.
Erika y Eduardo estaban más que preparados para el inicio de una vida llena de amor, paz y alegría, después de haber pasado por tanto la vida les regaló la felicidad que merecían, esperaban dos bebés que eran el significado más real de su amor, tenían el apoyo y compañía de Zoraida que a pesar de todo había logrado dejar el rencor a un lado y se había unido a la familia, también tenían dos maravillosas hijas que estaban por comenzar nuevas etapas, muchas personas dicen que nada es perfecto, en este caso si, el tiempo de dios es perfecto y todo lo que ellos vivieron los llevó a donde están ahora, absolutamente cada parte de su historia tenía que ser así pues ya estaba escrita con tinta roja, significado del amor, la pasión y el dolor, los dos estaban destinados a estar juntos, no importaron los años, ni los obstáculos, ni las intrigas, como en toda historia de amor el bien siempre triunfa, un amor que a pesar de los años siempre se mantuvo con vida y dos almas que volvieron a unirse gracias a una Dulce venganza.

FIN

Dulce venganzaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora