Capítulo 32

1K 80 9
                                    

Al día siguiente por la mañana Eduardo pasó por Erika para ir al aeropuerto, ella estaba decidida a decirle que lo amaba y el estaba decidido a alejarse de ella.
-Erika: Buenos días (Le sonrió).
-Eduardo: Buenos días (Sin ánimo).
-Erika: Todo bien? (Viéndolo raro).
-Eduardo: Si (La miró) sube (Le abrió la puerta).
Puso el auto en marcha y en los minutos de camino ambos permanecieron en un extraño silencio.
-Eduardo: Te ayudo con eso (Dijo serio mientras tomaba la maleta).
-Erika: Gracias (Desconcertada).
-Eduardo: Vamos (Camino adentrándose al aeropuerto).
Llegaron a la sala y después de poner todo en orden se sentaron a esperar su vuelo, Erika decidió ignorar el comportamiento de Eduardo pues no entendía que le pasaba y tampoco se quería entrometer.
-Eduardo: El vuelo sale en media hora (La miró).
-Erika: Ajá (Dijo seria).
Cada quién se puso a hacer sus cosas hasta que Eduardo recibió una llamada y lo sacó de su mundo.
-Eduardo: Hola (Sin saber quién era).
-Nora: Edu como estás? (Sonriendo por teléfono).
-Eduardo: Nora que gusto escucharte (Sonrió también).
-Nora: Llevo esperando tú llamada desde hace una semana (Lo regañó).
-Erika: Estúpido (Pensó al escucharlo)
-Eduardo: Sé que te debo una comida pero ahora estoy de viaje (Le contó).
-Nora: Bueno cuando regreses quedamos (Dijo sonriente).
-Eduardo: Bien yo te llamo (Sonrió) cuidate.
-Nora: Nos vemos pronto Edu (Colgó).
-Erika: Nora? (Preguntó sin poder contenerse).
-Eduardo: Si me la encontré hace poco (Le contó) que casualidad no?.
-Erika: Si mucha (Molesta), Bruno tenía razón (Pensó seria).
Siguieron esperando en silencio hasta que llegó la hora del vuelo, estaban en el avión a pocos minutos de despegar y Erika estaba nerviosa pues le tenía miedo a los aviones.
-Erika: Carajo (Susurró mientras respiraba rápidamente).
-Eduardo: Estás bien? (La miró nerviosa).
-Erika: No (Dijo con un nudo en el estómago) me dan miedo los aviones desde lo que pasó.
-Eduardo: Todo está bien (Tomo su mano) tranquila Eri.
-Erika: Eso no funciona (Dijo muy asustada).
-Eduardo: Respira (Dijo mientras respiraba con ella).
-Erika: Aún no sé por que me subo a estas cosas (Dijo seria).
-Eduardo: Mírame (Tomó su rostro) sólo concéntrate en mis ojos.
El avión se puso en marcha y Erika se perdió en los ojos de Eduardo, permanecieron así un rato mientras platicaban.
-Eduardo: Val siempre fue idéntica a ti (Le sonrió) aunque de carácter es como yo.
-Erika: Me he podido dar cuenta (Se rió) hiciste un gran trabajo con nuestra hija (Dijo melancólica).
-Eduardo: Siempre estuviste presente en cada momento (La ánimo) siempre me planteé que pensarías que sería lo mejor para ella.
-Erika: Gracias (Dijo feliz) de verdad (Siguió mirándolo).
-Eduardo: De nada (Acarició du mejilla).
Se quedaron en silencio mientras sus miradas seguían conectados, poco a poco Erika cerró los ojos cayendo en un profundo sueño, algunas horas después llegaron a la Riviera maya.
-Eduardo: Eri ya llegamos (Acarició su mejilla).
-Erika: Hola (Sonrió aún con los ojos cerrados).
-Eduardo: Ya tenemos que bajar (Serio).
-Erika: Vamos (Se levantó).
Salieron del avión y después de recoger sus maletas buscaron el auto que habían rentado para irse al hotel.
-Erika: Que bonito (Sonrió mientras veía el camino) había olvidado lo azul que se ve todo aquí.
-Eduardo: Es relajante (Sonrió levemente).
-Erika: Eduardo estás bien? (Lo miró) te notó raro.
-Eduardo: Lo que pasa es que me tienes la cabeza toda revuelta (Pensó), si estoy bien (Dijo sin importancia).
-Erika: Bueno (Dijo no muy convencida).
-Eduardo: Y que me cuentas? (La miró) Como te sientes?.
-Erika: Bien (Sonrió) todo normal.
-Eduardo: Me alegra que tengas la tranquilidad que querías (Dijo un poco triste).
-Erika: Si, me siento muy bien y dime lalo ya pensaste lo de tú mamá (Lo miró).
-Eduardo: Como puedes compadecerla después de todo (Negó mientras la veía).
-Erika: Es tú mamá por más errores que haya cometido (Suspiró).
-Eduardo: Eres muy buena (Aseguró).
Algunos minutos después llegaron al hotel y Eduardo corrió del otro lado para abrirle la puerta.
-Botones: Bienvenidos (Dijo amable).
-Eduardo: Gracias (Sonrió).
-Erika: Desde ya amo este lugar (Dijo emocionada).
-Eduardo: Vamos (Dijo mientras entraban al hotel).
Llegaron a la recepción y la chica que los atendió estaba siendo muy amable con Eduardo.
-Recepcionista: Aquí está la llave de su habitación (Le sonrió).
-Erika: Sólo es una? (Confundida).
-Recepcionista: Si reservaron la Suprem (Los miró).
-Eduardo: Sabía que Valentina saldría con una sorpresa (Negó mientras sonreía).
-Recepcionista: Quieren otra? (Sonrió descaradamente).
-Erika: No (Dijo molesta) la habitación es perfecta gracias (Tomó la tarjeta).
-Recepcionista: Cualquier cosa que necesite ya sabe donde estoy (Le cerró un ojo).
-Erika: Vámonos (Lo tomó del brazo y lo jaló hasta el elevador).
-Eduardo: Todo bien? (Viéndola raro).
-Erika: Si (Lo soltó molesta).
-Eduardo: Estás molesta (Se rió).
-Erika: No viste como se te insinuaba (Lo miró seria).
-Eduardo: Si pero no le tomé importancia (Alzó los hombros) aunque era bastante agradable (Sonrió).
-Erika: Pues regresate con ella si quieres (Rodo los ojos mientras entraba al elevador).
-Eduardo: Estás celosa? (Confundido).
-Erika: No (Mintió), sólo que no es nada agradable ver como coquetean enfrente de mi (Lo miró) después de todo aún estamos casados.
-Eduardo: Eres un idiota (Pensó por ilusionarse), la próxima vez espero que me encuentren sólo (Bromeó).
-Erika: Estúpido (Pensó), no tienes tanta suerte (Se rió burlona).
Subieron la habitación en silencio, Eduardo estaba confundido con su actitud y Erika molesta por la situación.
-Eduardo: Esta habitación es enorme (Sonrió al ver todo).
-Erika: Desde aquí se ve todo más bonito (Sonrió mientras veía el paisaje por un gran ventanal).
-Eduardo: En la noche debe ser mágico (Le cerró un ojo).
-Erika: Que planes tenemos? (Lo miró).
-Eduardo: Cena a las 9:00 (Serio) hablé con los Abacci y ya están aquí.
-Erika: Bueno entonces tengo tiempo para relajarme un rato (Dijo entrando al baño para cambiarse).
Erika se quitó la ropa y buscó algo más cómodo que ponerse, estaba tan tranquila eligiendo hasta que escuchó a Eduardo.
-Eduardo: Yo voy a estar en la recepción (Dijo tomando la tarjeta) o tal vez en el bar.
-Erika: Que? (Pensó mientras volvía a la habitación), Eduardo (Lo llamó antes de que se fuera).
-Eduardo: Si? (Volteó a verla).
-Erika: Por que no vienes a dar una vuelta conmigo? (Dijo nerviosa).
-Eduardo: Creo que es momento de tomarme en serio eso de "amigos" (Se dijo) bueno si no te estorbo (Bromeó).
-Erika: Nunca me estorbarias (Sonrió), esta noche tengo que hablar con él (Pensó seriamente).
-Eduardo: Te irás en ropa interior? (Le sonrió al darse cuenta de que ella no lo había notado).
-Erika: Yo no..o (Dijo nerviosa) me había dado cue..enta.
-Eduardo: Anda a cambiarte (Le sonrió mientras se alejaba).
-Erika: Que tonta (Pensó mientras corría al baño).
Erika se puso un vestido suelto más cómodo y salió para encontrarse con Eduardo.
-Eduardo: Te parece si vamos a comer y tomar algo? (La miró sonriendo).
-Erika: Si la verdad muero de hambre (Sonrió).
Decidieron comer en un lindo restaurante con vista al mar que  conocían y les recordaba mucho el par de veces que habían estado ahí.
-Eduardo: Recuerdo que las veces que veníamos te gustaba sentarte en la playa a esperar el atardecer (Sonrió mientras comían).
-Erika: Y tú te quejabas porque siempre te bronceabas demás (Se rió).
-Eduardo: Todo valía la pena con tal de ver tu cara de felicidad (La miró).
-Erika: Nos faltó tanto por hacer (Se quedó mirándolo).
-Eduardo: Fueron buenos años (Dijo con nostalgia).
-Erika: Recuerdo la última vez que estuvimos aquí (Se sonrojo) Vale tenía 6 meses y tú ya querías encargar otro bebé (Se rió).
-Eduardo: Yo estaba seguro que sería niño (La miró).
-Erika: Y estoy segura que hubieras adivinado al igual que lo hiciste con Valentina (Dijo con tristeza).
-Eduardo: También acerté con Valeria (Dijo orgulloso).
-Erika: Resultaste ser vidente (Lo molestó) y de los buenos (Se rió).
-Eduardo: Oye déjame soñar (Se rió).
-Erika: Y que ves en mi futuro? (Curiosa).
-Eduardo: Prefiero que lo descubras por ti misma (Le cerró un ojo).
-Erika: Estás loco (Sonrió).
-Eduardo: Por ti (Pensó).
Después de comer estuvieron paseando un rato y se divirtieron como en los viejos tiempos, se detuvieron a ver el atardecer y cuando se hizo más tarde volvieron a la habitación para descansar antes de irse a la cena.

Dulce venganzaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora