MI ÚNICO AMOR

Simplemente desapareció

(AV)

Desde hace ya poco más de una semana, aún no sé cómo, Sylvie se enteró que trabajo en esta cafetería. Desde ese día ha venido de forma diaria, y siempre se sienta en alguna de las mesas del sector donde me corresponde atender a mí.

He tratado de ser educada, no tanto por ella sino porque no quiero tener problemas en el trabajo. Sin embargo, es algo complicado atender su mesa ya que siempre aprovecha la entrega de los pedidos para rozar mi mano o lanzar comentarios de doble sentido.

Preferí no comentarle nada a Piper sobre las constantes visitas de Sylvie para no preocuparla. Ya antes habíamos tenido problemas por su culpa y no quería que se repitan.

El día de hoy también se apareció, y tratando de evitarla le pedí a uno de mis compañeros que atienda su mesa y a cambio yo atendería una de las de él y le daría las propina que dejen.

Para mi mala suerte Sylvie no se quedó tranquila con eso. Al terminar se acercó hacia donde yo estaba, cerca de la caja, y me reclamó por no haberla atendido.

- Lo que hiciste fue de muy mala educación - dijo parándose frente a mí.

- No quiero tener problemas contigo Sylvie, no sé qué hacer para que entiendas que no quiero nada contigo. Tengo novia y estoy perdidamente enamorada de ella.

- ¿Pero quién te ha pedido que dejes a tu novia? - preguntó con una sonrisa en su rostro, dando un paso al frente.

- Ya basta Sylvie por favor, te pediría que no vuelvas pero no puedo prohibirte el ingreso, así que simplemente será lo mismo que hoy, si vienes te atenderá uno de mis compañeros. Jamás engañaría a Piper contigo.

La vi desviar la mirada hacia afuera, y cuando iba a voltear para ver qué estaba viendo, me sorprendió cerrando la distancia que había entre nosotras, jalándome del cuello con el brazo izquierdo y de la cintura con el derecho, y pegando sus labios a los míos. Todo pasó tan rápido que no me dio tiempo de reaccionar, y me jaló con tanta fuerza que no pude apartarla.

Cuando me soltó le iba a reclamar por lo que acababa de hacer, pero la vi volver a dirigir su mirada hacia afuera, y esta vez si pude voltear. Lo que vi me paralizó por completo, Piper estaba parada afuera, y por lo visto había presenciado todo.

Mi mirada se cruzó con la suya por menos de un segundo, mientras algo caía de sus manos, y luego comenzó a correr. Intenté salir corriendo atrás de ella, pero Sylvie me tomó por el brazo.

- No te va a escuchar, por las puras la persigues - dijo burlona, y esta vez sí perdí el control de mis actos.

- En tu puta vida vuelvas a ponerme un solo dedo encima - le grité mientras la levantaba del cuello de su blusa - No te quiero volver a ver ni la sombra, porque te juro que si te me cruzas en el camino no respondo de lo que pueda hacerte - terminé de decirle y la lancé al suelo como si se tratara de una bolsa de basura.

Salí de la cafetería y mis ojos fueron a parar en aquel hermoso peluche que yacía en el suelo junto con una tarjeta. Al levantarlos las lágrimas comenzaron a escaparse sin control, Piper tenía que escucharme, yo no podía perderla, no lo soportaría.

Comencé a correr inútilmente en la dirección por donde la vi irse, pero no estába por ninguna parte. La llamé y le escribí incontables veces, pero no me respondió. Como acto desesperado decidí ir a buscarla en su casa, con la esperanza de que haya ido para allá.

- Alex, ¿qué te pasa? - preguntó la mamá de Piper al abrir la puerta.

- Señora, ¿está Piper en casa? - pregunté con la voz temblorosa.

- ¿No está contigo? Pero si fue a buscarte a tu trabajo - respondió con notable preocupación. Justo en ese momento su teléfono sonó - Es un mensaje de Piper, dice que se quedará a dormir en casa de Nicky hoy, ¿qué es lo que ha pasado?

- Piper vio como Sylvie me besó a la fuerza, aunque desde donde se encontraba ella no se debe haber notado que fue forzado - confesé mientras las lágrimas volvían a aparecer - le juro que yo jamás engañaría a Piper señora, no quiero perderla.

- Será mejor que dejes que se calme, ya mañana conversarán - dijo mientras se acercaba a mí, y no pude evitar abrazarme a ella con todas mis fuerzas - Si te ayuda en algo quiero que sepas que yo te creo, y seguro cuando le expliques a Piper cómo ocurrió todo también te creerá.

- Eso espero - dije separándome de ella y limpiándome las lágrimas del rostro.

Luego de unos minutos decidí ir a mi casa, me tiré en mi cama y seguí llorando. Tenía tanto miedo, fui una imbécil, es cierto que el beso no fue mutuo, pero si hubiera hecho caso y hubiera mandado a la mierda a Sylvie hace tiempo nada de esto hubiera pasado. Tenía un muy mal presentimiento, sentía un inmenso hueco en mi pecho, y ahí, frustrada y desconsolada, me quedé dormida.

Esa noche desperté en más de una oportunidad con pesadillas, no podía estar tranquila mientras no hablara con Piper.

A la mañana siguiente, al ver que Piper seguía sin contestar, decidí llamar a Nicky. Sin embargo, ella me dijo que Piper no había dormido en su casa la noche anterior. Salí disparada de mi cama y corrí hacia su casa, toqué la puerta desesperadamente, pero nadie me abrió.

Ella simplemente desapareció, no volví a verla ni a ella ni a su mamá, estuve día tras día yendo a tocar su puerta, esperando que ocurriera un milagro y su puerta se abriera para volver a ver sus hermosos ojos azules, pero lo único que pasó... fueron los años.

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-Vonny-