Euphoria |KV|

9. Egoístas e Infantiles

Pasaron dos semanas, de alguna manera Taehyung se las arreglaba para que Jungkook no descubriera que el era V, dejaba notas un poco mas poéticas en el casillero del azabache, después de el primer beso Taehyung dejo de considerar aquello como un reto, le encantaba la adrenalina de poder ser descubierto, era su nueva adicción y para esta sin duda alguna no había ningún tipo de cura y aun si la hubiera no tenía intención alguna de curarse, tenía miedo, claro que lo tenía Jungkook no paraba de hablar de V, se sentía nervioso cada vez que lo hacía, tenía miedo decir algo que lo delatase pero se contenía, ahora ya no estaba tan confundido, había dejado de pensar en Yoongi, en la clase de música solía no prestarle atención por estar pensando en Kook, eso era lo único que lo tenía tranquilo en medio de aquel reto, ahora la duda de si sentía algo por Yoongi se había desvanecido, por supuesto que no lo hacía el único con el que su mente vuela es con Jungkook, solo el, ahora se había convertido en su todo, claro que sabía disimular sino ni siquiera se atrevería a acercarse a el.

Ahora mismo caminaba escuchando música hacia el salón del club de arte, distraído  y pensativo, tanto que no noto cuando choco que alguien que iba tan ido como el.

-¿porque no miras por donde vas, idiota?-le grito el chico de cabello rubio con el que se había tropezado

-¿que yo mire por donde voy? ¿porque no te fijas tu? no soy el único culpable aquí- respondió de igual manera pero aun así le ofrecio su mano para que se pusiera en pie.

El rubio suspiro y tomo la mano del contrario para levantarse

-lo siento...es que hoy he tenido un muy mal día y estoy algo sensible- se excuso mientras limpiaba el polvo en su ropa

-¡Así es la vida! Tiene días malos y buenos pero no puedes ir por mundo reflejandote en los demás, no eres el único con problemas- lo consoló Taehyung con una medía sonrisa

-¿que eres? ¿una galleta de la suerte?- dijo sonriendo levemente

-algo así - sonreí de lado - tus números de la suerte son 12245- bromeo logrando sacarle una risa al rubio

-creo que los números que mas suertudo me harían son los de tu numero de teléfono- dijo con un tono coqueto -mi nombre es Yan an ¿y tu?

-M-me llamo Taehyung- dijo con un leve sonrojo en su rostro, no era nuevo para el que le coquetearan sean hombres o mujeres sin embargo siempre le causaba la misma reacción, en cambió Yan an sabia muy bien lo que hacía y con una sonrisa ladina le extendió su celular a Taehyung para que escribiera su numero.

-Un lindo nombre para un chico también muy lindo...- dijo mientras miraba como tímidamente Taehyung escribía su numero 

-Lindas frases, lastima que no sean muy innovadoras que se diga -dijo regresandole su celular al rubio 

-Vaya que eres exigente- bromeo guardando su celular, ambos rieron gracias al comentario y caminaron juntos hasta el club del pelirrojo ya que el rubio insistió en ir con el a pesar que el apenas había salido de ahí.

Mas ambos pasaron por alto la mirada oculta que contemplo todo el encuentro de ambos, Jungkook por alguna razón sintió enojo al ver aquella escena y no entendía porque, estaba seguro que sentía una fuerte atracción por el chico misterioso con el que se encontraba cada viernes pero mas que nada no podía obviar el cosquilleo que sentía con solo escuchar la risa del pelirrojo,  estaba siendo egoísta,  pero en definitiva lo quería solo para el,  sentía una conexión con el y en definitiva quería que únicamente  fuera solo para el 

El rubio miro el muro con desilusión, era enorme y sus oportunidades de escapar de allí eran nulas,  lo cierto es que Seokjin estaba harto de estar atrapado en aquel lugar, llego allí porque no quería estar atrapado y resulto aún peor, aunque quizás exageraba, nada era peor que la casa de su padre, mire al suelo con las manos en su cintura y luego miro hacía arriba nuevamente soltando un grito mientras despeinaba su cabello.

-¡Maldita sea! ¡maldito el momento en que esa mujer decidió enviarme a este estúpido país! ¡malditos los gorilas que tiene mi padre como guardaespaldas que no me dieron otra opción! ¡maldito yo por...

-Por corromper la belleza y paz de este lugar con tus gritos- se escucho como alguien lo interrumpió, la voz se escucho entre los arbustos, Seokjin apenado fue a revisar a quien había perturbado gracias a su rabieta, pero no fue necesario, entre los arbustos se logro distinguir una melena negra y poco después los ojos felinos de Min Yoongi estaban expresando su enojo sin necesidad alguna de palabras.

-oh...eres tu...- dijo con cierto... enojo

-niño ¿acaso nuestros encuentros serán todos para molestarnos el uno al otro? -se pregunto el mayor levantándose y recogiendo la manta en la que estaba acostado

-de hecho, prefiero no encontrarme mas contigo...

-no es que yo quiera pero ¿se puede saber porque?- le miro extrañado, últimamente no  quedaba bien con absolutamente nadie, nunca le importo quedar bien pero le daba curiosidad saber porque siempre alguien tenía algo en su contra.

-¿porque? tu me trajiste aquí, tengo razones para no querer ni siquiera mirarte - su tono fue aumentando con cada palabra hasta llegar a gritarlo

-muy bien...- dijo sorprendido del tono del menor- primero... te calmas que ademas de que con tu cara tan roja no tendrías nada que envidiarle a un tomate también soy tu maestro y tu mayor así no lo quieras y me tienes que respetar, segundo tu mismo rogaste porque te trajera aquí, no te quejes, no es mi culpa que tu seas el señor decisiones radicales.

-¿porque mi hiciste caso? era un joven perdido en una ciudad desconocida, debiste dejarme en una estación de policía para que vinieran por mi y yo llamara a mi madre y le rogara perdón para poder regresar a Shangai, ahora no puedo, si ella descubre que escape estaré en peores problemas que nunca... Te odio, Me odio, Odio todo...- Seok Jin se sentó en el suelo tapando su cara, estaba al borde de las lagrimas por lo desesperado que se sentía, no tenía idea de que hacer...fue su peor decisión entre muchas malas decisiones, sintió una mano en su hombro y una presencia a su lado que lo hizo sentir levemente reconfortado.

-animo Seokjin... No todo esta perdido, estando aquí no tendrás que preocuparte porque te descubran y cuando te gradúes ya  tendré yo algunas soluciones para ti- dijo Yoongi sonriendo le calidamente

-¿tu? ¿porque tu?

-porque desde ahora eres mi responsabilidad, yo te metí en esto de alguna manera  y te ayudare a sobrellevarlo

Y lo abrazo, Seokjin se lanzo a sus brazos llorando como un niño, siempre actuaba como uno y esta era
la peor parte, ser débil... ¿porque era tan débil?