24. Los problemas en el paraíso

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La música llenaba el salón de practicas mientras tres virtuosos chicos se movían con agilidad al ritmo de la melodía, en la puerta un cartel de "no molestar" fue completamente ignorado por un pelirrojo que entró a la habitación casi volando tomando la mano de una pequeña de cabello bicolor, ambos como si nada se sentaron con las piernas cruzadas viendo a los bailarines sonriendo deslumbrantemente.

Jimin, Hoseok y Jungkook se detuvieron tan abruptamente que el ultimo incluso resbalo, sin embargo logro reincorporarse y junto a los otros dos miro a los intrusos confundido.

-¿qué creen que hacen? Hay un cartel de no molestar en la puerta- Jimin fue el primero en hablar mientras que Hoseok iba a revisar que el cartel realmente estuviera ahí aún.

-oh ¿era en general? Según nosotros era como una advertencia para los demás de su club, para que lo vinieran a copiarles- Mintió Taehyung, tanto Jimin como los otros dos compañeros le habían dicho antes que querían que fuera sorpresa, sin embargo el no podía evitar ir a molestar junto con Jaekyeon.

Los chicos observaron al dúo incrédulos de la excusa y seguidamente los sacaron del salón aún si estos protestaban a fuertes voces.

-lo intentamos, oppa, mejor dejemos de perder el tiempo, yo debo ensayar con Seokjin oppa y tu debes terminar tu galería- la menor se lamento palmeando la espalda de Taehyung, él, inconforme soltó un suspiro y dijo.

-de acuerdo. . . nos vemos a la hora de la cena. . . - ambos de mala gana se fueron a sus respectivos trabajos, aprovechaban cada tiempo libre para avanzar, ya era algo difícil con las clases y tareas.

-Iremos por algo de beber, te traeré algo - avisó Hoseok a Jimin, llevaban un rato largo ensayando y Jungkook ya había puesto el grito en el cielo una vez para denunciar a Jimin como un explotador así que resignado decidió dejarlos ir por algo de beber.

Sin embargo el con su perfeccionista persona decidió quedarse y seguir ensayando. Solo un poco después de que se fueran la puerta volvió a abrirse pensando que eran ellos Jimin siguió bailando.

-mmm que triste que nunca tomes mis consejos Jiminnie, te verías muy guapo bailando sin esos cachetitos saltando como conejos - Al escuchar esa voz femenina Jimin se detuvo abruptamente y volteó a verla.

Seria una completa mentira decir que Jimin no estaba fastidiado, cada encuentro a solas que tenía con Sujin ella decía algo ofensivo, sin embargo si Hoseok estaba cerca diría algo que sonara como un cumplido pero en realidad tenía una intención maliciosa "¿haz bajado de peso?" "Que lindo te vez esa ropa te adelgaza"  o algo parecido, si intentaba quejarse con Hoseok, el siempre consideraría que Jimin se lo estaba tomando demasiado a pecho o que exageraba, ella era muy inteligente, Jimin se aguantaba, pero esta vez no lo soportaría.

-Tu eres tan amable dando una opinión por la que no te he preguntado- mencionó Jimin con una sonrisa mientras tomaba un poco de agua de su botella -pero no tengo intención de cambiar mi cuerpo porque tu y tu huesudo trasero se sienten amenazados.

-¿amenazada? ¿por ti? Me sentiría más amenazada de un cerdito - dijo ella mientras levantaba su nariz imitando a dicho animal.

Jimin no quería pelear y rebajarse a su nivel, molestarla a ella con sus "defectos" no lo haría ganar nada, así que simplemente la ignoro, ya le había dicho lo que pensaba de su opinión.

-¿no vas a negarlo? Sabes que es verdad ¿no? Para empezar no se como un hombre puede estar con otro teniendo mujeres como yo, pero es peor cuando eligen chicos como tú

Euphoria |KV|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora