Alpha X Alpha [Tomarry]

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- Oh. Mi. Dios. Es demasiado sexy.- chilló una omega.

  Tom sonrió con suficiencia ante los comentarios adulando su presencia y porte, buscando a Harry Potter entre la gente. Al verlo, se sorprendió. No pensaba que su rival fuera un omega, estaba seguro que sería alfa, pero su complexión menuda decía lo contrario, no podía olfatear sus fermonas así que supuso que utilizaba supresores.
  Se molestó al percatarse que el supuesto omega no le prestaba atención en lo absoluto ¡Inperdonable! ¿Acaso en mocoso se sentía tan superior que ni siquiera le dirigía una misera mirada? Oh, Harry Potter se arrepentiría por el resto de su vida. El pelinegro no era feo, pero tampoco lindo (Lord Voldemort se negaba rotundamente a admitirlo); decidió una venganza perfecta ante su indiferencia: ese omega sería suyo (lo ilusionaría y, en cuanto lo marcara, Harry sería solamente parte de las "concubinas" del Lord, así como Bellatrix Lestange y Neville Longbottom).
  Se acercó a su eterno rival con paso firme y rápido. Su furia iba creciendo cada vez más y más al ver que, a pesar de que se acercaba, el pelinegro estaba ensimismado en las palabras de aquel libro que tenía en sus manos. ¡Oh! ¡Era una gran pena que la misericordia del Señor Tenebroso se hubiera extinguido del todo! (¿Era raro sentirse tan superior como un dios al decir la palabra "misericordia" dirigida hacia él? A Tom Riddle no le importaba, puesto que era obvio que seguiría usando esa palabra) ¡Harry Potter estaba jugando con fuego! Un raro fuego que, en lugar de quemar, cumpliría la función de derretir las barreras de hielo alrededor de su corazón... Por un tiempo; pues él, Lord Voldemort, se encargaría de destruir por completo aquel órgano que bombea sangre... ¿Sabían que al Señor Oscuro no le gustan las metáforas? ¡Lord Voldemort siempre decía las cosas de la interpretación literal! Admirable ¿No?

- ¡Harry!- llamó de forma amistosa en cuanto llegó a su lado. El chico lo observó con una mirada severa y fría.

- ¿Te conozco?- preguntó arqueando una ceja. ¡Que inaudito! ¡Hacer tal descarada e irrespetuosa expresión hacia el todopoderoso Señor Oscuro! (Nuevamente el mago anotó mentalmente esa palabra para decirla luego) Oh. Por. Dios. Potter debería ir planificando su funeral.

- ¿No me recuerdas?- hizo una mueca triste.- ¡Eramos amigos de pequeños! Yo vivía cerca de tu casa, pero me tuve que mudar.- al contrario de lo que Tom creía, el de ojos verdes tensó su mandíbula y sus ojos perdieron todo brillo.

- ¡Oh! Phill.- contestó secamente.- Hablemos en otro lugar ¿Quieres?- se alejaron de la entrada de la institución, fuera de la vista de todos.- ¿Qué demonios quieres, Phill?

- ¿Cómo?- la sonrisa del mayor tembló, pero no se dejó derrotar.- ¿A qué te refieres, Harry?

- ¡Oh, vamos, Phill! Actuando de manera tan amigable, llamándome "Harry", haciendo muecas ¿Qué tan idiota crees que soy? No te faltó con hacerme la infancia una mierda y ahora vas por la adolescencia ¿No?

- No, Harry ¿Qué-?- el de la cicatriz negó con la cabeza, estaba furioso.

- Vete a la mierda.- gruñó Potter antes de irse rápidamente a su curso, pues perdería su primera clase. Esta no es la típica novela donde el protagonista va a una escuela pero nunca tienen clases. No, aquí nuestro querido salvador debe mantener su beca.

A Lord Voldemort le salió el tiro por la culata, pero ¡Ey! Miren el lado bueno: al menos sabe que ahora no tiene casi ninguna oportunidad de completar su malévolo plan. Esperen... No es algo muy bueno ¿Cierto?