Alpha X Alpha [Tomarry]

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  Remus sollozó al ver a las dos personas frente a él. El animago no perdió el tiempo y abrazó con fuerza al lobo, quien trataba de separarse.

- ¡Alejate de mí, asesino!- gritó contrariado. Mentiría si dijera que no quería estar con él. Sirius lo miró herido, pero obedeció y se separó. Lupin sintió como su corazón se partía al ver la expresión de cordero degollado que tenía su antiguo amigo.

- Calma, Remus.- lo tranquilizó Harry.- El pobre Sirius no mató a nadie, todo fue una manipulación de la vieja cabra.- el hombre lobo frunció el ceño. Su confusión era tangible en ese momento. Finalmente llegó a una conclusión: su pobre Harry había sido manipulado por el malvado Voldemort.

- Tú... Esa maldita rata de Malfoy sí estaba con Voldemort. ¡Te tiene atrapado, Harry! ¡Tenemos que escapar!- exclamó escandalizado, provocando que el menor soltara una gran carcajada.

- ¡Ya quisiera tener a esta hermosura secuestrada!- bromeó.- Y no insultes a Draco, es uno de mis aliados principales. Confío más en él que en ustedes.- la última frase hirió un poco (mucho) el orgullo de Sirius.

- ¡Harry, no puedes! ¡Él es un mortífago!- la sonrisa del menor tembló un momento, pero se mantuvo en su lugar.

- Primero: no lo es. Segundo: ¿Eso qué importa? Yo soy el amante del Lord Oscuro. Y tercero: Sev también es un mortífago.- Remus se vio sofocado ante la segunda frase.

- Harry... Oh, Harry... Lo lamento tanto. Si hubiera estado contigo quizás...- el delta lo interrumpió. Su mirada se torno seria y una mueca de desprecio apareció en su rostro.

- Estoy con él porque quiero, Lupin.- soltó secamente.- Y el hubiera no existe, no puedes volver al pasado. Callate un momento, porque me estás exasperando. Si fueras cualquier otra persona te lanzaría a los mortífagos para que te cruciaran.- el terror se plasmó en el rostro del mago. Entonces el adolescente sonrió amablemente.- Pero te tengo mucho aprecio, así que no lo haré.
» Deja que te explique. Sirius no está ni cerca de ser un asesino.- miró de reojo al animago, quien se veía terriblemente nervioso e inquieto.- Bueno, no tanto.- bromeó recordando los instintos asesinos sobre matar a Colagusano.- Mi pobre padrino fue inculpado. Él no era el guardián de James y Lily, sino Peter Pettigrew, quien era añoraba ser un mortífago. Corrió a decirle a su amo y señor donde se encontraba la desafortunada familia. Las cosas se complicaron y Sirius terminó siendo inculpado. Claro que Dumbledore era consciente de ello, pero dejó que Sirius se pudriera en Azkaban.- un nudo se instaló en la garganta del omega. Sintió culpa por no haber confiado en su alfa, por haberle exigido que rompiera el lazo, por no haberle abrazado luego de ver aquella mirada desolada y llena de tristeza al partir en un barco a Azkaban. Apoyar y confiar en su pareja era algo que tanto alfa como omega debía hacer, pero Remus falló en eso.

- Yo... Sirius...- titubeó. Observó al alfa con lágrimas en los ojos, este sólo sonrió y abrió sus brazos. El omega no dudó y corrió hacia él, dejándose envolver y sintiéndose protegido por primera vez en años. Harry apartó la mirada, no quería interrumpir su reunión, pero debía asegurarse de que el hombre lobo estuviera de su lado. Aunque con aquello lo tenía casi ganado. Estaba a punto de hablar cuando escuchó que Lunático hablaba.- Lo siento, lo siento tanto... Debí confiar en ti.- sollozó.

- No es tu culpa, cariño... Yo también me dejé manipular por ese viejo por mucho tiempo.- el delta sonrió orgulloso ante las palabras dichas por el alfa. Le comunicó, con una mirada, que le contará acerca de su plan.- Y por eso te necesitamos, Remus... Ninguno de los dos extremos es bueno, pero el centro no existe y tampoco hay una tercera opción... Con Harry queremos crearla. Combatir tanto con Quien Tú Sabes como con Dumbledore... Te llamamos por esa razón... ¿Que dices? ¿Te unes?- murmuró con dulzura antes de besar apasionadamente los labios del omega. Con esta última acción toda duda dentro del lobo desapareció.

- Estoy con ustedes.