Capítulo 16: Conflicto de intereses

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Justo cuando los chicos habían terminado de hablar con West, Azul entró a la cabaña junto con otra gran red repleta de pescados.

—¿Interrumpo algo?— preguntó, al notar el silencio que produjo con su presencia y las miradas de todos en ella.

—No, para nada— se apresuró a contestarle Rain— nosotros ya nos íbamos a pasear por la playa.

—Sí— asintió Slade— ustedes tienen mucho de qué hablar— Azul miró a West con curiosidad y luego nuevamente a sus amigos.

—Disculpen, pero tengo curiosidad, ¿ustedes de dónde conocen a West?— les preguntó mientras guardaba los pescados en el refrigerador con la ayuda de West.

—De la escuela— le respondió él.

—¡Oh! ¿También son villanos como tú? —preguntó entonces Azul con una chispa de entusiasmo, los chicos intercambiaron miradas, no muy seguros sobre qué contestarle, se habían acostumbrado a ocultar su identidad en este viaje.

—Claro, así que vienen desde muy lejos— respondió West por ellos, al ver que no respondían.

—Emm, pero estamos de incógnitos —le aclaró Slade.

—No se preocupen— les sonrió entonces ella con sus múltiples dientes— no le diré a nadie. ¡Siéntanse bienvenidos! El mar está hermoso y el clima también.

Los chicos salieron de la cabaña y dejaron a Azul con West para que hablen tranquilos sobre la propuesta que acababan de hacerle a su amigo.

—¿Creen que la niña pez entre en razón y acepte venir con nosotros?— preguntó preocupado Pranch.

—Espero que sí— suspiró Slade— y si no habrá que tomar otras medidas para llevarnos a West.

—No podemos secuestrarlo— opinó Rain.

—Nadie dijo secuestrarlo— se rió Pranch.

—¡Podemos hacer lo que sea!— les respondió Slade— ¿No escucharon lo que dijo? El chico no está en sus cabales.

—Bueno, confiemos en que la niña pez sea sensata— suspiró Pranch.— ¿Quieren unas oreos?— sus amigos asintieron y Pranch les convidó solo una a cada uno.

—No podemos hacer nada por ahora— se encogió de hombros Rain, mientras masticaba la galletita— ¿Por qué no vamos mientras a relajarnos al mar?— Azul había dicho que el mar estaba hermoso y realmente se veía así y Rain ya no podía soportar estar tan cerca de una fuente de agua tan majestuosa sin ir a jugar con el agua y sus poderes.

—¡Chicos!— los interceptó Laly, seguida de Zed— ¿Qué pasó?

—Nos quedaremos una noche— le explicó Rain.

—Yo tampoco estoy de acuerdo— se apresuró a contar Slade, al notar las expresiones en los rostros de Laly y Zed— pero West está un poco...

—Necesita tiempo para pensar— lo interrumpió Rain— mientras podemos ir a jugar al agua, ¿quién viene conmigo?

—¡Yo voy!— exclamó Peny, mientras se sacaba la ropa hasta quedar en ropa interior para luego dirigirse corriendo al mar. Rain la imitó y luego Lavanda también.

Los demás los miraron divertirse, hasta que se fueron animando también a entrar al agua. Además de las olas que ya había, Rain controlaba el agua para hacerlas más grandes, o para fingir que era un surfista profesional. Todos se rieron y se divirtieron mucho.

Luego, West y Azul salieron de la cabaña y también se unieron al juego en el mar y todos pudieron notar cómo el color de piel de Azul se iba tiñendo de un tono más azulado y cómo aparecían sus branquias, y ella hizo alarde de sus habilidades y de lo profundo que podía nadar y respirar bajo el agua.

Vacaciones [2]: Búsqueda en territorio seyrenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora