Vacaciones [2]: Búsqueda en territorio seyren

Capítulo 24: La hora de la verdad

La camioneta de la abuela de Frost conducida por Edward y el jeep seyren conducido por Isabel ya habían pasado la frontera y ahora se encontraban en la carretera de la Nación Villana. Para lograrlo, el equipo de Volto había tenido que luchar y defenderse de varios seyrens, con la ayuda de algunos de los chicos, pero ahora ya no habría más peligros, se encontraban a salvo.

—¿Por qué el amigo de Smoke es tan parecido a Frost? –preguntaba Dafs, por quinta vez consecutiva.

—¡Dafs! ¡Estás delirando de fiebre! –lo retó nuevamente Wany—. Ya llegaremos al hospital del Escuadrón de Volto, hasta entonces, trata de descansar.

En verdad estaba preocupada por él, esos seyrens lo habían golpeado muy duro, la apenaba muchísimo verlo en ese estado tan lamentable. Ella sostenía protectoramente a Stacey de un lado y a Dafs del otro, ambos estaban en pésimas condiciones.

—Ay, Wany, va a ser muy gracioso cuando le contemos a nuestros hijos que casi morimos en la Federación Seyren, todo por buscar a un sujeto que era igual a Frost. –Wany puso los ojos en blanco.

—En serio, Dafs –intervino Flux—, es mejor si descansas, ¿por qué no te callas un rato?

—Flux, pedirme que me calle es como pedirle al sol que no brille...

—Está ardiendo de fiebre –Wany le tomó la temperatura de la frente con la palma de su mano.

—Gracias, Wany, yo también pienso que eres ardiente –le sonrió Dafs, esforzándose por abrir sus ojos magullados—. ¿Sabían que una vez Wany casi me besa? –les contó a los demás—, pero justo los seyrens atacaron la escuela. Malditos seyrens, sin ofender a Smoke y a su amigo que se parece a Frost... por cierto, ¿por qué es que son tan parecidos?

—¡Ya te dije que no lo sabemos! –le gritó Toxia, perdiendo la paciencia—, pero es lo que yo voy a tratar de averiguar en mi laboratorio.

—Extraño a Arti, ¿dónde está? –preguntó Dafs, como ignorando el comentario de Toxia.

Pero nadie le respondió, Arti había quedado destruido en la playa de Fogus y no volverían por él. Cuando Dafs se recuperara se lo contarían, pero ninguno pensaba que sería buena idea responderle ahora que deliraba de fiebre.

***

El equipo de Volto se había ofrecido a tratar a los villanos heridos en su hospital privado del cuartel. Cuando llegaron, unas compuertas se abrieron automáticamente y entraron con los vehículos en el estacionamiento del Cuartel de Volto para guardarlos allí.

Por dentro el edificio era muy lujoso y realmente enorme, contaba con muchísimas instalaciones. Apenas llegaron, varios de los empleados se ofrecieron a ayudarlos y a brindarles camillas para transportar a los heridos hacia el hospital.

Una vez allí, internaron a quienes necesitaban atención urgente: Eva, Stacey, Tad, Dafs y Laly.

A los demás, los atendieron otros doctores y enfermeros para curarles sus heridas.

***

En cuanto los enfermeros terminaron de encargarse de los cortes y heridas de Frost, él decidió salir solo al patio interno del Escuadrón de Volto. Estaba muy preocupado por su abuela y no tenía ningún apuro en volver a su casa sin ella, por lo que había decidido quedarse allí hasta que Eva Margoth se recuperara. Esperaba que fuera pronto, necesitaba respuestas.

Se sentó en uno de los lujosos bancos que había allí, bajo la sombra de un árbol.

¿Por qué su abuela nunca le había contado que ella había pertenecido al ejército villano? ¿Por qué sería que él compartía los mismos poderes que Freeze, pero su abuela y su padre no poseían el control del hielo?