BIG GIRLS, clizzy.

OO4

Las hojas de los árboles caían, al igual que las esperanzas de Isabelle que creían que Simon aparecería.
Al parecer, el castaño había olvidado su aniversario, otra vez.
Todos los 11 de cada mes, la pareja se reunía en el bar que quedaba a un par de calles del departamento que compartían para "festejar" el acontecimiento, básicamente era tomar café juntos y hablar sobre cómo estaba yendo la relación, para mejorar en las cosas que al otro no le gustaba y así hacer del mes siguiente uno mejor.

Cuando la pelinegra estaba por levantarse para irse un castaño entró al bar y como si fuera un pequeño tornado de hojas secas se paró delante de ella, evitando que se fuera.

— Lo siento por llegar tarde — Simon hizo una mueca de disculpas mientras se sentaba en la otra silla de madera.

Isabelle suspiró y volvió a ubicarse en el lugar donde estaba, observó a Simon y las pequeñas medialunas violentas que se formaba debajo de sus ojos, esas que ella en algún momento había besado y había jurado que las amaba, esa sensación de amor ya estaba desapareciendo, lamentablemente.

— Está bien, no hay problema — sonrió levemente para demostrar que hablaba en serio —, ¿cómo estás? no hemos podido tener una conversación decente en semanas.

— Lo siento de nuevo, Izzy, hemos estado tan ocupados en la preparación para la presentación de esta noche en el pandemonium que no he tenido tiempo para tí.

la pelinegra estaba por decirle que no, que decir lo siento era igual a nada porque ella lo había necesitado también y que todo esto venía hace tiempo, que él la había dejado sola mucho antes que de la oferta del pandemonium para tocar allí, pero se limitó a asentir, no quería discutir y terminar cansada psicológicamente.

— Pero tú también debes entender que la banda es una de mis prioridades y que no puedo estar contigo todo el tiempo — Simon siguió hablando, ignorando a Isabelle —. Sabes que amo hacer esto y en lugar de decirme que no te presto atención, deberías alegrarte por mi.

Izzy suspiró, al parecer Simon sí quería discutir.

— Simon, no estoy pidiendo que dejes la banda por mí ni que me prestes más atención. Ambos sabemos que dejaste de estar a mi lado mucho antes de que te enteraras sobre la presentación que les ofrecían. Pasas más tiempo con Raphael y Jordan que conmigo, hasta con Jace, ¡y él te caía mal!.

— Bueno pues, ¡cambie de opinión! él me cae bien ahora que lo conozco, no me puedes culpar por eso.

La chica negó con la cabeza y volvió a levantarse de su lugar.

— Piensa en todo lo que está sucediendo, Simon, cuando dejes de ser tan malditamente egoísta, me llamas.

El castaño abrió la boca para contestarle pero la cerró al ver como su novia caminaba hasta la salida y desaparecía entre la gente vestida en tonos marrones. Isabelle, por su parte, estaba cansada, cansada de la actitud del nuevo Simon, ese que ella no conocía.
Sabía que debía hacer algo pero ¿qué?, no estaba segura de querer terminar esta relación de ya casi tres años sólo porque piensa que Simon está muy raro, entre pensamientos sacó su celular del bolsillo delantero de su campera y marcó el número de Clary, sonó dos tonos y la contestadora atendió.

— ¡Hola! Soy Clary, en este momento no puedo atenderte pero deja tu mensaje después de la señal y te devolveré la llamada.

Izzy cortó al terminar de escuchar el mensaje grabado y siguió caminando, tenía ganas de hablar con alguien pero no estaba segura de quién podría darle un consejo en situaciones como ésta. Clary al parecer estaba ocupada, Jace se pondría del lado de Simon, Alec y Magnus probablemente ya tendrían suficientes problemas con eso de querer adoptar un bebé y Simon, bueno, por obvias razones no podía hablar sobre él con él.

Bufó y se sentó en el primer banco que encontró vacío, a sólo dos cuadras del central park. Definitivamente necesitaba más amigos, podía llamar a kelsey pero no tenían la confianza suficiente como para hablar sobre estos temas.

— Hey, ¿qué haces aquí? hace años que no te veo — la voz masculina sonaba ronca, como si no hubiera hablado en un tiempo.

Isabelle dió un pequeño salto en su lugar, el chico la había tomado por sorpresa.

— ¡Jonathan!, casi me matas del susto — rió y se corrió levemente para la izquierda.

El chico de pelo blanco tomó esa acción como una invitación y se sentó al lado de la mejor amiga de su hermana.

— Lo siento, no quería asustarte. Estaba yendo al trabajo y te ví, decidí venir a hablar contigo antes porque no te he visto en semanas, ¿cómo estás? te noto algo cansada, la verdad.

Isabelle hizo una mueca parecida a una sonrisa y estiró su cabello hacia atrás.

— Estoy bien, no te preocupes.

Jonathan levantó sus cejas en señal de que no creía ni un poco sus palabras.

— Bien, tengo algunos problemas de parejas pero no es nada grave.

— ¿Es por lo de la presentación en el pandemonium? Clary me lo contó, no debes preocuparte por eso — el chico sonrió amablemente mientras apoyaba su mano en la espalda de Isabelle, dándole tranquilidad.

— ¿Por qué me preocuparía por eso? — Isabelle preguntó a la defensiva —, es decir, estoy bien con que él se ocupe de su banda y eso pero no puede volcarse en eso solamente, no es sano.

— ¿Y qué es sano? ¿Estar todo el día detrás tuyo? No lo tomes a mal, Izzy, pero es entendible que Simon haya estado volcado en el trabajo últimamente. No quiero excusarlo o algo así, sólo quiero que lo comprendas.

Izzy asintió levemente, lo único que le faltaba era discutir con él también.

— Si ves que luego de esto él sigue comportándose como un idiota, habla con Simon o déjalo y sal a divertirte con mi hermana — Jonathan rió levemente y luego miró su reloj, frunciendo el ceño —. Debo irme, si llego tarde mi jefe va a matarme. Fue un gusto verte de nuevo, Izzy, cuídate y nos vemos luego.

El chico se levantó y dejó un casto beso en la frente de Isabelle antes de irse por donde había llegado, las palabras de Jonathan hacían eco en la cabeza de la pelinegra "o déjalo y sal a divertirte con mi hermana" ¿debía hacer eso? ¿eso era lo correcto?.

como notarán, ahí apareció el Jonathan de ojos verdes. Al principio no iba a ponerlo pero él es un bebé que merece aparecer y hacerlo bueno hace bien al corazón, así que.