CORAZÓN DE CRISTAL{✔}

Capítulo 30

No me lastimes.

Lágrimas desciende de sus ojos y yo no puedo hacer nada para detenerlas.

Está sufriendo y eso me lástima.

Verlo llorar es lo más doloroso que me ha tocado vivir y lo peor de todo no es eso, lo peor es que yo cause ese sufrimiento, aunque fue de manera involuntaria pero lo hice porque yo no pedí tener el corazón de Lisa dentro de mi pecho.

Sé que quizás será difícil lidiar con esto, es algo muy complejo de asimilar y sobretodo enterarse de esta verdad, no es fácil pero juntos lo podremos ¿verdad?

— ¿Por qué mientes? —su voz trata de ser dura pero se escucha más como un susurro—No mientas, estas lastimándome.

—No por favor, no digas eso... —intento acercarme pero él me esquiva—Lo menos que he querido hacer en todo este tiempo es eso, por eso guardé silencio, tenía tanto miedo de tu reacción.

La gente a nuestro alrededor murmura, los presentes no han dejado de opinar al respecto desde que vieron el vídeo. Algunos se muestran sorprendidos y otros como Kiara y Kendra disfrutan la escena.

Esto fue muy bajo de parte de Kiara.

—Lo acabas de joder todo —dice limpiando sus lágrimas con sus manos y sin ni siquiera mirarme abandona el lugar.

¿Qué?

A que se refiere con joderlo, es decir necesitamos seguir hablando.

Intento ir tras él, pero Sofía me detiene—Creo que debes esperar a que se calme.

—No, siento que si no voy tras él, la brecha que se acaba de formar entre nosotros terminará separándonos.

Sofía vacila un poco, pero finalmente me deja ir en busca de Dan.

Correr, llorar y al mismo tiempo ir en tacones no es buena idea, así que a mitad del camino me quito los zapatos que llevo puesto. Necesito hablar con Dan, se que podremos solucionar esto, nos amamos nada puede ser más importante.

Al salir veo como gruesas gotas de lluvia caen y me empapan al mismo tiempo que se confunden con mis lágrimas, inspecciono por todo el lugar y observo a Dan en el estacionamiento, él está golpeando su auto.

Muy despacio me acerco hasta él—Dan... Amor, vamos hablar —pido.

El detiene sus golpes y se gira para encararme, ni en cien años hubiese estado preparada para recibir esa mirada de parte de él. Es de rabia... quizás de odio, sus pupilas están tan dilatadas que hacen que mi corazón se encoja para luego latir desesperadamente dentro de pecho, todo su cuerpo irradia tensión.

— ¿Hablar? ¿De qué quieres hablar? —Dice y una sonrisa carente de humor se escapa de sus labios. —Quieres hablar de como obtuviste su corazón y te quedaste callada, luego viniste por todo lo que ella tuvo en su vida.

— ¿Qué? ¿De qué estás hablando? —llevo mis manos a ambos lado de mi cabeza. ¿En qué momento está conversación tomó ese rumbo?

— ¡Cielos! Ahora ni siquiera estoy seguro si esto es real —dice en un susurro tembloroso y a pesar de la lluvia logro escucharlo—No sé si lo que tu sientes es real o sólo fue su corazón a través de ti.

Trato de acercarme pero él me esquiva de nuevo, me digo mentalmente que debo entender su reacción pero a pesar de eso su actitud me lástima.

—Yo soy... Cristal, la chica que te ofreció un café cuando estabas a punto de lanzarte de aquel edifico, la misma chica que se sintió viva tan solo con una mirada tuya... —hago una pausa y me acerco de nuevo, esta vez Dan vacila pero no se aparta del todo—Soy la chica que se mudó de ciudad seis meses después que le hicieran un trasplante de corazón, te conoció y se enamoró perdidamente de ti.