Chapter Twelve

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The Barrens 14.24

Eddie caminaba con la bicicleta a su lado, directo hacia la casita subterránea. Una sonrisa leve iba plantada en su rostro recordando como Richie lo había besado días atrás. La sensación de cosquilleo se acentuaba en su estómago ante el recuerdo y no podía evitar sonrojarse. Sumido en sus pensamientos, atravesó el claro y apoyó su bicicleta en uno de los tantos árboles. Pronto los demás perdedores llegarían, de eso estaba seguro.

Caminó directo hacia las compuertas de la casita y tan solo abrió una para poder sentarse en la otra y dejar sus piernas colgando. Observó el claro, todo su alrededor, y suspiró. Ese día el clima estaba algo frío, bastante extraño ya que el sol estaba justo sobre él, en su punto más fuerte e iluminando todo, y aún así no lograba crear algo de calor. Las copas de los árboles se movían de un lado a otro creando sonidos tranquilizadores y que alguna que otra hoja se desprendiera y cayera.

Era bonito. Era un bonito día.

Hasta que una bicicleta entró a toda velocidad en el claro y derrapó muy cerca de Eddie. El pequeño asmático se sobresaltó, sintió como sus pulmones se quedaban sin aire y apretó sus ojos fuertemente. Cuando decidió abrirlos, la imagen de Mike se formó en su retina. Estaba algo despeinado, y desde su puesto se lo veía sumamente alto.

-Mike, me asustaste.- Susurró Kaspbrak lentamente. Lo miró un momento y sonrió leve. Pocas veces había hablado con Wheeler pero le agradaba un poco.

-Lo lamento, pequeño Eddie. No sabía que estabas aquí.- Dijo Mike poniendo su bicicleta junto a la del más bajo y acercándose a él. Una sonrisa se plantó en su rostro, el asmático le parecía sumamente adorable.

-Si, al parecer llegué muy temprano. O todos llegarán muy tarde.- Habló despacio.

-Me inclino más por la segunda opción.- Ambos rieron levemente. Mike le tendió un cómic a Eddie y sólo ahí Kaspbrak se dió cuenta que traía varios más en sus manos.  Amazing Spider-Man #328 pasó a manos de Eddie y este contempló maravillado al azabache.

-Apenas salió hace unos meses.- Susurró. -Estaba muy costoso.- Mike asintió y tomó asiento a su lado.

-Está, todavía. Pero papá me los compró.- Eddie asintió comprendiendo y comenzó a pasar las hojas, viendo las figuras de manera superficial.

-Es raro que estés solo. ¿Y tú grupo?- Eddie observó a Mike esperando una respuesta. Había ignorado por completo que el más alto se había sentado a su lado, y ahora que lo notaba le parecía una cercanía no tan cómoda, pero Mike era agradable, dejando de lado pasados comportamientos y situaciones extrañas, así que lo dejó pasar.

-Vendrán ya mismo. Espero.- Asintió entendiendo y se volvió a concentrar en la revista en sus manos. -Escucha, Eddie.- El más pequeño subió su mirada y se encontró con los ojos oscuros de Mike. Esta vez su cercanía era tanta que logró incomodar a Eddie e hizo que este retrocediera disimuladamente.

-M-mande.- Carraspeó apenas audible y trató de sonreírle.

-Es que...- Mike lo miró directamente a los ojos, recorrió las pecas de sus mejillas y la pequeña nariz de Eddie. Admiró todo su rostro y sonrió abiertamente. -Me pareces adorable.- Un sonrojo bastante visible se asentó en el rostro de Kaspbrak e hizo que desvíe su mirada. No era que le gustara esa clase de cumplidos, menos viniendo de alguien quien prácticamente era un desconocido, pero le resultó vergonzoso y las pruebas de eso se arremolinaron en sus mejillas.

He's mine! » Reddie ⟩ST - IT⟨ •AU-Crossover• [Completa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora