He's mine! » Reddie ⟩ST - IT⟨ •AU-Crossover• [Completa]

Chapter Twenty Two

Hoy me puse triste escribiendo este cap y ni siquiera sé por qué. Disfrútenlo.

Mel💓

(***)

Center Street 16.56

-¡Me debes mi estúpido mes de helado gratis!

-¡No, claro que no!

-¡Te iba ganando maldita abuela!- Eddie y Will se miraron cansados, y se limitaron a mirar la escena delante de ellos. Muy en el fondo se preguntaron cómo es que realmente podían sentir algo por aquellos seres que parecían no pensantes, casi rozando a los simios. Se rindieron cuando se dieron cuenta que era imposible saberlo. -¡Si no se hubiera cortado la estúpida luz en todo el estúpido pueblo te habría ganado! ¡La cual por cierto, se cortó por tu culpa!

-¡Yo te iba ganando, cuatro ojos! ¡Eres malísimo, y tus técnicas son anticuadas!... ¡Oh por favor, yo ni hice nada!

-¡Ja, ya quisieras! Mis técnicas son las mejores. Además claro que fue tu culpa. Eres tan malo que alteras el equilibrio del universo cada vez que juegas.- El bocazas se preparó para adoptar la voz de la abuelita y continuó. -Soy Mike y no sé jugar al Arcade porque me gusta cocinar y tejer abrigos ¿No gustan pasar a tomar una tazita de café?- Terminó su imitación y se acercó a Will. -El profesor Jirafales te espera, Wonka.- Le alborotó el cabello ganándose una mirada molesta por parte del pequeño.

-Muy gracioso.- Habló su hermanastro y le sacó su dedo medio molesto. Más que todo por el gesto de cariño que el bocazas le dió a su amigo, pero trató de ocultarlo.

-De todos modos te gané, rana. Es hora de que lo aceptes y vayas a perder tu tiempo comiendo moscas en otro lado.- El bocazas abrazó a los dos pequeños por los hombros y comenzó a caminar en dirección a su casa. Aquella que desgraciadamente compartían él y Mike. -¡Quiero mi mes gratis de helado!

Y a Mike le molestó.

Richie ya no solo tenía a Eddie, también arrastraba a Will con él y ni siquiera lo dejaban unirse a ellos. Oh definitivamente se habían invertido los papeles y Mike solo pudo maldecir por lo bajo al darse cuenta de ello.

-¡¿Qué se supone qué haces!?- Habló finalmente, haciendo girar a los tres a verlo. Will lo miró cohibido, probablemente su subconsciente sabía lo que venía.

-¿Me alejo de tí? ¿No es obvio?- Richie lo miró obvio y luego se señaló la cabeza. -¿Acaso estornudaste el cerebro y se te quedó un moco ahí arriba?- Eddie se separó del bocazas y comenzó a tirar de su brazo para alejarlo de ahí.

-Ya Rich, por favor, vámonos.- El bocazas no se movió. Will no supo qué hacer y después de unos segundos se dió cuenta que la mejor solución era tratar de alejar a Mike también de ahí. Así que eso hizo, caminó despacio hasta ponerse delante de Mike y comenzó a empujarlo poniendo las manos en su abdomen.

-¡Por qué crees que tienes derecho a quitarme a mis amigos!- Eso paralizó a todos. Nadie estuvo preparado para las palabras de Mike, ni siquiera él mismo. Pero Richie ya sabía del gusto de Will por Mike, y no le sorprendió deducir que algo comenzaba a sentir su hermanastro también. Sonrió malicioso pensando que finalmente el karma había decidido vengarse de Michael por haber querido quitarle a Eddie.

-No es mi culpa que ellos decidan alejarse de ti por ser un cabeza hueca.- Mike intentó avanzar con el ceño fruncido y enojado, pero Will hizo lo que pudo para evitarlo.

-No le hagas caso, Mike. Lo dice para molestarte.- Wheeler no lo escuchó, y Eddie tiró más fuerte de Tozier para llevarlo lejos.

-Beep beep, Richie- Dijo con dificultad Eddie y tiró más fuerte. Finalmente pudo hacer que Richie dé la vuelta, y suspiró aliviado.

-Sí, sí. Wonka ve con él. Después de todo dijiste que tú eras el encargado de decirle que ya no querías ser su amigo.- Hizo el ademán de despedirse y se dejó llevar por el pequeño asmático.

Mike no se lo esperó, se quedó de pie en medio de la acera mientras veía como Richie se alejaba, sin poder reaccionar. La sorpresa y la decepción se hicieron espacio en su pecho y lentamente bajó la mirada hacia Will, sin poder creerlo.

-¿Tú...?- El pequeño negó, sin poder pronunciar palabra mientras en su mente maldecía a Richie por no poder cerrar su bocota. -¿Tú... dijiste eso?

-No, no, yo no...

-¿Y entonces por qué dijo eso?- El más alto esperó que respondiera mirándolo acusador. -Si lo dijo es porque tú lo dijiste, Will.

-No, de verdad que no. Richie solo quiere...- No supo que decir ¿Qué quería en realidad el bocazas? No tenía idea, ni la más mínima idea.

-¿Quiere qué?- Mike esperó respuesta, sin embargo esta no llegó. El pequeño no sabía que decir. Negó decepcionado y dolido mientras miraba a Will a los ojos, asumiendo que las palabras del bocazas eran ciertas, porque si no lo eran ¿tan difícil era dar una respuesta? -Si no querías ser mi amigo podías decírmelo. A mí. Y lo hubiera aceptado si me lo decías tú. No tenías por que contárselo a todo el mundo y esperar que me enteré por el chismoso de Richard.

-Pero yo no...- Mike negó nuevamente.

-Me lo esperaba de todos menos de tí, Will.- Estaba profundamente decepcionado, y ni siquiera era por el hecho de que supuestamente Will no quería ser su amigo. Era por Richie. Que Will comenzara a contarle las cosas a su hermanastro, aquel que no soportaba y detestaba con toda su alma, y no a él, fueron un golpe en su orgullo. Tantos años de amistad y su mejor amigo prefería contarle todo al primer idiota que conocía por ahí. Definitivamente los celos podrían llegar a ser un arma poderosa, sabían destruir amistades a diestra y siniestra y no te dabas cuenta hasta que la otra persona se haya ido.

-¡Pero no es verdad! ¡Yo no he dicho eso!- El pequeño estaba dolido, y temía que la promesa que le había hecho Mike días atrás, se rompiera fácilmente.

-Tranquilo Will, dejaré de ser tú amigo si es lo que quieres. Te dejaré en paz.- Dió la vuelta planeando dejar al pequeño solo, pero rápidamente una diminuta mano en su brazo lo detuvo.

-No puedes, no... Prometiste... p-prometiste que no me volverías a dejar s-solo, Michael.- El nombrado se soltó de su agarre sin siquiera mirarlo.

-Sí, pues, te encargaste de romper la promesa.- Y se fue dejando al pequeño Will con lágrimas en los ojos y el corazón profundamente destrozado. Porque eso era lo que se obtenía cuando las falsas promesas tomaban significado en la vida de las personas. Porque era eso lo que sucedía cuando alguien no era lo suficientemente valiente para cumplirlas pase lo que pase.