Secuestrado Deseo

CAPITULO XIII. Cuando mis manos te tocan, arderás también...

- Tienes mucho que aprender de mi princesa negociador, ella... haaa, por eso es que te idolatro MEL del negociador y princesa mía.- suspiró.

- Gracias EFREN.

- Lo que tu pidas... solo quiero preguntar algo, en mi ignorancia, ¿que es esa palabra que el decrépito de tu marido te dice? Siempre lo hace y no sé si es un seudónimo tuyo o significa algo.- eso me dolió, escuchar nombrar a mi "marido" duele, pega, porque no sé ya cómo serán las cosas cuando salga de aquí, ¿si es que logro salir?

- Monamour, él me dice así, corrido, cuando de verdad es mon amour, que dignifica MI AMOR en francés.

- Puasss, que falso el artistica.

- Le haces daño, EFREN, dices quererla y le lastimas donde sabes que  le duele.

- Perdón princesa, pero veras que hoy duele menos que ayer y mañana dolerá mucho menos que hoy, hasta que solo sea tu orgullo el que se resienta de eso que él hizo, eso te lo juro, así tenga que morir para lograrlo.- parecía sincero, no había sarcasmo en su apreciación-  ANUEL, desata las manos de mi princesa, ella debe escoger la ropa de su negociador, y después limpiarlo, la pobre pidió que se bañara y no pienso negarle el derecho a respirar cerca de un hombre limpio por lo menos.

Mi cara se puso roja, me daba pena que MARCOS pensara que me repugnaba su olor, solo que me sentí mejor con el baño y seguro él también, y no lo quería incómodo por su aspecto. Busque en su maleta, un pantalón deportivo gris y una sudadera negra sin ninguna distinción, un bóxer, sonrojándome al conseguí allí otro tripack de preservativos, (al parecer es muy activo, le gusta estar preparado y bueno "se cuida") los guarde rápido, saque un champú, desodorante, loción, y un peine. Cuando tenía todo listo y ya el caminaba hasta el baño, me detuvo EFREN.

- Toma estas tijeras. No le voy a soltar nada, corta lo que tengas que cortar, y no cierres la puerta, por las tijeras no te voy a vendar hasta que ya hayas cortado todo, el estará vendado mientras cortas.- me paso las tijeras sin hacer amago de tocarme, nunca pretendía tocarme y de momento me aliviaba que no lo hiciera.

- Gracias EFREN.

- Por eso te quiero.- me hizo ojitos y se recostó a la puerta.

Entre al baño y MARCOS estaba atado de manos y vendado, ANUEL estaba justo en la puerta.

- Le voy a cortar con una tijera la ropa, disculpe pero...

- Hazlo, confió en ti MEL. Solo perdona si... si mi cuerpo reacciona a tu tacto, pero me será muy difícil...

- Shhh... Perdóname tú a mí, yo te metí en esto y lo que dijo EFREN.

- Tranquila.- asentí, como si pudiera verme-

- Voy a cortar, solo trata de no moverte, me da miedo cortarte o hacerte daño, las tijeras parecen de carnicería y debo cortar tu pantalón y la camisa- escuche una risa queda de parte de MARCOS, tal vez eran nervios, yo los tenía a flor de piel, comencé mi tarea con el máximo cuidado que le podía imprimir, cuando ya se encontraba en bóxer.

- Si quieres los dejas, solo si es imperioso al final me los quito.

- Está bien- dije por lo bajo, en ese momento sentí a ANUEL a mi lado, le quitaba la venda a MARCOS que me miro como con pena mientras rápidamente me colocaban la mía. Comenzamos la tarea como cuando él me bañó, me daba indicaciones de donde estaba el jabón y comencé a esparcirlo por su muy amplia espalda, él se tensaba- relájese, por favor, trate de disfrutar el baño, no creo sea tan mala en mi tarea- dije queriendo suavizar la intensidad de la situación.

- Ese tal vez sea el problema, que se siente muy bien ser tu tarea- dijo con voz ronca como si hablara en un ronroneo.

Continúe por su pecho y abdomen, luego se volteo y continué por debajo de su trasero, aunque pase el jabón de largo por encima de su bóxer y por ello dio un respingo- perdón- anuncie pero el no dijo nada. -Gírese- y así lo hizo y enjabone sus piernas y cuando iba a subir la incomodidad de estar en cuclillas me hizo tambalear y upsss... mi nariz roso algo "firme". Oh, Dios, Dios, Dios, lo que paso por mi nariz fue, fue, fue...