-Amiga, me vas a tener que disculpar pero ese tal Santiago no está nada mal, de hecho no esta para nada mal.-me dice la pelinegra.
Vamos que no esta tan guapo.-le digo mientras comienzo a salir del parqueadero.
-Nena, pero tu estas ciega o qué, yo si le doy y no unas buenas recomendaciones.-me dice la pervertida que tengo por amiga.
Esta bien, puede que este pasable.-le digo.
-Además te fijaste en como te miraba, como si un león hubiera encontrado a su presa..-me dice.
Lo que yo creo es que tú ves mucho animal planet.-le digo.
-Sí aja, evade el tema pero yo se que allí hay chispa.-me dice
Vamos almorzar te parece y después iremos al departamento a recibir a los señores que irán a dejar el juego de sala.-le digo.
-Bien me parece una buena idea, además que muero de hambre.
acelero un poco la velocidad de mi auto sin excederme del limite que tengo permitido, al cabo de unos minutos aparco mi coche llegando a nuestro destino, Tris y yo bajamos del auto e ingresamos al restaurante mientras nos dirigimos hacia a una de las mesas que están disponibles.
+Buenas tardes chicas, ¿Qué desean ordenar?.-habla la mesera mientras espera a tomar nuestra orden.
-Bien, yo quiero Salmon al horno junto a una ensalada de caprese.-le digo
-Yo quiero un pescado asado a la parrilla y la misma ensalada que pidió mi amiga.- le dice Tris a la camarera mientras ella se va con lo anotado.
Al cabo de unos minutos tenemos todo lo que pedimos en nuestra mesa, esto se ve demasiado bueno, empiezo a comer pero siento un leve dolor en el pecho y hago una mueca debido a la punzada.
ahora no por favor
¿Estás bien?.-Tris me mira preocupada, ¿Has tomado la pastilla?.-me pregunta
Joder
No.-le digo, están en el auto, podrías ir a verlas, por favor.
Enseguida, nena como puedes olvidar algo así.-me dice mientras sale del restaurante a toda prisa y con la misma repidez que salió vuelve a ingresar.
Aquí está, vamos toma para que te sientas mejor.-me dice
le hago caso mientras me fijo en el lugar, por suerte no hay tanta gente y nadie se ha dado cuenta, no quisiera ser el centro de atención ahora mismo. termino por tomarme la pastilla y dejar que esta haga su efecto, ha sido un total descuido mío el no haberla tomado a tiempo.
No vuelvas a darme ese susto, me aterre como la mierda Cara, ¿Estás bien?.-me pregunta
Lo estoy, disculpa no se que me pasó, yo... lo siento..-le digo
Tranquila lo que importa es que ya pasó, ahora terminemos de comer así podremos ir a descansar.
terminamos de comer mas rápido de lo que me lo imaginaba, pagamos la cuenta y nos fuimos de allí, no se en que momento paso esto, o sea, ¿Cómo me descuide así? ahora mismo Tris esta manejando mi auto ya que ella no quiere que me agite, es tan exagerada, pero si lo pienso bien en cierto punto la entiendo ya que si fuera al contrario haría lo mismo que ella esta haciendo conmigo, recuesto mi cabeza en la ventana del auto mientras cierro los ojos y me dejo llevar por la música que sale de los parlantes del auto, no se cuanto tiempo pasa pero veo que hemos llegado al apartamento.
Te sientes bien.-me dice Tris.
Estoy mejor nena.-ella me da una mirada inquisidora.-de verdad le afirmo me siento mucho mejor.
Bien nena, eso esta mucho mejor, ve al cuarto yo iré a dejar el auto guardado.-me dice
asiento con la cabeza mientras me dirijo hacia la entrada del departamento hacia el ascensor una vez enfrente de nuestra puerta de mi dormitorio ingreso en el mientras le doy una repasada con la mirada la ultima vez que lo vi, fue junto a mi madre hace 6 años ese día yo tenía 15 años y fue un regalo por mi cumpleaños.
observo detenidamente el lugar mi padre no mentía al decirme que casi estaba equipado, tan solo faltaba un juego de sala, aquel que ya habíamos comprado el día de hoy, me dirijo hacia mi habitación por lo que veo esta bien arreglada las paredes son de un color rojo mi favorito, miro la cama es tan grande, se ve tan cómoda, tan calientita, me dan ganas de echarme y dormir por horas.
-Con qué aquí estás.-me dice Tris
Me necesitas para algo nena.- le digo
La verdad es que acaban de llegar los señores encargados de traernos el juego de sala y necesito que vayas a recibirlos yo tengo una emergencia femenina.-me dice.
¡Ow! Claro no te preocupes yo me encargo.-le digo
Gracias nena.
salgo de mi habitación hacia la sala del departamento enseguida tocan el timbre, abro la puerta y dejo pasar a los señores quienes se encargan de ingresar cada una de las cosas que compramos.
al cabo de una media hora todo esta en su debido lugar, firmo la hoja entrega y cancelo a los señores lo debido, les agradezco y los observo marchar.
Baia pero esto sí que se ve de lujo.-me dice Tris.
Lo sé nena, bien quieres ver una película, así mas tarde llamamos a un delivery para cenar.-le digo
Esta bien.
Nos pasamos el resto de la tarde viendo películas en el sillón de la sala comiendo palomitas y pasta la cual habíamos pedido a domicilio, ya estaba anocheciendo era hora de irle a dejar algo de comida a Owen.
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Dí Que Me Amas
RandomCara siempre había sido una chica fuerte ante todo y orgullosa como nadie, > eso lo había escuchado de mi madre antes de morir, y es que ¿cómo podía ser feliz si quizás tenía los días contados?. > aquellas palabras me las había dicho mi mejor amiga...