The beginning | lrh

xxii

Y el día había llegado.

Arrastraba mi maleta como podía mientras caminaba con las muletas. Pesaba más que de como la traía la primer vez, solo traía un par de sudaderas mas y varios cachivaches que compre como recuerdo de los lugares de la gira.

Tomé asiento en el primer lugar vacío que encontré. El areopuerto no estaba tan repleto de gente como esperaba, supuse que se debía a que aún era muy temprano. Acomode un poco mi gorro desteñido y me asegure de llevar mi boleto en mi mochila.

-Pudiste decirme que te vendrías a sentar, llevo buscándote diez minutos.

Luke se sentó junto de mi pasandome un vaso de cafe. Necesitaba un poco de calor dentro de mi cuerpo. Había decidido volar temprano ya que al día siguiente entraría a la escuela y esperaba poder pasar todo el día en el sofá viendo las novelas turcas con mi mamá. Allison tuvo que quedarse a resolver otras cosas de negocios por lo que regresaría sola. Jane vivía en California, la extrañaría demasiado pero he había prometer que siempre mantendríamos el contacto.
En cuanto a los chicos, me había despedido de ellos el día anterior luego de nuestra última cena juntos.

-Tambien te traje un brownie pero tendras que comerlo ahora porque no creo que te dejen subirlo al avión.

Sonreí tomando el pequeño trozo de pan de chocolate y lo comimos entre los dos.

-Extrañare está atención personalizada tuya -dije volteando a verlo.

-¿Solo me extrañarás por eso? ¡Vaya! -llevo su mano hacia su corazon- me estás lastimando.

-Que dramático -rode los ojos- también extrañaré eso. Extrañaré todo en realidad, sobre todo a Ashton. El es mi favorito -me golpeó levemente el brazo- ¿Que? El no me odiaba en un principio.

-Crei que ya habíamos superado eso.

Reímos al recordar lo idiota que antes era conmigo y aún más todas las vergüenzas que pase frente de él. Permanecimos charlando un rato más hasta que escuchamos que anunciaban mi vuelo. No quería irme por lo que no me levanté inmediatamente, podía perder el vuelo y quedarme un rato más esperando el siguiente, pero no me dejaría.
Fue el primero en ponerse de pie y tomo mi maleta, me ayudó a estabilizarme y acomodarme con las muletas.

Caminamos lentamente hasta la entrada para la sala de abordaje. Ya teníamos que despedirnos.

-Supongo que ya es hora de decir adiós.

-¿Ah sí? ¿Lo crees? -se burló ganándose un golpe en el estomago -solo me golpeas cuando lo único que yo hago es alimentarte y darte amor.

-Callate, Robert y abrázame.

Me obedeció sin pensarlo.  Me gustaba sentir sus brazos a mi alrededor, no era el chico más musculoso del mundo pero si lo suficiente para sentirlo en cada abrazo. Trate de regresarselo lo más que pude por las muletas. Quería que me cargara y me llevará al avión pero no podía pasar más allá de la entrada.
Escuchamos la segunda llamada del vuelo y si no me apresuraba se iría sin mi.

Se separó un poco para llevar una de sus manos a mi cuello para luego besar la comisura de mis labios. Desde aquella noche, no nos hemos vuelto a besar, sabíamos que así sería más difícil todo pero eso no quitaba el hecho de que quisiera bersarlo en cualquier momento. Se alejó completamente para mirarme de arriba a abajo.

-¿Que pasa?

-Nada -sus ojos tenían un brillo especial- solo que te ves tierna cuando te pones ropa cinco veces más ancha de lo que necesitas.

-Tu siempre te ves perfecto así que no necesitas halagos.

Le sonreí y fue mi momento de darle un beso en la mejilla.

-Asi que, nos veremos pronto.

-Nos veremos pronto -afirme.

Antes de alejarme, Luke de indico a uno de los trabajadores que me ayudara con la maleta. Era mi momento de irme. Caminé lentamente por ese largo pasillo sintiendo su mirada a cada paso, antes de doblar y acabar en definitiva con cualquier oportunidad de pasar más tiempo con él, me voltee a despedirme por última vez.
Ahí seguía, me regreso el gesto y me motivó a seguir caminando.
Suspiré y me aleje por completo de él.