Capítulo 38

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Antes de leer, escucha la canción que e puesto arriba 👆👆Por que me inspire en esta canción, para crear este capitulo 😍

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En el momento en que me subí al coche de Cameron me arrepentí, los chicos quisieron hacerme una fiesta de despedida, antes de irme a visitar a mi hermana y mi madre, fuera del país. Apoyé mi cabeza contra la ventanilla y solté un suspiro.

— ¿Te encuentras bien? —miré de reojo a Cameron y asentí. —si te sientes mal, te puedo llevar de nuevo a tu departamento—se ofreció.

Negué con la cabeza e intente sonreír, pero creo que me salió una mueca.

—Solo estaré un rato, es que aún me duele un poco la cabeza—dije. Una parte era verdad, pero también otra parte era mentira. Me pregunto que estará haciendo Tomás en mi departamento o si se habrá ido.

Llegamos un restaurante de pizza, me bajé del coche y cuando entramos al local, sentí inmediatamente el aroma a pizza. Me acerqué a la mesa de los chicos y me senté entre Loreto y Cameron.

Todos estaba hablando animadamente, yo sonreía y asentía. No tenía ánimo de estar aquí, sé que está mal, pero una parte de mí se muere por estar con Tomás y besarlo toda la tarde y noche, pero la otra mitad me dice que me mantenga firme en mi decisión, que estoy haciendo lo correcto en alejarme de él para siempre, ¿pero porque me siento tan triste y tan miserable incluso con mis amigos?

La cena transcurrió con tranquilidad y bromas, poco a poco se fue animando el ambiente, pero aun así me sentía desconectada y me mente volvía a mi departamento y en el beso de Tomás. Una hora después estaba ya en coche de Cameron rumbo a mi departamento.

Cuando llegué a mi edificio, me alegré; quería entra luego, quería saber si él seguía ahí o se había ido. Me despedí de Cameron y caminé tranquilamente a la entrada de mi edificio. Vi una sombra sentada en las escaleras, cuando me acerque más vi que era Tomás.

—Tomás—pronuncie su nombre y el levanto su mirada— ¿Qué haces aquí afuera?

—Eso a ti no te importa—dijo enojado, se limpió el pantalón y empezó a caminar hacia su jeep. <<Genial, ahora tendría que ser yo, la que lo persiga>>

Le tome de su brazo y él se dio la vuelta.

—No me toques—me soltó cabreado—vete con ese imbécil, ya capte el mensaje, ¡vale!

Me crucé de brazos y lo fulminé con la mira. Pero que mierda le pasa ahora este chico.

— ¿Qué te pasa ahora Tomás?

—Me pasa de todo en mi puta vida, me pasa que te acabo de ver con otro chico, me pasa que vi cómo le sonrías y el té sonría, me pasa que otra vez me acabas de romper mi corazón, me pasa que soy un puto desastre que nada hago bien, me pasa que lo único bueno que alguna vez tuve está saliendo con alguien más... Me pasa eso y mucho más, pero también tengo orgullo y sé cuándo perdí, y en qué momento tengo retirarme—soltó con odio y rabia cada una de esa palabra.

Solté un gruñido.

—No eres un puto desastre Tomás—le aclare es punto—te recuerdo que tú también me rompiste mi corazón, cuando yo si te vi besar a esa chica en los labios, no te hagas ahora la víctima, yo tampoco lo soy, ya somos bastante grandes para saber lo que hacemos por impulso.

—No importa ahora, ¿verdad? —Se acercó a mí y nos desafiamos con la mirada—ya nada importa. —dijo en un susurro.

Desvíe la mirada, no me hacía bien estar cerca de Tomás y sobre todo hablar sobre sentimientos.

Tomás paso al lado mío y se sentó en la escalera y se tapó la cara con sus manos. En mi mente recordé el principio de nuestra relación, la primera vez que Tomás me beso, inconscientemente lleve mi mano a mis labios, recordando ese beso que cambió todo de una amistad a amor, locura y pasión.

—Todo empezó cuando me viniste buscar en esta misma escalera—dice con voz rota—y parece que también es en donde quiere que termine.

Lo mire y me senté a su lado.

—No sufras Tomás, solo soy tu primer amor, así como tú eres el mío, pero te aseguro que no voy a hacer el último, lo nuestro no funcionó, pero no significa que tú nunca más vas a volver a amar alguien más—dije con voz rota.

Me dolía pensar en Tomás con alguien más, no quería, pero también sabía que era lo correcto, a donde iba esta relación; parecía que no tenía ningún sentido, se volvía cada vez más complicada, como los libros y películas. Esto era la vida real, ambos ya nos estábamos haciendo mucho daño y era imposible seguir sin hacernos daño.

—¿Cómo puedes ser tan cruel Samantha?.

Lo mire y tenía una mirada triste y perdida.

—No soy cruel, soy realista Tomás, ya nos hemos hecho mucho daño, tenemos que avanzar y la vida es cruel, no podemos vivir en una fantasía, nosotros no somos el señor Darcy y Elizabeth o Pach y Nora, no somos personajes literarios, la vida es una mierda Tomás, pero hay que avanzar.

Tomás se levantó y yo igual.

— ¡Joder! —grito lanzando puños en aire—en esto momento desearía ser uno de tus personajes literarios y decirte las palabras indicadas y precisas para que te quedaras a mi lado, me gustaría poder ser tu personaje literario y que tuviéramos juntos un final feliz, me gustaría tener el don del señor Darcy para alagarte y decirte lo cual bellísima eres para mí y que no puedo y no quiero imaginarme una vida sin ti, porque es en vano intentar quitar tu amor de mi corazón, es en vano intentar sacarte de mi cabeza, es mil veces en vano olvidarte... Yo jamás lo haré, al menos yo.

Mi corazón se partió en ese momento, pero me contuve las lágrimas, me mordí el labio inferior con fuerza, no quería llorar. Me quedé en silencio.

Él se acercó un poco más, pero mantuvo la distancia precisa, para que no me lanzara a sus brazos y me echara a llorar por él, por nuestro amor y en lo que alguna vez pudo ser.

—No me vas a decir nada más ¿verdad? —Yo me quede en silencio, apretando mis manos en puño, para no llorar—Te ves bellísima, te deseo lo mejor con él y espero que no sea un imbécil que no te sepa valorar—se acerca a mí, deposita un casto beso en mi frente—siempre te voy a querer Samantha.

Me dio la espalada y lo vi caminar en donde estaba estacionado su jeep, empecé a caminar detrás de Tomás, tenía que saber que no estaba saliendo con Cameron.

—Tomás—grité fuerte, él se detuvo y me miro por encima de mi hombro—no estoy saliendo con Cameron, me vino a buscar, pero estuve con mis otros amigos, no ha pasado nada entre él y yo.

Tomás se dio la media vuelta y se acercó a mí, me miró por un buen rato y una sonrisa empezó aparecer en su hermosa cara. Miré sus ojos azules los cuales brillaban de emoción y amor. Nos mirándonos y desafiándonos con las miradas.

Dejare este capitulo por aquí y me ire lentamente

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Hola criaturitas hermosa🦋❤

Hoy les traigo un nuevo capítulo espero que le guste😍

Un beso enorme y que tengas un hermoso día❤🤗

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Y también comentar la historia sus comentarios son muy importantes para mi, espero que tenga una muy buena semana y que siempre sean feliz y positvos🙌🙋💃

Un abrazo gigante de oso 🐼

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