Toxicity; Hwang Hyunjin.

20.

—Ya es hora de irme —Hyunjin miró la hora en su celular para después levantarse de mi cama.

—¿Tienes algo que hacer? —Pregunté curiosa aún sentada en esta.

—Tengo que ir a visitar a Yerin. Ha estado enferma —Peino su cabello frente a mi espejo.

—Que buen amigo es mi novio —Hablé sarcástica.

—¿Estas celosa princesa? —Levantó una ceja mirándome en su modo burlón.

—¿Por qué debería de estarlo? Confío en tí Hyunjin —Sonreí.

—No sabes cuento te amo hermosa —Se acercó a mi apretando mis mejillas para después dejar un beso sobre mi frente. Sonreí ante su tacto. —Te llamaré en la noche —Yo asentí acompañándole hasta la puerta. Después de verlo marchar cerré esta para después volver a mi mundo. Estaba sola en casa y no tenía nada que hacer así que aprovecharía para disfrutar de mi tiempo libre.

Me disponía a tomar algo del refrigerador cuando mi celular comenzó a timbrar. Era un número desconocido por lo tanto no atendí la llamada. Fue hasta la segunda vez que llamaron con insistencia en la que atendí la llamada.

—¿Min Eunji? —Preguntó una mujer desde el otro lado de la línea.

—Si soy yo. ¿Quién habla? —Su voz me era totalmente desconocida.

—Hablamos del Hospital Central... —Desde el primer momento en que escuché la palabra "hospital" mis rodillas comenzaron a flaquear. Mi corazón se aceleraba con un gran miedo. —Su madre Min Seulgi ha sido hospitaliza, sufrió un accidente —La sangre se fue a los pies haciéndome temblar. La mente se me despegó del cuerpo, trataba de concentrarme en las indicaciones de la persona al teléfono pero lo único que quería era correr a ver a mi mamá.

Colgué la llamada corriendo escaleras arriba, con rapidez traté de vestirme decentemente con lo primero que vi en mi silla. En este momento no me importaba seguir la moda. Estaba temblando mientras sostenía mis llaves y mi celular. No sería capaz de llegar sola hasta el hospital.

Llamé a Hyunjin. Dos...tres timbres y no atendía el teléfono. Estaba por caer de los nervios. Tres llamadas más sin atender y me di por vencida. Corrí por la avenida con la poca fuerza que encontraba, alce mi brazo tomando un taxi el cual con fortuna aceptó llevarme hasta el hospital.

Le pagué al amable conductor para bajarme corriendo hacía la puerta principal. Llegué hasta la recepción en un hilo de respiros, pregunté por ella dándome indicaciones para llegar hasta traumatología.

Al llegar al departamento me indicaron que había sido movida a terapia intensiva. Camine con prisa hasta llegar frente al gran cristal donde detrás de él se encontraba mi madre siendo observada algunos doctores. Ella estaba conectada a cables y más cables. Desde mi asiento podía observar su cara golpeada. Estaba por caer en colapso. Solo veía pero no sabía nada de su estado.

Necesitaba a Hyunjin a mi lado. Necesitaba aferrarme a alguien, necesitaba que alguien me apoyara y me dijera que todo estaría bien. Le llamé decenas de veces más, después de unas cuantas llamadas ya daba acceso directo a buzón sin siquiera timbrar antes. Apagó su teléfono.

Con manos temblorosas encontré el número de Jisung llamándole y pidiéndole al cielo que este atienda mi llamada.

—¡Hola Linda! —Atendió animado.