Debo olvidarte pero no (Juliantina)

Capítulo 63

Pov Valentina

_Chivis, ¿No tenemos fresas?_ rebice una vez más el refrigerador, buscando las dichosas fresas que tanto le gustan a Juliana.

_No señorita_ dijo sacando un zumo de naranja, estábamos preparando el desayuno para Juls. Bueno, más ella que yo. Yo sólo le había puesto la mantequilla al pan, y lo había puesto a tostar, dando un salto de victoria con el sexto pan que salió ileso; sin una quemadura y a la perfección. Debí de ser chef en mi otra vida o algo por el estilo_ Puedo ir al supermercado si quiere, el chofer me puede llevar señorita_

_Creo que con esto está más que bien, zumo de naranja_ comencé a enumerar, Juliana por lo regular estaba desayunando en grandes porciones, así que debía preparar en grandes cantidades_ pan tostado, frutas, gelatina, ¿Los Hot Cakes ya están listo?_

_Aquí están_ agarré los Hot Cakes con una espátula y los coloqué en la bandeja, encima de un pequeño plato de porcelana_ El zumo ya está listo señorita_ terminé de acomodar todo, verificando que no faltara nada más.

_Gracias Chivis, eres la mejor_ la cocina es un desastre, pero valió la pena... sostuve la bandeja, saliendo de cocina y subiendo las escaleras hasta llegar a la habitación que compartimos, en una maniobra abrí la puerta, quedando embelesada de pies a cabeza, admirando a Juliana, tenía los labios entre abiertos, la cobija cubría hasta la mitad de su abdomen, dejando la parte arriba al desnudo, dejando mucho que pensar en esa imagen, haciéndome pensar si esto es lo que quiero para el resto de mi vida, formando un nudo en el garganta al saber que tenía tanta perfección entre mis manos, ¿En verdad la merezco? ¿En verdad ha valido la pena todo lo que hemos pasado para poder estar juntas? Ya no tenía que pensarlo más, claro que vale la pena, toda ella vale la pena y querer una vida con ella no es suficiente, tal vez quiera vivir todas mis vidas a su lado. Viéndola despertar, viéndola sonreír, aguantando todas sus quejas, sus berrinches y aguantando como se enoja por lo más mínimo, entonces puedo decir abiertamente que todo ha valido la pena...

Caminé en puntillas, sin hacer mucho ruido. Dejando la bandeja encima de la mesita de noche y acostándome a su lado con mucho cuidado.

_Joder eres tan hermosa_ susurré delineando el contorno de su labio inferior, apreciando su belleza aún sin tener una gota de maquillaje, sólo ella y su naturaleza, dejándome sin aliento, y haciéndome suspirar para poder calmar las estúpidas palpitaciones aceleradas de mi corazón.

_Mi amor_ sonreír cuando respondió a mis caricias, se removió un poco, pasando su mano por sus ojos y dando un largo bostezo_ Mi amor_ volvió a repetir con la voz ronca, y aún sin abrir los ojos, levantó su mano libre y buscó mi cabeza, tratando de localizar mi boca.

_Cariño mis labios están aquí_ le dije riendo contra sus labios para luego darle un beso que respondió torpemente.

_¿Estoy soñando?_ me preguntó robandome un beso, ¿Qué si esto es un sueño? Le diría que si, porque así se siente. Se siente como si estuviera en un jodido sueño del cual no quiero despertar, un sueño que me hace más que feliz.

_Si, no abras los ojos. No lo abras aún, sólo disfruta de esto_

Enrredó sus dedos entre mi pelo, profundizando el beso, subiéndose encima de mi_ Quiero abrirlos, necesito ver tu sonrisa hermosa_ dijo abriéndolos, mirándome fijamente con sus ojos cafés y sonriendo ampliamente, haciendo contraer mi estómago_ Te amo_ tanta felicidad no es normal.

Cerré mis ojos lentamente, escuchando su te amo, escuchando como lo acariciaba al decirlo, como en verdad lo sentía, porque hasta en la forma de expresar un te amo, te das cuenta de si esa persona te ama. En esas pequeñas cosas te das cuenta de si hay amor, y amor es lo que más hay en las cuatro paredes de esta habitación, amor es lo que más se estaba sintiendo en el aire_ Dilo otra vez_ lo había escuchado más de un millón de veces, pero se sentía como si fuera la primera vez, con los nervios de punta, la respiración elevada y las típicas sonrisas de complicidad.