Capitulo 2 centro comercial

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Al parecer tendría que dormir en la cabaña de Emily, ella es amable, compasiva y respetuosa, la verdad me estoy llevando bien con ella, me agarrada

La manada es enorme y el lugar donde se ubicaba también, además de que es muy hermoso y está bien cuidado. Yo tan sólo seguía a Emily y dábamos muchas vueltas, aunque no estaba muy cómoda con seguirla ya que yo estaba acostumbrada a que los demás me siguieran ya que yo era o iba a ser un alfa, pero no podía protestar ya que en verdad necesitaba su ayuda y no sabía dónde quedaba su cabaña. Al cabo de un rato llegamos a su cabaña... o más bien casa, es realmente hermosa, de dos pisos, pintada de amarillo y blanco, además de que la decoración por fuera es hermosa y agradable.

-Pasa – Me dice mientras me regala una sonrisa cortés. Entro a su casa dándole una sonrisa de agradecimiento. Al entrar quedo maravillada, en serio su casa es muy bonita, tiene un decorado sutil pero elegante – Te muestro tu habitación y después vamos con Thomas que quiere hablar con nosotras.

- ¿Está pasando algo malo?

-No lo creo, si no hubiera traído aquí al omega Brad y al Beta que es Adam – Sonríe de lado y me mira.

Adam, a decir verdad un lindo nombre pero debía de saber por qué me trajo aquí cuando pudo dejarme morir allí, o que algunos cazadores me encontraran y me raptaran, no lo sé, además él no es el que toma las decisiones y se arriesgó.

Emily me guía por las escaleras y después nos encontramos con una puerta a la izquierda de lo que, al parecer, llevaba a lo que ahora sería mi habitación. Cuando entré me pareció acogedora, pintada de color crema, con una cama matrimonial en medio que estaba cubierta con sábanas y cobijas color blanco al igual que las almohadas, un buro cada lado de la cama, un ropero de lado izquierdo de la habitación y al otro extremo una ventana que dejaba entrar mucha luz del sol, además de que la habitación contaba con un baño.

- Espero que te guste – Me dice Emily con una sonrisa de lado

- Si, es linda, Gracias – Le devuelvo la sonrisa y pienso en mi anterior habitación, lo que me hace suspirar y cerrar los ojos por un momento, intentando dejar de pensar en ello

- Bueno, ahora vamos con Thomas. – Asiento con la cabeza y ella me mira enarcando una ceja, supongo que se dio cuenta de mi expresión.

Salimos de la casa y empezamos a caminar hacia donde esta Thomas, mientras caminamos ninguna decía nada, todo estaba en silencio y eso para mí es completamente aterrador ya que recuerdo la cara de mi madre asustada, las miradas de mis hermanos y sus pequeñas voces pidiendo que me quedara, los gritos de mi padre y su cara enrojecida por la furia y simplemente no quiero pensar en eso...

- ¿Te sientes bien? – Pregunta Emily sacándome de mi recuerdo.

- Si, descuida. – Suspiro y empiezo a jugar con las manos.

Llegamos a la enorme casa de Thomas y mi corazón empezó a acelerarse por alguna razón, supongo que pensaba que pasaba algo malo y por eso me querían ahí, sacudo mi cabeza y los malos pensamientos que traía y entramos a la casa, si soy sincera es muy bonita y grande, sillones color crema, paredes pintadas de rojo, con un mapa pegado en una de ellas, una lámpara encima de un pequeño mueble, y otras cosas más.

- ¿Para qué nos llamó, Alfa? – Emily hace una reverencia y al ver que yo no la hago me da un codazo en el estómago y yo la miro mal, a lo que Thomas ríe.

- Ella es alfa, descuida, Emily, no está acostumbrada a esto. – Sonrío agradecida por entenderme.

- Pero tendrá que acostumbrarse – Dice Adam entrando a la sala y recargándose en el marco de la puerta de la cocina, lo miro alzando una ceja y achinando los ojos, él sonríe de lado y levanta una ceja, también

Alfa y BetaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora