Alfa y Beta

Capitulo 22

Al despertar quería moverme pero no podía, pues, un brazo fuerte tomaba mi cintura mientras otra... Estaba en mi trasero, me congele a la vez en la que me sonrojaba, wow, jamás pensé estar así con alguien, pero al menos sé que nos quedaremos juntos hasta el día en el que uno de los dos muera... Y en verdad espero que sea yo, no sé lo que haría si algo le pasase, prefiero que sea yo quien muera y no el, que sea yo la que sufra y el viva e incluso... Que encuentre a alguien mejor.

Quito su mano de mí cintura, pero su mano seguía en mi trasero, no quería quitarme pero tenía que, el sueño de Adam muerto rondaba por mi cabeza así que me quité y corrí de inmediato al tocador, mi cabello no esta tan despeinado, mis labios estaban resecos y mis ojos estaban algo apagados, quiero huir de todo, han pasado tantas cosas que no se… creo que me está afectando lo cual no dejaré que siga pasando, quisiera que Sara fuera diferente pero... En parte la amo porque sin ella no hubiera huido, no hubiera encontrado esta manada, no hubiera conocido mi verdad, no estaría con Adam en este momento, en parte se lo agradezco y mucho, pero cambiaría todo esto por la confirmación de que Adam esté bien.

- Luce - Me dice aún adormilado - Eres una mala persona por lo de ayer - Me reí y en poco tiempo ya lo tenía atrás de mi abrazándome - Te quiero linda, mucho - Me besa la cabeza y me giro para verlo, esos hermosos ojos azules oscuro los cuales me hace estremecer.

- Si, yo también,  debemos....

Escuchó un estruendoso ruido, y después de eso entra Perrie con Michell, ambos exaltados, me extrañe demasiado y se escuchó pisadas arriba de nosotros, pisadas que corrían de aquí para allá, y varios golpes y gritos, no sé lo que pasaba, pero debo de admitir que el miedo me invade y no es algo que digas "ya pasará" es un miedo que dices "Será peor". Miré a los tres y Adam tenía la misma mirada desconcertada que yo, lo peor es que anoche, cuando me paré en la madrugada intenté contactar a mis hermanos ¡Adivinen! No estaban, no contestaban, es más, ni si quiera la conexión pasaba, simplemente estaba en blanco, no sé si están bien, si están vivos, si me están buscando, si están... Oh no, eso sería lo peor que fueran rehenes de Sara...

- ¿Qu...? ¿Qué sucede? - Mi voz salió un poco cortada pero no había que hacer, estaba demasiado preocupada - ¿Q.. Quien más está con nosotros?

- Sara - Dijo Perrie con miedo - No hay forma de salir y no tardarán en abrir, están forzando la cerradura.

Nos quedamos los tres pensando mientras escuchábamos cada golpe que daban al suelo, no quedaba tiempo, no había ventanas y no podíamos salir más que...

- La puerta - Susurré - ¡La puerta que no se pueden abrir!

- Pero no sabemos la clave - Dijo Perrie - Hay que descifrarlo.

- Vamos.

Los tres salimos disparados de la habitación para llegar a la puerta, era enorme, de hierro, y tenía varios seguro, la cerradura abajo de ella tenía una media luna, era de código, la cerradura brillaba y en parte se veía aterradora ya que era toda negra y tenía un rayo plateado.

- Veamos... ¿Tu cumpleaños? - Pregunté.