Capítulo 8: Narrado por Adam

15.5K 978 19
                                    


Narra Adam.

Luce sale de la casa y me quedo con los demás, desconcertados por lo que acaba de pasar. Miro a Carlota quien se va a la cocina y mueve su cabeza en señal de que la siga y así lo hago. Decido sentarme en uno de los bancos de la cocina quedando frente de ella.

-Luce salió porque tuvo un recuerdo de cuando se fue de su manda y dejo a su familia – Lo miro serio cruzando los brazos, esperando a que siga diciéndome – Pero siendo sincera aún no se que fue tan malo como para que ella se fuera corriendo de su hogar. – Suspiro mientras nos quedamos un momento breve en silencio.

-La verdad es que cada que la miro y sacamos ese tema se disculpa, baja la cabeza y se va, cuando por lo regular muestra aires de superioridad y fortaleza – Carlota niega con la cabeza – Debió ser algo muy malo – Cambia su cara de seriedad y la reemplaza por una pequeña risa juguetona.

-Le he agarrado cariño – Admite con un tono dulce en su voz, le regreso la sonrisa – Se que no soy la única y los demás terminaran por agarrarle cariño, comenzando por ti – Me guiña un ojo y sale de la cocina

Me quedo desconcertado pensando en sus palabras y en su tono de voz antes de salir ¿Qué quiso decir con "comenzando por mi? No es que Luce me caiga mal o no la soporte, pero, aparentemente siempre que nos vemos nos molestamos mutuamente y peleamos, en modo de juego, pero lo hacemos, nunca nos hemos sentado a charlar o algo que no sea pelear. Si, tal vez me agrade y en un futuro le agarre cariño pero ¿por qué lo dijo en ese tono?

Frustrado tomo mi cabello entre mis manos y le doy un ligero tirón mientras suspiro y pienso en Luce, luego el pensamiento de que aún no he encontrado a mi mate pasa por mi mente, y es verdad no la he buscado ni encontrado ni si quiera tenido cerca pero no es algo que desee mucho.

Tomo un vaso y sirvo agua en él para después tomármelo muy rápido y salir de la cocina dejando de lado el tema de Luce y las palabras de Carlota rondando por mi mente. Me siento al lado de Emily quien me sonríe, mientras que Thomas está en frente de nosotros mirándonos.

-Quiero que le tengan paciencia a Luce, a de ser muy difícil cambiar de posición tan drásticamente y pasar de ser la que protege y ordena a ser la que necesite protección y recibe órdenes, esté de acuerdo o no. A demás dejó a su familia y es algo difícil de... - Thomas guarda silencio al escuchar un aullido agudo que es a penas audible, aún así ese aullido no dura mucho y de inmediato cesa

Reconozco esa forma de aullar, miro a Carlota quien también reconoce el aullido y todos nos paramos de nuestros lugares, esperando las órdenes de Thomas.

- Vamos a buscarla – Dice mientras mira a su esposa intentando tranquilizarla – Tomen mantas por si son necesarias y estén preparados en todo momento, tomaremos diferentes direcciones.

Tomo una manta y me separo de los demás, yendo solo a buscarla. Corro lo más que puedo manteniendo mi ritmo y tratando de no convertirme, aunque en forma lobo tenga mejor olfato y pueda encontrarla más rápido no podría ayudarla si es que está herida. Con forme voy corriendo me voy dando cuenta de que mi corazón late más rápido una sensación se angustia se incorpora en mi ser. Ella me preocupa. La sensación e va apoderando de mí y me da fuerza para correr aún mas rápido ya que encuentro su olor.

Tras seguir corriendo un poco más al fin la encuentro y lanzo un suspiro de alivio. Luce está ahí, en forma lobuna, tirada en la tierra, herida e inconsciente, me acerco más a ella con la manta en mano y noto una ligera luz amarilla que desprende de su ser y parpadea conforme su corazón late. Sin darme tiempo a la curiosidad y a lo extraño que es esa luz la envuelvo en la manta cuando empiezo a ver que su pata empieza a tomar forma humana, como sus huesos de nuevo crujen y su pelaje va desapareciendo y dando paso a la suave piel de Luce. La tomo en brazos cargándola y ella abre ligeramente los ojos, mirándome con una ligera sonrisa en sus labios.

- Al fin haces algo bien... – Cierra sus ojos un momento más y yo suspiro, al menos sé que, de alguna manera, está bien.

- Sí, pero al parecer tú no – Su respiración y latidos de corazón están bien y estables así que me apresuro sin tanta preocupación.

- Adam...

-Calla, luego hablas – Asiente con la cabeza para después perder el conocimiento de nuevo, pero en ese instante olfateo algo extraño, no el aroma de un lobo, algo más. Me pongo en posición de pelea pero de inmediato el olor desaparece.

Corro esperando que el intruso no vuelva o no nos alcance. A lo lejos logro divisar la enfermería y sin importar que todos los de la manda me miraran extrañado sigo corriendo con ella hasta llegar al lado de una enfermera quien me introduce dentro de la enfermería.

- ¿Qué pasó? – Pregunta quien atendió a Luce la primera vez que la traje aquí.

- No lo sé, sólo la encontré tirada allí, en su forma lobo – La dejo en la habitación 15 que es a la que me había guiado la enfermera y la observo ahí, inmóvil y en la camilla

Salgo de la habitación como me ha indicado la enfermera y doy un largo suspiro antes de avisarles a los demás que ya la están atendiendo.


Alfa y BetaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora