ALMA MÍA - Madelaine Petsch EDITANDO

18

Lo bueno no me dura y lo tengo más que claro, hay algo en mí que repele la plenitud y apenas la alcanzo, la pierdo.

Cole me invitó a desayunar, era un día frío pero creo que necesitaba realmente salir un poco de la casa, específicamente de la cama, porque mi novia no se cansa jamás y además estábamos demasiado pegadas, no quería sentir ahogo así que mejor prevenir que lamentar.

Fuimos a una cafetería donde según Cole vendían el mejor café con leche de mundo y con el frío que estaba haciendo no nos vendría nada de mal

_: Un café con leche y una medialuna bañada en chocolate - dije amablemente

Cole: nutritivo eh – dijo mirándome para luego dirigirse a la mesera – yo quiero lo mismo, por favor

Mesera: enseguida traigo su pedido – dijo mirando coquetamente a Cole – ¿necesitan el periódico del día?

Cole: sí, claro – respondió él nervioso

_: ¿y eso? – dije riendo

Cole: eso mi querida amiga es como yo lo hago, yes – dijo haciéndose el galán

_: en tres segundos la doy vuelta Cole, no te creas tanto, ¿quieres probar? – dije ladeando la cabeza, levantando las cejas y sonriendo

Cole: no gracias, necesitamos heterosexuales, déjanos chicas

_: solo tengo ojos para una – dije sonriendo

Cole: y para Lili – soltó mientras yo lo fulminaba con la mirada

_: No Cole, convéncete para mí solo existe Madelaine

Mesera: aquí está el periódico de hoy, sus cafés y medialunas

Cole: gracias preciosa – dijo para guiñarle el ojo – y en las noticias de hoy – dijo imitando la voz de un conductor exageradamente mal mientras leía la portada del diario

_: eres malísimo para esto, pásamelo yo lo hago mejor – dije tendiendo la mano para que me entregara el periódico pero se rehusó

Cole: no puedes ver esto, digo, debes verlo, pero, sabes a veces los medios dicen muchas cosas que no son y bueno, tú sabes – dijo notablemente nervioso

_: ¿qué ocurre Cole? – dije comenzando a preocuparme

Cole: nada - dijo mirando a su alrededor como buscando ayuda

_: Cole...

Cole: es Madelaine

_: ¿ah? – dije riendo mientras arrebataba el diario de sus manos y leía la portada del periódico creyendo que me estaban jugando una broma pero no

Cole: quizás no es cierto

_: "Travis Mills y su nueva novia se muestran felices por las calles de nuestra ciudad"

Cole: puede ser un error – dijo tratando de consolarme

_: se están besando Cole, no veo el error – dije lanzando el periódico a un lado mientras me agarraba la cabeza con ambas manos

Cole: Madelaine está loca, pero jamás te haría esto – dijo seguro

_: por Dios Cole, Madelaine nunca ha sido fiel en su vida – dije cabreada

Terminamos de desayunar y fui a casa, la verdad no comí nada, me dolía mucho el corazón, no quise derrumbarme frente a Cole, no es que no fuera mi amigo, es que no sabía como consolarme, bueno, ni él ni nadie más que Madelaine... así que me fui llorando hasta la casa. Cuando estaba por entrar al departamento y probablemente enfrentar a mi novia o ex novia, llegó a mi teléfono un mensaje, bueno eran varios, obviamente eran de Travis, decían que me alejara de su mujer, que ella no era "rara" me envío un montón de fotos de ellos juntos y felices, pantallazos de conversaciones, había que ser estúpida para no darme cuenta de lo que pasaba, pero me sentí tan miserable, tan devastada, por primera vez en la vida, sentí como mi corazón se rompió en mil pedazos, no pude entrar a mi departamento, no pude enfrentarla, me fui, no sabía qué hacer ni a quién recurrir, Madelaine lo era todo para mí y estaba tan jodidamente enamorada, realmente me había roto y toda la confianza que deposité en ella estaba destruída, me alejé lo más rápido que pude y corrí hasta no poder respirar, me senté en una banca de un parque mientras sentía que pequeñas gotas comenzaban a caer sobre mí, pero no me importaba, no podía sentir nada más que ese dolor punzante en el pecho, no sabía dónde ir, así que decidí llamar a la única persona que me había hecho sentir mejor durante este último tiempo fuera de la mentirosa de mi novia, Lili.

Lili: Hola ojitos negros, que grata sorpresa tu llamada – contestó alegre como siempre

_: ¿Li-Lili puedes venir a buscarme? – dije con la voz rota y congelada

Lili: ¿qué pasó?, ¿te asaltaron?, mándame tu ubicación – dijo notablemente preocupada

_: yo, no, es – y no pude decirle porque comencé a llorar desconsoladamente

Lili: ya está cielito, voy a buscarte, envíame la dirección, voy por mi auto

Envié mi ubicación a Lili por mensaje y esperé llorando en silencio su llegada, tenía un millón de llamadas de Madelaine y miles de mensajes que no quería abrir, seguramente ya se había enterado de que está por todos los diarios y que me dejó como una estúpida frente a todo el mundo.

Pasaron un 15 minutos y sentí un cuerpo abrazarme, no tuve ni que abrir los ojos, sentí su perfume y su calidez, era la rubia rescatándome.

Lili: ven aquí – tomó mi mano y me subió a su auto, me puso el cinturón y yo estaba como ida, ya no podía llorar más

_: gracias rubia – dije temblando y mirando al piso

Lili: ¿quieres que te lleve a tu casa?, ¿quieres que llame a Madelaine? – dijo posando su mano suavemente sobre la mía

_: no, por favor, no me lleves a casa, no me lleves con ella – dije volviendo a quebrarme, ella pareció entenderlo todo y me volvió a abrazar

Lili: no llores corazoncito, vamos a mi departamento, ahí podremos hablar tranquilamente – dijo logrando calmar mi llanto al menos por unos momentos

Llegamos a su piso, era muy ella, muy acogedor, apenas entramos me preparó un baño de tina y me dijo que me sintiera cómoda, entré a la bañera y no pude evitar recordar esa vez borracha en que Madelaine hizo lo mismo por mí, comencé a llorar otra vez, porque su cariño se sentía tan real, pero quizás es real, solo que como amigas, quizás nunca me vio como mujer, pero no entiendo, ¿cómo podía tocarme así?, ¿cómo podía besarme así?, ¿cómo podía fingir tan bien?.

Lili: toc toc – dijo entrando en el baño y yo instintivamente me sumergí un poco más en el agua que estaba llena de burbujas

_: gracias rubia, eres tan buena – dije sinceramente

Lili: Verónica me contó lo de los diarios hace unos minutos - soltó de pronto

_: Dios, ya todo el mundo debe saberlo – dije avergonzada

Lili: dice que Madelaine te está buscando como loca por todas partes

_: no volveré a caer en su juego

Lili: quizás no es cierto o son fotos trucadas – dijo acercándose a mí y agachándose a la altura de mi rostro para acariciar mi mejilla

_: no lo son, ella es así

Lili: no pienses en eso ahora sí – dijo mirándome profundamente mientras acariciaba mi cabello

Quería besar a Lili, realmente lo deseaba, pero sentía que era por despecho, que era por rabia y la rubia no merecía algo así, sin embargo no podía resistirme, estábamos acercándonos y parecía inevitable lo que iba a ocurrir