Todo es real: Deseo

-UNA HISTORIA DE PIRATAS-

Antwan seguía un poco cabizbajo, él no se abría tan fácil al momento de tener que contar algo importante o muy secreto en su vida, arrancó el auto de nuevo y me sonrió, al volver a mi cabaña ambos bajamos y él me espera antes de entrar para tomar mi mano.

—Me sienta de maravilla tenerte de nuevo, me hiciste mucha falta.

—Y yo no sé cómo pude vivir sin ti toda mi estadía en este lugar. — abre la puerta y me indica que entre.

Mi padre está sentada intentando ver la tv y comprender como funciona, mi padre por otro lado le intenta explicar ya que él también había estado bajo la influencia de Lidia y lo mandó a un lugar parecido, así que de tecnología... sabía. Cuando nos ven entrar ambos dejan de discutir teorías televisivas.

—Creo que estoy muy nervioso... —me dice Antwan y siento que aprieta mi mano, cosa que no logro comprender.

—Desde que entré al mundo de la piratería he conocido su historia... Anne Bonny, la mujer pirata que desafió hasta a los piratas más fieros, la misma que defendió la nave de "Calico Jack" cuando Jack Rackham era el capitán y estaba ebrio al igual que toda su tripulación.—Lo miro sorprendida y después observo a mi madre quien permanece un poco seria pero no perturbada, ¡Y caído en cuenta! Antwan es fanático de todo lo que mi madre ha forjado en el mundo de la piratería, entonces mi madre suspira, asiente y al fin abre la boca.

— ¡Ese bastardo de "Calico"! Aún lo recuerdo como si fuera ayer, la armada nos había tendido una trampa, pero justo cuando tomaron la nave todos los hombres estaban ebrios y ninguno se levantó en armas, ¡Ni siquiera el mismo "Calico"! Yo en esa época lo seguía a donde fuera, tenía mil contactos que me beneficiaban pero nada se compara con abandonar a su tripulación en un momento así, yo y mi camarada Mary peleamos lo más que pudimos pero toda la armada iba tras nuestras cabezas, estábamos en la cima, así que cuando nos capturaron a todos y "Calico" despertó amarrado todos sabíamos cuál sería su fin, ni siquiera me miraba, al llegar a Inglaterra nos separaron pero minutos antes de que lo llevaran a la orca recuerdo que no me quedé callada y se lo dije... "Si no quisiste pelear como hombre, muere como un perro" —Mi madre se pierde en sus pensamientos y después regresa la mirada a Antwan y le regala una media sonrisa. —Por su culpa Mary murió de fiebre en una cloaca, y yo... bueno yo disfruté verlo revolcándose en la orca.

—Vaya... había escuchado muchas versiones de ese acontecimiento pero... que usted misma me lo cuente es magnífico. —Mi madre sonríe y mi padre choca su hombro con el de ella jugando.

—Y por lo que veo ya recuerdas todo Lodwood. —suelta mi padre y Antwan se pone derecho.

—así es señor Black, es un honor saludarle de nuevo, y es magnífico porque me gustaría hablar sobre mi relación con su hija... —Dice Antwan aclarando su garganta y mi padre se pone de pie, es gracioso ya que Antwan es un pirata de pies a cabeza, cabello hasta los hombros que le queda encantador, cara de malvado, algunas cicatrices que demuestran que no ha llevado una vida fácil como pirata, y unos ojos color miel que derriten mi corazón, claro que solo el mío ya que para cualquier otro de sus enemigos lo haría temblar y le haría saber que meterse con el solo significa una cosa: muerte. Conmigo es otra cosa, el pirata sanguinario y malvado conmigo es dulce en su totalidad, me ama y me lo demuestra cada vez que me ve, así que con orgullo lo abrazo y miro a mi padre.